A Rodney Álvarez lo han condenado por un crimen que no cometió y durante 10 años lo mantuvieron recluido en un proceso de los más dilatorios que se pueda conocer. Se trata de una sentencia que acaba de llegar para culparlo de un crimen con el cual no posee ninguna vinculación demostrable.
La Izquierda Diario Venezuela @LaIzqDiario_VE
Martes 8 de junio de 2021
Sobre Rodney Álvarez se ha realizado un montaje judicial hecho por la burocracia estatal y sindical del estado Bolívar, incriminado por un delito que no cometió. La indolencia de los jueces y el retardo procesal durante 10 años mostró toda la alevosía de las autoridades para que no se le libere. Y en un juicio que tiene todas las características de express, le sale una condena infame.
Se trata de uno de los casos más aberrantes de la “Justicia”, con casi 10 años encarcelado al margen de la más elemental legalidad, con una acusación totalmente infundada. Durante toda una década no pudieron fabricar testigos ni pruebas por lo que no tenían manera de desarrollar ningún juicio, a pesar de ello no lo liberan condenándolo a un limbo judicial eterno. Pero de repente Rodney aparece condenado.
¡INFAME! Tras tenerlo 10 años preso con innumerables audiencias suspendidas y varios reinicio de juicio, porq no conseguían fabricar pruebas ni testigos, hoy, sin fundamento alguno, CONDENAN A 15 AÑOS al obrero Rodney Álvarez. #LiberenARodneyAlvarez #LiberenALxsTrabajadorxsPresxs pic.twitter.com/sY56ceDdo1
— LTS (@LTS_ven) June 9, 2021
"La condena llega justo días después que en la OIT el gobierno venezolano quedó expuesto por la denuncia sobre la situación de este obrero ferrominero. Ahora se sacaron de la manga la sentencia. Desde la Liga de Trabajadores por el Socialismo (LTS) condenamos totalmente esta vil condena política y seguimos exigiendo su liberación, al igual que la de lo todos los demás trabajadores presos por luchar, organizarse, denunciar, o negarse a ser parte de la corrupción", declaró Ángel Arias, dirigente nacional de la LTS.
Una de las últimas arbitrariedades del gobierno fue impedir la entrada del abogado de Rodney a una audiencia, porque había denunciado públicamente el eterno retardo procesal. Así como se lee, impidieron que entrara su abogado defensor. Hoy lo condenan.
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Rodney se encuentra detenido en El Rodeo II, estado Miranda, lejos de los familiares que residen en el estado Bolívar.
Rodney Álvarez formaba parte de los trabajadores que en Ferrominera del Orinoco se organizaban para luchar por el contrato colectivo y sus derechos, enfrentados tanto a la gerencia como a la burocracia sindical progubernamental. En junio de 2011, en una asamblea para elegir la comisión electoral que conduciría el proceso para la renovación de la directiva del sindicato (Sintraferrominera), Héctor Maicán, de las patotas de la corriente sindical gobiernera, efectuó varios disparos, resultando muerto el trabajador Renny Rojas, Maicán fue detenido intentando huir, los videos de seguridad lo incriminaban así como los testigos.
Sin embargo, por las gestiones y presiones del gobernador de entonces, Francisco Rangel Gómez, y la burocracia del PSUV, Maicán fue liberado y en su lugar apresaron a Rodney, activista de la corriente que impulsaba Rubén González, enfrentada a la patronal y a la burocracia sindical chavista.
Las audiencias de Rodney Álvarez siempre fueron postergadas una y otra vez, las presiones contra él, su familia y abogados han sido de todo tipo. La familia de Rodney ha sufrido de las más diversas maneras esta situación: sus hijas fueran despojadas del derecho a estudiar en el colegio de los hijos de los trabajadores de la ferrominera, aún cuando su papá, en los hechos, nunca fue enjuiciado ni mucho encontrado culpable de nada, por lo que legalmente no deja de ser trabajador de la empresa; su esposa tuvo que irse a trabajar a las minas del sur de Bolívar para mantener a las hijas, con todas las consecuencias y riesgos que eso ha conllevado; Rodney fue recluido en las afueras de Caracas, a 700 kilómetros de distancia de sus familiares y de sus compañeros de trabajo; con las dificultades económicas de toda familia obrera, sumadas a la profunda crisis del transporte, hace años que el contacto con sus familiares es muy escaso.
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