En pocos días comienza el nuevo Gobierno. Este viernes Alberto Fernández anunciará el gabinete nacional. Pero las fotos de la semana que termina ya son un anticipo del Gobierno que viene.

Fernando Scolnik @FernandoScolnik
Jueves 5 de diciembre de 2019 21:53
La semana que termina estuvo cargada de símbolos. La idea de unir al peronismo, que durante los últimos meses fue un argumento electoral para ganarle a Macri, comienza ahora a traducirse en hombres y mujeres concretos que asumirán roles importantes en el Gobierno que comienza el próximo martes.
Basta una mirada rápida a las principales noticias de la semana para comenzar a hacerse una idea de lo que esto significa.
A la primera plana de los diarios han vuelto nombres tales como los de Daniel Scioli, Carlos Menem, Adolfo Rodríguez Saa, Hugo Moyano, Felipe Solá o Sergio Massa, entre tantos otros que están llamados a tener no poco protagonismo en la coalición de gobierno.
No se trata de datos que haya que pasar por alto. En pocos días, muchos de ellos serán quienes encarnen la contradicción entre las aspiraciones de millones que votaron al Frente de Todos esperando terminar con los ajustes de Macri, y la realidad de los proyectos que defenderán, en un marco económico adverso en el cual solo se podría dar soluciones de fondo a las demandas populares con medidas que cuestionen los intereses de los poderosos a los que ellos defienden.
Como en otras experiencias pasadas, las figuras más "progresistas" de la coalición, que también tendrán sus cargos en el Gobierno pero estarán subordinadas a estos acuerdos, no podrán cambiar ese rumbo.
Repasemos entonces las fotos más importantes que dejó esta semana:
1) Cristina Kirchner junto a Carlos Menem y Adolfo Rodríguez Saa en el Senado
Desde el punto de vista institucional, Cristina Kirchner tendrá un rol protagónico en el Senado. Allí la política de unidad del peronismo dio un importante paso adelante con la conformación de un bloque de 42 senadores, lo cual les alcanzará para tener quórum propio en la Cámara Alta. Recordemos que durante el macrismo, el peronismo estuvo dividido en dos bloques distintos.
Este miércoles el acuerdo se formalizó con una reunión encabezada por la vicepresidenta electa y se destacó por contar con tres ex presidentes de la nación: la propia Cristina Kirchner, Carlos Saúl Menem y Adolfo Rodríguez Saa. Una imagen que de progresista, o nacional y popular, tuvo poco y nada.
La participación de estas figuras anticipa bastante del contenido del acuerdo. Sin embargo, cabe destacar también que el elegido para presidir el bloque será José Mayans, un formoseño ligado al gobernador Gildo Insfrán. Entre los pergaminos más destacados de Mayans se cuentan haber votado a favor del saqueo a los jubilados en diciembre de 2017 (mientras una dura represión tenía lugar afuera del Congreso) y su rechazo a la legalización del aborto.
Por último, también es expresión del acuerdo con los gobernadores ajustadores el nombramiento de Claudia Ledesma Abdala (esposa del mandatario Gerardo Zamora de Santiago del Estero) como presidenta provisional del Senado.
2) El acuerdo Máximo Kirchner – Sergio Massa en Diputados
La situación no es muy distinta en la Cámara de Diputados. Allí el Frente de Todos contará con 118 diputados propios, aunque necesitará algunos aliados más para llegar al quórum.
Los símbolos de la unidad del peronismo, en este caso, son Sergio Massa y Máximo Kirchner.
El primero de ellos, que fue fundamental para que Macri pudiera aprobar todas sus leyes de ajuste y entrega en estos años, tendrá un alto cargo institucional como parte del acuerdo del Frente de Todos: presidente de la Cámara de Diputados.
Por su parte, el hijo de la ex presidenta será el jefe de bloque del Frente de Todos.
En su primer discurso como presidente de la Cámara, Sergio Massa aprovechó para saludar a Emilio Monzó, “mi amigo y un gran presidente de esta cámara, que hizo un trabajo maravilloso y que nos deja la responsabilidad de seguir en la idea de que el diálogo y los consensos son el camino”.
Vale recordar que Monzó fue el presidente de diputados bajo el macrismo y construyó “el diálogo y los consensos” para que se voten leyes como el pago a los fondos buitre, la reforma jubilatoria o la aprobación de los presupuestos de ajuste, como el último ordenado por el FMI.
3) La foto Hugo Moyano – Alberto Fernández
Este martes, en la Federación de Camioneros, el presidente electo se reunió con quien probablemente sea el hombre más poderoso del sindicalismo argentino: Hugo Moyano.
Se trata del mismo hombre que en 2015 hizo campaña electoral para Macri, y que luego fue un factor clave, junto a las cúpulas oficiales de la CGT y la CTA, para que los ajustes del presidente de Cambiemos avanzaran sin que se le opusieran fuertes planes de lucha.
Resaltemos entonces que si en cuatro años la pobreza avanzó hacia el 40 %, los tarifazos se impusieron, el salario fue vapuleado y hubo cientos de miles de despidos fue gracias a que Macri recibió la complicidad del peronismo en el Congreso, pero también en los sindicatos.
Mientras negocia cuotas de poder (cargos y fondos) con el Gobierno, la burocracia sindical ya ofrece sus servicios a cambio: la CGT adelantó que no pedirá bono de fin de año y Moyano conversó con Alberto Fernández sobre la “modernización” de los convenios (reforma laboral precarizadora por sector) y se abrió a la posibilidad de congelar precios y salarios. Todo esto se coronaría en un Pacto Social con empresarios, Gobierno e Iglesia que buscará un acuerdo donde los que más pierdan, como siempre, sean los trabajadores.
4) Felipe Solá y Daniel Scioli: la derecha peronista a la política internacional
Las relaciones con “el mundo”, como le gustaba decir a Macri, serán comandadas en el Frente de Todos por dos de los dirigentes más conservadores del espacio.
Por un lado, Felipe Solá será canciller. Se trata del hombre que, como gobernador de la provincia de Buenos Aires, es uno de los máximos responsables políticos de la Masacre de Avellaneda en la que fueron asesinados Maximiliano Kosteki y Darío Santillán. Años más tarde fue parte de la oposición al kirchnerismo junto a Mauricio Macri y Francisco De Narvaez (2009), para luego ser parte del mismo espacio político de Sergio Massa.
Por su parte, Daniel Scioli, de pasado menemista y que “se borró” durante cuatro años de oponerse al macrismo (al punto de ausentarse como diputado durante la votación del saqueo a los jubilados), tendrá un cargo muy importante: será embajador en Brasil, principal socio comercial de la Argentina. Entre sus primeras definiciones en este cargo señaló que “tienen que quedar atrás los desencuentros con Bolsonaro y que se priorice la relación estratégica”.

Fernando Scolnik
Nacido en Buenos Aires allá por agosto de 1981. Sociólogo - UBA. Militante del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001.