A través de una reunión conjunta, los presidentes de la Democracia Cristiana y los Radicales anunciaron su decisión de convocar solo al Partido por la Democrácia y a los Socialistas para la conmemoración de un nuevo aniversario de la victoria del NO.
Miércoles 29 de agosto de 2018
Como ya se ha hecho tradición el próximo viernes 5 de octubre se conmemora un nuevo aniversario del triunfo del NO en el plebiscito de 1988, votación que marcó el final de la dictadura de Pinochet.
A pesar de que desde el año 90 en adelante la ex-Concertación logró organizar grandes eventos para conmemorar dicho hito de la historia contemporanea del país, los últimos años esta fecha fue cobrando un lugar cada vez más pequeño entre la élite política "progresista".
De hecho durante el gobierno de Bachelet la conmemoración de los 29 años del NO se hizo en un ambiente privado entre sus mas cercanos y algunos personajes de la época.
Este año se conmemoran los 30 años del plebiscito y podría pensarse que sería una ocasión para el reencuentro de la disgregada exNueva Mayoria pero no.
En una reunión realizada el día lunes, los presidentes del partido Democrata Cristiano y Radical decidieron organizar un evento donde solo estarían invitados sus exsocios del PPD y PS, dejando afuera al Partido Comunista.
Según ambos timoneles la exclusión se produciría debido que el Partido Comunista no habría apoyado en dichos años el plebiscito y mantuvo la vía armada como la forma de terminar con la dictadura, cuestión que pondría en duda sus "credenciales demócratas".
Ante esto el presidente del PC Guilliermo Tellier manifestó su disconformidad con los dichos de sus pares y explicó que "Nosotros, por lo menos, no nos vamos a autoexcluir de una celebración del No, vamos a participar de todas maneras, nosotros fuimos partícipes del No. Es mentira lo que se está diciendo, de que nosotros no participamos del No, que no estuvimos en el plebiscito, que no votamos o que no inscribimos partido, todo eso lo hicimos"
La dictadura no terminó con el plebiscito
Aun cuando las diferencias entre los partidos continuan, cabe señalar que el relato histórico que construyeron los dirigentes de la Concertación sobre el término de la dictadura, fue completamente funcional a la democracia protegida que continua hasta el día de hoy.
Si bien el plebiscito de 1988 marcó un hito en la lucha contra la democracia, este fue precedido por cientos de manifestaciones desde el año 82 en adelante, manifestaciones que pusieron en jaque a la dictadura y que terminaron por quitarle la poca legitimidad internacional que tenia.
Además el plebiscito y los gobiernos que sucedieron a la dictadura no fueron capaces de tirar abajo la herencia de Pinochet y Jaime Guzman, negándose sistemáticamente a aplicar leyes que pusieran término a la impunidad para los violadores de derechos humanos o recuperar derechos históricos que quitó la dictadura a los trabajadores, las mujeres y la juventud.
Afortunadamente desde el 2011 en adelante la herencia pinochetista quedó en jaque. Se cuestionó la educación de mercado y el lucro, se han abierto cuestionamientos al sistema de AFP, al plan laboral de Jose Piñera y ahora último incluso al derecho al aborto legal que también se arrebató en aquellos oscuros años.