×
×
Red Internacional
lid bot

Plebiscito Constitucional. Con la nueva Constitución en Chile el gasto social solo aumentaría en un nivel mínimo

Lo afirmó el economista chileno y académico de la Universidad de Cambridge, José Gabriel Palma. Además, señaló que el presupuesto deberá pasar por el filtro del Parlamento y que habría un tiempo larguísimo para empezar a recaudar y financiar nuevos derechos sociales.

Jueves 1ro de septiembre de 2022 09:20

Durante su participación en “El Matinal de los Que Sobran”, José Gabriel Palma, economista chileno y académico de la Universidad de Cambridge que participó en una de las comisiones de discusión del texto constitucional, fue consultado por Hassan Akram sobre su visión ante la propuesta económica en la nueva Constitución.

Palma, que se manifestó partidario del Apruebo de cara al plebiscito que tendrá lugar el 4 de septiembre, señaló que “la nueva Constitución avanza en cosas que antes del estallido habrían sido impensables... pero lo básico de lo económico se dejó atrás... se avanza en temas de los derechos personales, en los derechos sociales, un poco en los temas de medioambiente, y se queda totalmente parada en lo económico. Se queda desfasada, hacia atrás, no avanza en los temas fundamentales de lo económico”.

Según el economista en el proyecto constitucional "no se hicieron incluso las cosas que estaban en el programa de Gabriel Boric. Eso es lo más increíble, cómo este gobierno en el poco tiempo que lleva ya tiró por la borda su política económica entera”. Y fue todavía más allá al comentar que “el grado en que la ideología neoliberal se ha hecho hegemónica en Chile, es realmente sorprendente. O sea, ha permeado a toda la centro izquierda y ahora lo está permeando al Frente Amplio en forma bastante obvia, al menos en la práctica de lo que está haciendo y, ciertamente, en que se rehusó a hacer los cambios económicos que eran fundamentales en la constitución. Cosas que estaban en el programa de Gabriel Boric, ellos, meses después, se opusieron y votaron en contra a las propuestas de la Constitución, para incluir lo que era necesario en la Constitución lo votaron en contra y, como se necesitan los dos tercios, la alianza del Partido Socialista y el Frente Amplio, esa alianza que se armó dentro de la Convención, boicoteó todos los cambios fundamentales que se proponen desde el punto de vista de la estrategia productiva, que se hacían en la comisión 5. No solamente rechazaron el informe preliminar, sino que cuando llegó el informe revisado votaron todo en contra, incluso trataron de agregar cosas, amarres, que ni siquiera están en la constitución de Pinochet”.

El economista, además, señaló que el aumento del gasto social, de aprobarse la nueva Constitución, tendrá que pasar por el filtro del Parlamento y deberá aplicarse de a poco, especificando que “en 4 años apenas habrá subido un mínimo, hay un periodo tiempo larguísimo para empezar a recaudar y financiar esos derechos sociales”.

Así mismo, indicó que “hay gastos que no están y que deberían estar, y los que están claramente no llegan a los niveles que se dicen y el royalty de los derechos que tienen que recuperarse de la renta de los recursos naturales, que son de todos nosotros, esa renta de los recursos naturales, pueden perfectamente financiar los derechos sociales de esta Constitución y aquellos que quedaron fuera, como serían el terminar con la pobreza en Chile. Cortémosla de una vez por todas, con 2 % del PIB se puede establecer un subsidio monetario para sacar a 3 millones de personas de la pobreza y no se hace, si no lo hace este gobierno, ¿quién?, si no se hace ahora, ¿cuándo?”.

No se puede tapar el sol con un dedo. Lo que señala Palma, a propósito del rol del Frente Amplio en la Convención y en el Gobierno, da cuenta de cómo el proyecto de nueva Constitución conserva lo fundamental del modelo económico extractivista al servicio de los grandes empresarios y sus grupos económicos, lo cual, como ha sido destacado por diversos analistas, limita la implementación y ampliación de los derechos sociales que contendría la nueva Constitución de ser aprobada.

Aunque desde un punto de vista que no rompe con el sistema capitalista, las críticas Palma demuestran que lo esencial de la herencia pinochetista no será desmontado en la futura Constitución.