Unión Europea. Conflictos tensionan decisiva sesión del Consejo Europeo en Bruselas

Este viernes comenzó la sesión del Consejo Europeo que reúne en Bruselas a los 27 jefes de Estado de la Unión Europea, ésta durará dos días aunque contra el tiempo, puesto que tendrán que definir asuntos fundamentales en medio de un drama social que está lejos de tener un desenlace.

El objetivo de esta cumbre es acordar un plan para la recuperación económica junto con la cantidad de gasto de la Unión Europea para los próximos años, que sigue siendo una de las economías más azotadas por la pandemia y la crisis socioeconómica en que derivó.

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"Venimos a las negociaciones con mucho ímpetu, pero debo decir que las diferencias siguen siendo muy grandes y no puedo predecir si esta vez tendremos un resultado". Estas eran las palabras de Angela Merkel al arribar en la capital de Bélgica.

También la canciller alemana calificó las negociaciones como "muy difíciles", y no es para menos, pues uno de los ejes de la discusión es el presupuesto de la UE durante 2021 a 2027, en torno al cual no se pudieron poner de acuerdo el año pasado. Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, planteó que el monto de este presupuesto denominado Marco Financiero Plurianual (MFP) es de 1.074.000.000.000 euros.

Evidencia de los desencuentros entre los Estados miembros fue que tan solo la primera jornada se prolongó por 13 horas. Son dos las posiciones centrales enfrentadas en cómo superar la crisis, Países Bajos, Suecia, Austria y Dinamarca, lideran a los integrantes que exigen reformas de austeridad y acotar el "excesivo" gasto del organismo, mientras que otro bloque liderado por el Estado español, Italia y Portugal buscan que la mayoría del dinero se entregue por medio de transferencias directas a los Estados. Charles Michel, con el respaldo de Francia y Alemania, propuso crear el fondo de recuperación poscoronavirus, que alcanzaría los 750.000.000.000 euros, generándose con la emisión conjunta de deuda, donde dos tercios de este se utilizaría en subvenciones y el resto en préstamos al "grupo de los 27".

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Algo que sin duda los Estados no están dispuestos a ceder, es a la posición de Países Bajos, que se ha negado a que haya una votación en la que pueda perder por minoría, y busca resolverlo con la obtención del derecho al veto de las decisiones del CE.

Sea como sea, los banqueros y los demás magnates frotan sus manos ansiosos de la entrada de los jugosos "rescates", no pueden esperar para servirse el plato, ya que en las grandes depresiones es cuando son más sabrosos.