Después de 14 meses de negociación y presionados por los tiempos políticos, ha llegado al Senado de la República el texto del nuevo acuerdo trilateral que sustituiría al TLCAN. El nuevo gobierno espera “mejorar” la relación con Estados Unidos mediante un sometimiento sin condiciones a su contenido.
Jueves 4 de octubre de 2018
Tras catorce meses de negociaciones luego de que Donald Trump usara al TLCAN y el muro fronterizo como uno de sus principales tópicos de campaña, fue aprobado el texto final del acuerdo trilateral y ahora se encuentra en la fase de aprobación por los poderes legislativos de cada país.
Para Donald Trump la firma de este nuevo acuerdo logró que se pasara de tener el “peor acuerdo” al “más importante acuerdo” de la historia de Estados Unidos. Al regir el comercio internacional de estas tres importantes naciones, el nuevo acuerdo norma sobre el comercio de 1.2 billones de dólares en bienes y servicios.
Se acabó el “Tratado de Norteamérica”
Aunque los responsables económicos de nuestro país han tratado de minimizar el cambio de nombre de Tratado de Libre Comercio de América del Norte a Acuerdo, México-Estados Unidos-Canadá (AMEC o USMCA, por sus siglas en inglés), este cambio tiene importantes implicaciones ideológicas.
Cuando el TLCAN 1.0 fue negociado y aprobado a inicios de los años noventa, la promesa política del gobierno encabezado por Carlos Salinas de Gortari fue que esta firma permitiría nuestro ingreso al “primer mundo”, y con él la construcción de una región llamada “Norteamérica”.
En los hechos, las diferentes oficinas de análisis económico, estadístico y comercial de Estados Unidos y algunos organismos internacionales, no consideran a México como parte de “Norteamérica” sino de América Central.
Con el cambio de nombre está implícita la exigencia imperialista de Trump de que el acuerdo favorezca a las naciones (una en particular) y no a una región. El USMCA implica el fin del “free trade”, del Tratado de Libre Comercio de una región, y el inicio simplemente de un acuerdo trilateral.
El USMCA en manos del Senado mexicano
El domingo 30 de septiembre, rayando en el límite de los tiempos políticos, se sumó Canadá al acuerdo. El documento fue recibido por el presidente de la Junta de Coordinación Política, el morenista Ricardo Monreal, por parte de Juan Carlos Baker, subsecretario de comercio exterior de la Secretaría de Economía.
Ricardo Monreal ha anunciado una agenda con la que los integrantes de este órgano legislativo comenzarán a analizar y muy posiblemente aprobar este texto que aún no tiene una traducción al español. En los próximos días se reunirá con Jesús Seade -economista con una amplia trayectoria en negociaciones de libre comercio y como asesor de organismos financieros-, quien fue el representante del gobierno electo de AMLO para acompañar la renegociación, y con el futuro canciller del gobierno electo, Marcelo Ebrard.
Mientras tanto, el senado ya ha elaborado un punto de acuerdo en el que se congratula de esta redacción con la que culmina una negociación trilateral marcada por muchas presiones políticas. El senado espera poder iniciar la discusión del documento en comisiones desde la próxima semana, y aprobar el documento “sin raspones”.
¿Mejor un acuerdo de sometimiento que nada?
Tanto los nuevos integrantes del senado como diversos columnistas y economistas han señalado en medios de comunicación que siempre es mejor “haber alcanzado el acuerdo” que no tenerlo. Aunque casi todos coinciden en que al revisarlo con detenimiento habrán aspectos no favorables fundamentalmente para México y Canadá, el panorama económico es “mejor” ahora que sin el acuerdo.
La estabilidad del tipo de cambio se mantuvo casi sin cambios respecto al fin de semana previo a su presentación. Pero en México la inflación se mantiene con cuatro meses a la alza, lo cual la ha colocado en un 4.5% esperado para este año, frente al objetivo del 3% que se propuso el Banco Central; “es la principal tarea que tiene el Banco Central y no puede con ella”, versan muchos economistas actualmente.
El crecimiento se mantiene en un magro 2% anual, mientras que el gobernador del Banco de México espera que el tipo de cambio cierre el año en 19 dólares. Es decir que el panorama económico no es muy halagador, incluso con la aprobación de este nuevo acuerdo.
¿Qué papel tiene la aprobación del USMCA para López Obrador?
La aprobación del nuevo acuerdo trilateral le permite otras cartas al nuevo presidente electo. Si bien AMLO había anunciado desde su campaña que no asumiría ningún enfrentamiento abierto por Trump por su política imperialista, y que su política sería de “amor y paz” pese a la construcción del muro y de las condiciones inhumanas en las que viven y son separados miles y miles de migrantes.
Durante este miércoles 3 de octubre Donald Trump incluso llamó telefónicamente a AMLO para felicitarlo por su papel en la firma del acuerdo. Trump publicó un tuit donde asegura que trabajará “muy bien y juntos” con AMLO.
Sin duda alguna, este acuerdo en la renegociación le da margen a AMLO de mayor actuación con el gobierno de Trump. Aunque no necesariamente sea para defender la soberanía nacional, a los connacionales ni enfrentar la sumisión al imperialismo.
El contenido del USMCA
Como ya se había anunciado previamente, el USMCA establece nuevas reglas de origen para la industria automotriz, en donde ahora el 75% del vehículo debe de ser producido en la región (antes era el 62.5%). Además de ello, del 40 al 45% deben de ser producidos en zonas donde se paguen más de 16 dólares la hora.
En su hoja de información para la prensa, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos afirma que uno de los sectores más beneficiados es el de los agrobussines (incluyendo los negocios con transgénicos). Esto no es menor ya que México y Canadá son receptores del 28% de la exportación total de alimentos de Estados Unidos.
También se han ventilado algunas importantes consecuencias respecto a los derechos de propiedad y del comercio digital que establece el nuevo acuerdo. Aunque habrá que esperar a conocer con detalle el texto oficial para calcular el impacto pernicioso que esto tendrá en nuestro país.
