Ya van más de dos semanas de las huelgas de las y los trabajadores de Unimarc y Ariztía, y los dueños millonarios Álvaro Saieh y Manuel Ariztía no quieren ceder a las más mínimas demandas que existen. La unidad y coordinación de los sectores en lucha, es clave para triunfar.
Sábado 18 de julio de 2020
Han transcurrido aproximadamente 16 y 15 días respectivamente desde el inicio de las huelgas de Ariztia (Arica) y Unimarc (Arica, Iquique y Alto Hospicio), en esta última son 760 trabajadores de Unimarc, en su mayoría trabajadoras, en uno de los rubros esenciales como es la alimentación, con sobrecarga laboral y creciente riesgo al contagio. El único que se ha beneficiado es al multimillonario holding de retail SMU que opera más de 500 locales a lo largo de Chile perteneciente al empresario Álvaro Saieh, cuyos ingresos el primer trimestre aumentaron un 7% con ingresos, solamente del trimestre, por 605.276 millones; mientras las demandas de las y los trabajadores busca un aumento de 13 mil pesos al sueldo base, con salarios que rondan el sueldo mínimo.
A una cuadra del Unimarc de la ciudad de Arica está la huelga de Ariztia, otra empresa de la alimentación con ganancias millonarias, que se encuentra dentro de las cien empresas más grandes de Chile, quienes con Super Pollo acaparan casi el 71% de las ventas de pollo en el país. Son 204 los trabajadores que hoy se encuentran en huelga, pidiendo un aumento salarial y un 4% en sus bonificaciones.
Estos empresarios hoy están unidos en las defensa de las AFP, uno fue accionista (Sahie) mientras uno de los hermanos Ariztía es parte de los grandes empresarios que defiende el rechazo al retiro del 10% de los fondos, así los empresarios hoy se unen en defensa de sus intereses, los pelean con uñas y dientes.
¿Podemos unirnos las y los trabajadores para que triunfen nuestras demandas?
Esta unidad se ha vuelto una necesidad evidente no solo entre las huelgas sino con todas y todos quienes vienen sufriendo los costos de esta crisis mientras estos empresarios millonarios siguen ganando y el pueblo pasa hambre y sufre las miserias de un sistema de salud colapsado, que ya lleva más de 11.000 muertos (entre probables y confirmados), así lo expresó la marcha del 7 de julio, en donde los trabajadores de Ariztía se dirigieron rumbo a la Intendencia, a los cuales se le sumaron las trabajadoras de Unimarc.
Una iniciativa en este sentido fue la asamblea donde se planteó la necesidad de la coordinación de las luchas en la que participaron los sindicatos y trabajadores de Unimarc, Ariztia, Ripley, Lider y Orica, además se sumaron trabajadores de áreas verdes de la empresa EVD, funcionarios de la universidad de Tarapacá y estudiantes universitarios.
Es necesario que todos quienes fueron parte de esta reunión puedan llevar esta idea de la coordinación a lo concreto con acciones comunes en las redes sociales, cacerolazos donde se puedan sumar estudiantes, pobladores y trabajadores de distintos rubros, impulsar asambleas comunes de las distintas luchas abiertas a quienes quieran solidarizar, así como preparar acciones en las calles cuando las y los trabajadores las estimen necesarias, porque no sirve una cuarentena con hambre, con multas que no podemos pagar, al servicio de esta unidad se pone la izquierda diario e invitamos a sumarse a todos los medios de comunicación.
El Gobierno empresarial de Piñera utiliza la pandemia para imponer mayor represión policial, pretenden con estas medidas acallar las protestas y también las huelgas.
Si los empresarios se unen entre ellos, debemos unirnos entre trabajadores para que las huelgas en curso puedan triunfar, llamamos a solidarizar con el fondo de huelga tanto de Ariztia como de Unimarc y llamamos a las diversas organizaciones sindicales como la CUT dirigida por Bárbara Figueroa (PC) a romper la tregua con el gobierno y no escatimar esfuerzos en impulsar estas luchas, por ejemplo la CUT en Arica declara tener 7 mil afiliados, si cada uno pusiese tan solo 5 mil pesos podría hacer un aporte de 35 millones para un fondo común de resistencia, pero para esto es necesario que las bases discutan cómo solidarizar, incluso impulsar paros en apoyo hacia estos conflictos buscando una real unidad tanto por estas luchas como por todos los padecimientos de esta crisis social, un ejemplo de que esta disposición a paralizar por los derechos de las y los trabajadores lo mostró el paro de la unión portuaria exigiendo el retiro del 10% y el rechazo al actual sistema de AFP.
Hoy Unimarc y Ariztia empresas importantes para abastecer de alimentación de la población en Arica están paralizadas porque los grandes empresarios no quieren ceder ante ninguna demanda. Hay que rodear de solidaridad las huelgas, si triunfan las y los trabajadores de Ariztía y Unimarc, triunfamos todos.