Aunque Encuentro Social está en riesgo de perder su registro, sus 55 diputados seguirían legislando en San Lázaro.
Lunes 30 de julio de 2018
A pesar de haber integrado junto al Morena y al PT la coalición “Juntos Haremos Historia”, que le diera a López Obrador el triunfo presidencial con el 53% de los votos el 1 de julio, el Partido Encuentro Social (PES) está enriesgo de perder su registro por no alcanzar el 3% de los votos en ninguna de las elecciones federales.
Para la presidencia, Encuentro Social obtuvo el 2.7% de los votos, 2.4% en la elección de diputados y 2.3% en senadores.
En consecuencia, el 9 de julio el Instituto Nacional Electoral (INE) designó al encargado de intervenir los bienes y las cuentas del PES, a la espera de iniciar el proceso de liquidación de dicho partido. El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tiene hasta el 26 de agosto para resolver.
Ante esta situación, el PES ha presentado más de 60 impugnaciones ente el TEPJF, argumentando un mal conteo de las boletas en que los electores marcaron más de una opción de “Juntos Haremos Historia”.
En su intento por no perder el registro, y con ello el financiamiento público, este partido pretendía incluso que no se consideraran los votos al “independiente” Jaime Rodríguez “El Bronco”, lo cual fue rechazado por el INE.
Sin embargo, como resultado de las elecciones y producto de la coalición con el Morena y el PT, al PES le corresponden 55 diputaciones federales. De perderse el registro partidario, estos diputados permanecerán en la Cámara, ya sea como legisladores sin partido, integrándose a alguno de los grupos parlamentarios, o bien formando una nueva bancada con mínimo cinco miembros.
De esta manera, con o sin registro, y gracias al pragmatismo político de la centroizquierda encabezada por AMLO, la derecha evangélica estará representada en el Congreso, con su agenda en contra del aborto y del matrimonio entre personas del mismo sexo.
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