TENSIÓN. Cresta Roja: Rasic bajó la cresta, pero prepara el picotazo

Tras una agitada semana donde el ministerio de trabajo tuvo que dictar en una segunda reunión una nueva conciliación obligatoria tras el incumplimiento de parte de la empresa de la primer resolución, no se descartan nuevas medidas contra los trabajadores de parte de la empresa.

“Sabemos muy bien que el conflicto no es por problemas económicos de la empresa, ellos se dan el objetivo de sacarse de encima nuestros reclamos, quiere despedir a todos aquellos que por las mismas condiciones en las que trabajamos se encuentran con parte médico en la ART y quiere callar a nuestra comisión interna, en este momento estamos dentro de la planta pero sabemos que la empresa va a atacar y tenemos que prepararnos para esto.” Dijo uno de sus trabajadores que concentró durante la semana pasada en las puertas de la planta.

La planta atraviesa un estado de tensa calma al día de hoy, esto es producto de las fuertes declaraciones de sus dueños que, por un lado, declararon tener problemas económicos para mantener la planta y por el otro, culpó a la comisión interna de los trabajadores por reclamar mejoras en el servicio médico, en el comedor y el pago de horas extras adeudadas, la empresa declaró en un sorpresivo comunicado que estos motivos “hacen económicamente inviable la continuidad del negocio” cuando en realidad los delegados aún no habían tomado ninguna medida gremial que afecte la producción y solo habían planteado demandas por mejoras.

Todo apunta a que la empresa quiere cortar un proceso de organización que se dio al interior de la planta, donde los trabajadores comenzaron a tomar reclamos contra el jefe de RRHH quien comenzó a cuestionar los partes de enfermo que son productos de enfermedades laborales que genera la misma producción. “Hoy estamos trabajando nuevamente, pero no hay que quedarse de brazos cruzados” dijo a Izquierda Diario un trabajador de la planta.