Verdaderas prioridades. Con 18 millones de pobres, Alberto y Cristina anuncian beneficios para las patronales rurales

La imagen de Cristina Kirchner y Alberto Fernández anunciando juntos medidas favorables a las grandes patronales del campo fue el mensaje político más importante de este jueves. Un mensaje cuya finalidad fue demostrar que el giro a la derecha que se puso en escena con los cambios de gabinete sigue y se profundizará.

Ocurrió en el marco de la presentación del proyecto de ley de Fomento al Desarrollo Agroindustrial, que fue enunciado por Julián Domínguez, el nuevo ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, tras la crisis política que sacudió al oficialismo pos derrota electoral. Acompañó también la presentación el jefe Gabinete Juan Manzur.

Julián Domínguez señaló que el proyecto de Ley de Fomento al Desarrollo Agroindustrial "encarna la participación de todos los intereses de la cadena agroindustrial", ya que en su elaboración fue pactada con mas de 60 entidades agropecuarias.

Te puede interesar: ¿Prioridades?: el proyecto del Gobierno para beneficiar al agropower

El sector prometió "generar empleo decente, unos 700 mil nuevos puestos directo e indirecto de empleo para 2030". Esta sería una falsa promesa los especialistas advierten que mientras se multiplicó la superficie implantada en la región pampeana y la producción de granos, cayeron 12 mil los puestos de trabajo sectorial y 5.450 en la producción de granos y oleaginosas.

Durante su discurso, Alberto Fernández reivindicó el proyecto de ley como el producto de la cultura del encuentro y el diálogo. La presentó, al mismo tiempo, como una base para el crecimiento económico futuro, apostando al desarrollo de las inversiones con la finalidad de garantizar los pagos de la deuda pública.

Fernández aseguró que se está dando "un paso para ponerle fin a una disputa de años, entre el agro y la industria y la industria y la tecnología". También agregó que este proyecto significa "campo con más tecnología, más producción y la industria asociada al campo, para producir alimentos industrializados".

El acto tuvo lugar el mismo día que el Indec ratificó que la pobreza alcanza a cerca de 18,6 millones de personas en todo el país, las máximas autoridades miraron literalmente para otro lado. Poco importan las palabras o las frases hechas. En los hechos, se viene confirmando que el peronismo le habla al gran empresariado, confirmando que sus ganancias serán resguardadas.

Te puede interesar: Tras ajustar y eliminar el IFE, la pobreza afecta a 18,6 millones de personas en el primer semestre de 2021

El mismo día en que el Gobierno anunció ventajas impositivas para el sector de las patronales rurales, en la Ciudad de Buenos Aires el Gobierno de Larreta desalojaba brutalmente a familias pobres de un predio ubicado en el barrio Carlos Mugica, más conocido como Villa 31. La dureza de las imágenes no mereció una línea en Twitter del presidente, la vice o algunos de sus principales referentes.

Te puede interesar: La Policía de la Ciudad desalojó a familias y chicos en el Barrio 31

El giro hacia la derecha quedó confirmado, también, en otro episodio que marcó la jornada. En un movimiento acelerado, el bloque de Diputados del Frente de Todos salió a despegarse de la iniciativa individual de un diputado que proponía nacionalizar los depósitos bancarios.

Esto fue lo que criticó desde la izquierda Nicolás del Caño. El dirigente político y candidato a diputado nacional por el Frente de Izquierda Unidad marcó que el objetivo del Gobierno es conseguir dólares para la pagar la deuda pública.

Mientras el INDEC informa que hay casi 19 millones de pobres en Argentina, el gobierno anuncia beneficios a las grandes patronales del agronegocio para aumentar las exportaciones, conseguir dólares y pagar la deuda fraudulenta. Recetas que traerán más pobreza y miseria.

— Nicolas del Caño (@NicolasdelCano) September 30, 2021