Este jueves el cobre volvió a marcar un aumento en su precio, llegando casi a los US$3,8 la libra alcanzó su mayor precio desde octubre del año 2012, mientras tanto los contratos a futuro del metal rojo también ascienden en los principales mercados del mundo. Las noticias son grito y plata para los grandes grupos económicos, y la pobreza en América Latina se duplicó producto de la crisis económica y sanitaria. Es así que Chile refleja esta realidad, mientras los multimillonarios doblan sus fortunas como Luksic, el pueblo trabajador y pobre paga las consecuencias de la crisis. Entrevistamos a Lester Calderón, trabajador de la industria y candidato a gobernador por la región de Antofagasta.
Viernes 12 de febrero de 2021
El efecto caída del cobre producto del confinamiento producido por la pandemia del Covid-19 quedó atrás para los grupos económicos ligados al metal rojo. Este jueves el commoditie registró un alza del 0,15% registrando su valor en US$3,76 la libra, lo que es el precio más alto de los últimos ocho años, revirtiendo así los valores del confinamiento, ya que desde marzo del 2020 aumentó su valor en un 80%. A la vez, los contratos a futuro del cobre aumentaron un 0,8% llegando a los US$3,69 la libra.
El aumento del precio de los commodities tienen sustentos por ahora debido al posible paquete de estímulo en Estados Unidos por US$1,9 billones, lo que llevaría a una mayor demanda del metal, a esto se suma que durante la semana China dio a conocer que su Banco tiene liquidez, lo que esperanzó a los inversionistas y por último la presión alcista del cobre viene de la mano con la caída del 12,5% de la producción del metal rojo.
Ante esto la multinacional financiera estadounidense Morgan Stanley planteó que “casi todas las señales indican que hay un mercado restrictivo” reafirmando la posición alcista y que los riesgos de precios estarán al alza entre los próximos tres a seis meses.
Por su parte la financiera JP Morgan, plantea que al parecer los commodities estarían por sus últimos reportes abriendo un nuevo súper ciclo, basado en el aumento de del precio no sólo del cobre, sino también del maíz y el petróleo que se dispararon, y por la supuesta apuesta de Wall Street a una recuperación económica de la pandemia y cubriéndose contra la inflación.
De todas maneras hay que ver hasta dónde se desarrolla esto, sabemos que a nivel internacional aún hay una crisis económica abierta desde hace más de una década, donde producto de la pandemia la desocupación se cuadriplicó comparado a la crisis del 2008. Pero también hay un factor que no toman en cuenta las empresas financieras y es el factor de la lucha de clases, la cual podría dar un salto ante toda la política de reducción de costos que los capitalistas están llevando a nivel mundial, como lo dio a conocer el economista marxista Michel Husson, respecto a la orientación de la burguesía mundial ligada a la “destrucción total, quiebras, planes sociales, regímenes de jubilación anticipada, bajas especiales, ampliación y flexibilización de la jornada laboral, ampliación de plataformas y de trabajo el domingo, todo se implementará.”
¡Recursos hay!: conquistemos un Plan de Emergencia con el impuesto extraordinario a las grandes fortunas mineras
A nivel nacional, también encontramos parte de aquellos grandes empresarios que han aumentado groseramente sus ganancias en medio de la pandemia a costa de la vida de miles de familias trabajadoras. Uno de ellos es Luksic, quien aumentó su fortuna en US$9.800 millones, y otra es la firma imperialista BHP, dueña de Minera Escondida, Spence y Cerro Colorado, pero sólo en Minera Escondida obtuvieron US$5,9 mil millones en ganancias brutas por concepto de ventas.
Lester Calderón, candidato a Gobernador Regional por el Partido de Trabajadores Revolucionarios, nos comentó "vemos cómo las autoridades en la región de Antofagasta no están interesadas en detener el trabajo no esencial como lo es la minería, a pesar del aumento de los contagios que en comparación a la primera ola en esta segundo fue mucho más. Es más, con el Plan “Salvemos Vidas”, iniciativa encabezada por el intendente Rodrigo Saavedra, militante de la derecha de Renovación Nacional, sólo se buscó analizar los números en las faenas mineras, para seguir asegurando la producción y ganancias para las grandes empresas mineras."
Como si fuese poco, el día martes salió a celebrar ante la prensa la donación que hizo Minera Escondida de $200 millones, con la cual contratarían 13 profesionales encargados de la trazabilidad y algunos insumos. Respecto a la donación de Escondida, Calderón planteó que "Esto es una burla para la clase trabajadora y sus familias que se han arriesgado en los lugares de trabajo desde el inicio de la pandemia, si pensamos que la donación de Escondida no es ni siquiera el 1% de las ganancias brutas por ventas."
Semejante acción, no hace más que demostrar que los recursos existen para levantar un serio Plan de Emergencia para enfrentar la crisis sanitaria, por lo que es necesario impulsar una gran campaña en camino a la lucha por arrancarle impuestos extraordinarios del 20% a las grandes fortunas mineras. Por último refiriéndose nuevamente a lo que la minera de BHP hizo, Lester Calderón remarcó que "si con la donación de Escondida pudo contratar personal que no había en el Hospital Regional de Antofagasta, el que viene colapsando, no cabe duda que podríamos enfrentar con muchos más profesionales y trabajadores de la salud para terminar con el agobio de la primera línea que enfrenta la pandemia, optar por salarios de emergencia para las familias desempleadas y trabajadores informales partiendo de la canasta básica familiar de $550.000, y por qué no garantizar la paralización de los trabajos no esenciales sin ningún despido garantizando el sueldo de todas y todos aquellos trabajadores que hoy arriesgamos las vidas de nuestras familias. "
