Desde la diversidad del Movimiento de los Trabajadores Socialistas nos pronunciamos en contra de los 50 asesinatos y 53 heridos ocurridos en “Pulse”, bar gay de Orlando donde principalmente asistían homosexuales latinos, siendo de los sectores más explotados en Estados Unidos. Sumado a lo ocurrido en un bar gay en Veracruz, estas dos tragedias son reflejo de la homofobia que existe, y que bajo el sistema capitalista se profundiza aún más.
Viernes 17 de junio de 2016
Tras lo ocurrido en Orlando, Florida, Donald Trump, contendiente hacia las elecciones presidenciales en Estados Unidos por el Partido Republicano, aprovechó para dar un discurso islamofóbico y xenófobo que junto la declaración de Hillary Clinton de intensificar los bombardeos en Siria e Irak, se unen en una cruzada contra el pueblo islámico, reflejando sus intereses imperialistas.
Donald Trump anteriormente se ha pronunciado en contra de los inmigrantes latinos amenazando de deportarlos y proponiendo la construcción de un muro en la frontera con México y pagado por los mismos mexicanos.
Los crímenes de odio son una realidad en México
De lo ocurrido el pasado domingo, dentro de los 53 asesinados se contaron 4 mexicanos, uno de ellos sigue hospitalizado. El pasado 22 de mayo, el asesinato de mas de 7 personas en “La Madame”, antro gay en Xalapa, Veracruz, en un acto homofóbico por parte de un grupo armado, el cual el gobierno lo quiso pasar como un problema de drogas, como lo hizo con el crimen de odio hacia una chica trans en junio del año pasado, diciendo que fue un ajuste de cuentas.
Denunciamos que mientras el gobierno de Enrique Peña Nieto propone aprobar el matrimonio igualitario en todo el país de manera oportunista para ganarse a un sector de la población después del gran cuestionamiento a su gobierno tras la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, a los que somos parte de la diversidad sexogenérica nos siguen asesinando, seguimos sin tener derecho a la salud y nos enfrentamos a la precarización laboral y a la discriminación en nuestras escuelas y al rechazo por parte de nuestra familia.
Decimos que el Estado es culpable de estos crímenes de odio hacia la diversidad sexogenérica, ya que por medio de los medios de comunicación, la educación heteronornada en las escuelas, la injerencia de la Iglesia en la educación, etcétera, promueve un discurso de odio hacia la diversidad, dando como resultado más de 1 300 víctimas de crímenes de odio en nuestro país en 19 años, siendo la Ciudad de México el primer lugar a pesar de las conquistas arrebatadas al gobierno a través de la lucha en las calles.
Los crímenes de odio son, junto con los feminicidios, crímenes de Estado, porque el gobierno y sus instituciones singuen ignorando estos asesinatos y son cómplices de los mismos asesinos tapando los crímenes diciendo que son “pasionales” o un ajuste de cuentas.
México, ante estos hechos, ha levantado la voz en solidaridad con los asesinatos en Orlando y con los de Xalapa. El lunes pasado se convocó a un acto en la embajada de los Estados Unidos, donde se rindió homenaje a las víctimas y este sábado se convoca a un acto en el Ángel de la Independencia, recordando que el espíritu de Stonewall sigue vivo.
A 47 años de Stonewall
Estos crímenes de odio se dan en el marco de los 47 años de la revuelta de Stonewall, donde mujeres trans, travestís, gays y lesbianas levantaron la voz para enfrentarse a un régimen establecido que coartaba sus derechos, que hoy se nos siguen negando.
Hoy nos siguen asesinando, nos niegan el derecho al trabajo, a la salud. Desde la diversidad del MTS estamos convencidos de que es necesario que se levante un gran movimiento de la diversidad sexogenérica, combativo e independiente y en las calles, que luche por nuestros derechos, que recupere las lecciones que dejó Stonewall y el movimiento de la diversidad que luchó al lado de los trabajadores y que fue parte de la juventud que irrumpió en el mayo francés, en contra de las dictaduras en América Latina y que en el corazón del imperialismo luchó contra la guerra de Irak.
Es necesario que el movimiento de la diversidad en Estados Unidos luche por sus derechos a lado de los trabajadores, los migrantes y la comunidad afroamericana, que son de los sectores más explotados y oprimidos.