Se trata de una primera tanda de despidos, la voz oficialista del gobierno del PRO en Bahía se sincera con sus trabajadores. El sindicato no llama a acciones por el momento, mientras los trabajadores de tv y radio, docentes y jóvenes brindan su solidaridad.
Viernes 24 de junio de 2016 08:51
Este Miércoles la noticia ocupó la primera plana de la edición impresa, con el título de “LA ERA DIGITAL "La Nueva." en versión impresa saldrá 3 días por semana”, el periódico de Massot daba a conocer públicamente la razón de los despidos. Se trata de una revolución tecnológica que deja a 26 familias en la calle; apenas el comienzo de una serie de futuros despidos si se piensa en las manos que están detrás del trabajo de reparto y distribución diaria de un periódico hegemónico que goza la ventaja de ser parte de un multimedio en la región.
“Con todo, la decisión no es fácil. En los últimos años, hemos hecho lo posible para mantener la impresión y distribución diaria en formato papel y, con ello, la totalidad de los puestos de trabajo que ocupa. Sin embargo, ahora, la nueva realidad que viven los medios implica reconfigurar La Nueva. a sus posibilidades reales y tomar una resolución muy dolorosa, como es la reducción de personal consecuente. Si bien el crecimiento exponencial de las plataformas digitales y toda su potencialidad significan una auspiciosa expansión en esas tecnologías, ello no alcanza para mitigar el peso de una decisión como la que hemos tenido que tomar.”
Ante este atropello el Sindicato de Prensa de Bahía Blanca (SPBB) se declaró en estado de alerta permanente y se encuentra a la espera de posibles reuniones con funcionarios de los Ministerios de Trabajo Provincial y Nacional, aún sin fecha pública. Hector Gay, intendente del PRO, ha manifestado que esta situación lo afecta por su propia condición de periodista y “porque hay gente conocida” en el medio. Nada más cínico, se “siente tocado” porque comparte algo con los despedidos, su anterior profesión. No hay que olvidar que el actual intendente que declaró la guerra a “enemigos que integran grupos organizados que no tienen patria ni bandera pero sí quieren subvertir valores y adueñarse de la juventud" fue formado como periodista por La Nueva Provincia durante años. Tal vez cuando habla de gente conocida se refiere a quienes deberían están procesados por delitos de Lesa Humanidad.
A quien no este acostumbrado a ser espectador del estilo del periódico de los Massot puede llamarle la atención la liviandad con la que justifican los despidos de los trabajadores de prensa, pero esto es apenas una pequeña muestra. Propio de un diario acusado de ser cómplice del secuestro, tortura y asesinato de los obreros Enrique Heinrich y Miguel Ángel Loyola en Julio de 1976 y salvado bajo el gobierno de los CEO’s su editorial del 24 de Marzo no tiene desperdicio, La Nueva no habla ya de la teoría de los dos demonios, sino que directamente justifica y agaradece el accionar de la última dictadura militar a través de una nota de opinión titulada Un día para la memoria
"¿Qué queda de todo esto 40 años después? Hoy la imagen que se transmite es de “los militares” diabólicos y del otro lado “los jóvenes idealistas”. Y en realidad no es ni una cosa ni la otra. A pesar de ser políticamente incorrecto, creo que debemos reconocer que gracias a las fuerzas armadas (a pesar de lo nefasto de las desapariciones y los abusos), no vivimos más la pesadilla de la guerrilla, que nos aterrorizó colocando 5.052 bombas, realizando 1.748 secuestros y asesinando a 1.501 personas (civiles, militares y policías). Las fuerzas armadas como institución deben ser salvaguardadas (como se hace en todo el mundo) y se debe condenar con todo el peso de la ley, a aquellos militares que cometieron delitos. Por su parte, los guerrilleros no eran “nenes buenos”; secuestraban, torturaban y mataban, incluso hay muchos niños y adolescentes asesinados por los subversivos. Esto no debería quedar impune".
Un detalle que a nadie se le puede escapar es que estos despidos se dan en el marco de un nuevo aniversario del asesinato de Heinrich y Loyola. Es a esta patronal a la que se enfrentan los trabajadores despedidos, una patronal cómplice de la dictadura, manchada con sangre, impune y poderosa, pero no están solos. Mientras transcurría la noticia reconocidos periodistas de radio y TV de la zona se pronunciaron en apoyo a los trabajadores despedidos, criticando la decisión de La Nueva y la posición del Sindicato:
Esta solidaridad que recorre las redes expresa la unión de los trabajadores ante los despidos, que como dijo Myriam Bregman en la última sección de diputados tras ser atacada por Lilita Carrió, se trata de “trabajadores para los que no hay grieta porque los vimos hace unos días a los trabajadores de Página 12 haciendo una declaración conjunta con los trabajadores de Clarín, porque ahí no hay grieta, cuando los empresarios tienen que atacar a sus trabajadores no hay diferencias entre unos y otros”. Los docentes no se quedan atrás y también se suman al repudio a través del cuerpo de delegados del SUTEBA Bahía Blanca. Los jóvenes lanzarán campañas en la universidad para brindar su apoyo.