La Confederación de Estudiantes de Chile (CONFECH), el Colegio de Profesores y la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (CONES), convocaron para el jueves 19 de este mes, a la primera marcha nacional por la educación del año. Frente a esto, ya hubo asamblea de FEUA donde se abordó la convocatoria de la marcha con ambigüedad de sus direcciones.
Lunes 2 de abril de 2018
El llamado a la movilización se da en el marco de que a menos de un mes del gobierno de Piñera, el Tribunal Constitucional falló a favor del lucro en la educación. Aunque con la ley de educación superior de la Nueva Mayoría no se eliminó el lucro, el fallo del TC es un ataque al movimiento estudiantil y a la educación pública, fortaleciendo el mercado en la educación.
Este ataque y el llamado a movilización del 19, fue parte de la discusión en la asamblea convocada por la Federación de Estudiantes de la Universidad de Antofagasta (FEUA).
Sin embargo, la FEUA, encabezada por las JJ.CC, no se posicionó a la altura para poder responder a la pelea histórica que ha llevado el movimiento estudiantil, contra la educación de mercado y el lucro y por una educación gratuita para todos y todas en las universidades públicas.
A pesar del golpe a la educación pública, la FEUA no ve la importancia política de paralizar el 19ª, argumentando que de todas formas no habría clases por la semana mechona, sin proponerse decididamente enfrentar al gobierno de Piñera en las calles.
Ante esto, cabe preguntarse: ¿La FEUA realmente va a jugar un rol de organizador de la paralización y marcha del 19 en unidad con los profesores, o solo va a posar para la foto en marchas por “hitos” y mesas de negociación que jueguen al desgaste del movimiento estudiantil como ha pasado en estos últimos años?
Karla Peralta, estudiante de medicina e integrante de la agrupación Vencer en la UA, nos comenta: “La marcha del 19 de abril no puede ser una marcha aislada, sino que tenemos que buscar hacer de ella un Paro Nacional efectivo, en unidad con los profesores y trabajadores que vienen organizándose y peleando contra los despidos antisindicales, para volver a poner al centro el debate educativo. Debemos apostar a que sea el puntapié inicial en el desarrollo de un plan nacional de movilización para enfrentar a la derecha, imponiendo la agenda del movimiento estudiantil y pasar a la ofensiva, por una educación gratuita y pública, mediante aportes basales y con acceso irrestricto, que es la única forma para poner fin al lucro y sacar al mercado de la educación”.
