El programa de Alejandro Guillier, sus polémicas con el Frente Amplio y su tensionamiento permanente con la DC al interior de la Nueva Mayoría, fueron algunos de los aspectos a los que se refrió el alcalde de Recoleta.
E.E. Vergara Valparaíso, Chile
Lunes 6 de noviembre de 2017

Como todos los días domingos, se dieron lugar a nuevos debates en el programa Estado Nacional emitido por el canal Televisión Nacional de Chile (TVN), contando esta vez con la participación del alcalde de Recoleta y militante del Partido Comunista (PC) Daniel Jadue, quien discutió con el panel, la participación de su colectividad en el gobierno, y la situación de la denominada centro-izquierda.
Para comenzar, el alcalde presentó el programa del candidato por “La Fuerza de la Mayoría”, Alejandro Guillier, a quien se le cuestiona su aún inexistente hoja de ruta, ante lo cual hizo una acérrima defensa del documento, señalando que quienes han manifestado que no existe un programa es debido a que “esta discusión la instaló la derecha y un sector del tercero para abajo, que evidentemente tratan de mejorar su posición”. A su vez también expresó “que la gente irá a votar por quien cree que es la mejor opción para la centroizquierda”.
También se refirió a sus polémicas declaraciones hacia el Frente Amplio (FA) señalando “no haber escuchado ninguna autocrítica del FA, ni condenar el grabarse en la reuniones como los mafiosos” en alusión a las palabras expuestas por el alcalde de Valparaíso Jorge Sharp, quien llamó a una autocrítica por parte de la Nueva Mayoría. El alcalde pidió disculpas por sus palabras, excusándose en que solo se refería al episodio de las grabaciones.
En relación a la tensión entre la Democracia Cristiana (DC) y el PC al interior de la Nueva Mayoría -sobre todo por los dichos de algunos referentes de la falange últimamente- el alcalde manifestó que dentro de su comuna tiene una muy buena relación con la DC, aprovechando el rol "democrático" que cumplió en la "vuelta a la democracia". Así también manifestó que las diferencias son con un sector minoritario de los demócrata-cristianos, expresión en gran manera, de una cuestión generacional.
En torno a las elecciones del 19 de Noviembre el alcalde manifestó que “Más allá de todo el fraccionamiento, y sin importar quien gane la presidencial, la centro-izquierda va a ser una clara mayoría en el congreso” agregando que “los programas de aquellos que no son parte de la centro-izquierda, van a tener que buscar votos con todos a los que han ninguneado durante todo este tiempo”.
Por último, casi finalizando el programa, se generó una acalorada discusión entre Jadue, y el panelista Gonzalo Muller, quien intentó ningunear la propuesta de farmacias populares impulsada por la comuna de Recoleta y que hoy se extiende a nivel nacional, teniendo una inmediata respuesta del alcalde
“Nosotros le hemos quitado a las farmacias coludidas 32 mil millones de pesos, si eso a ti te parece populista es un problema de la derecha”.
El rol del PC y la cuestión de la centro-izquierda luego del 19N
Una cuestión clara es que el PC más allá de sus contradicciones internas, y la derechización permanente como adaptación al gobierno neoliberal, intenta jugar un rol activo dentro de la Nueva Mayoría, siendo el ala izquierda que tensione un avance –aunque sea parcial- en la agenda de reformas impulsada por la presidenta Michelle Bachelet, lo cual obviamente le trae, y seguirá trayendo, importantes costos, sobre todo con los movimientos sociales. Pérdida de la presidencia del Colegio de Profesores, descomposición de la Central Unitaria de Trabajadores, fragmentación de la reforma educativa, son sólo algunos de los embates que ha debido sortear el PC, como una forma de fidelidad con la agenda del gobierno.
La intervención del alcalde Jadue en Estado Nacional, expresa la clara intención de constituirse como un actor con presencia en el parlamento, apostando a -como él mismo señala- contar con una “correlación de fuerzas” favorable, aunque esto incluso signifique pactar con el diablo.
Es así como el legado concertacionista de centro-izquierda, se juega la vida en estas elecciones, donde la alta tasa de deslegitimación hacia los partidos del régimen, la corrupción de la casta parlamentaria, y la emergencia de los movimientos de masas, junto a nuevas fuerzas políticas, dan un fuerte remesón a los herederos de la dictadura. Es bueno ante este escenario hacerse un par de preguntas más allá de los resultados del 19 de noviembre. ¿Qué curso tomaran las exigencias provenientes de los movimientos sociales ante un parlamento fragmentado? ¿Cuál o cuáles serán las fuerzas políticas que actúen como un interlocutor de los nuevos fenómenos de masas?