Durante la tarde de este lunes, la segunda sala de la Corte Suprema condenó a 24 ex agentes de la dictadura por el secuestro calificado de Jorge Grez Aburto, militante del Partido Socialista y fundador del MIR.
Martes 14 de agosto de 2018
El fallo corresponde a uno de los episodios de la denominada "Operación Colombo". Por segunda vez, durante la tarde de este lunes la Corte Suprema condena a más de una decena de ex agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) por el secuestro calificado de Jorge Arturo Grez Aburto, militante socialista al momento de su captura y fundador del MIR en Concepción. Al momento de su desaparición, desde el 23 de mayo de 1974, tenía 28 años.
La investigación realizada por el ministro en visita Hernán Crisosto Greisse, da cuenta de que la aprehensión del exestudiante de Filosofía y Medicina de la Universidad de Concepción, se concretó en circunstancias que este salía de una galería de arte ubicada entre las calles Mc Iver y Miraflores, momento en el que fue interceptado por los agentes de la DINA.
Tras la detención, el estudiante fue trasladado “a un inmueble ubicado en calle Londres 38, conocido también como Yucatán, que funcionaba como recinto clandestino de privación de libertad”.
Se condenó a César Manríquez Bravo, Pedro Espinoza Bravo, Miguel Krassnoff Martchenko y Gerardo Urrich González a 13 años de presidio por su responsabilidad como autores de secuestro calificados.
Se condenó a Raúl Iturriaga Neumann, Manuel Carevic Cubillos, Ciro Torré Saéz, Sergio Castillo González, José Fuentealba Saldías, José Fuentes Torres, Julio Hoyos Zegarra, Nelson Paz Bustamante, Claudio Orellana de la Pinta, Enrique Gutiérrez Rubilar, José Ojeda Obando, Hugo Delgado Carrasco, Juan Duarte Gallegos, Leónidas Méndez Moreno, Pedro Araneda Araneda, Rafael Riveros Frost y a Víctor Manuel Molina Astete, a una pena de 10 años de presidio.
Además, se condenó a Luis Mora Cerda, José Hormazábal Rodríguez y Reinaldo Concha Orellana, a 4 años de presidio, con el beneficio de la libertad vigilada, por su responsabilidad como cómplices del delito.
