Los acuerdos entre el presidente peruano Pedro Castillo y las fuerzas políticas mayoritarias que tienen presencia en el Parlamento evitaron que prospere el pedido de admisión de la vacancia presidencial promovido por la ultraderecha y los grandes medios de comunicación.
Miércoles 8 de diciembre de 2021 09:02
Con 46 votos a favor, 76 en contra y 4 abstenciones, el pleno del Congreso de la República rechazó admitir la moción de vacancia presidencial presentada contra Pedro Castillo, bajo la causal de incapacidad moral permanente.
Dentro de las organizaciones que votaron en contra de la moción de vacancia presidencial destacan las agrupaciones derechistas Acción Popular, Alianza para el Progreso, Somos Perú y el Partido Morado. El frente centro izquierdista Juntos por el Perú y el partido Perú Libre que llevó a Castillo al gobierno, también votaron en contra.
Como se recuerda, esta iniciativa fue lanzada por la Parlamentaria Patricia Chirinos de Avanza País y secundada por Hernando de Soto del mismo partido, además de los partidos ultraderechistas Fuerza Popular de Keiko Fujimori y Renovación Popular de Rafael Lopez Alilaga.
Según lo establece la normatividad vigente del Congreso, para que esta iniciativa antidemocrática prospere y pase a la siguiente etapa, se requería como mínimo 52 votos a favor, sin embargo, no logró estos resultados debido a que el presidente y su entorno más cercano, los últimos días llevaron adelante una serie de acercamientos a las demás fuerzas que tienen presencia en el parlamento con las cuales, al parecer, habrían llegado a acuerdos políticos, lo que se terminó reflejando en la votación del martes 8 de diciembre.
De esta manera el presidente Pedro Castillo se libra eventualmente de la posibilidad que la vacancia presidencial se discuta en el Congreso.
Sin embargo, este hecho no cierra del todo la crisis del ejecutivo ya que los sectores ultraconservadores, a pesar de haber perdido en la votación, anunciaron que van a persistir en su línea opositora al gobierno. Mientras que los sectores derechistas que apoyaron a Castillo contra la vacancia dejaron en claro que su voto no es un cheque en blanco y que presionaran a Castillo para que este se modere aún más.
Por ello, podemos inferir que la nueva dinámica política post vacancia estará condicionada por una mayor presión a Pedro Castillo, tanto desde la ultraderecha, así como de la derecha parlamentaria a fin de acentuar su proceso de derechización, lo cual lo llevaría a colisionar aún más con las demandas más sentidas de los trabajadores y los sectores populares que son los que sufren con mayor crudeza los embates de la crisis económica.