Sin estimar saliva, salpico Monckeberg contra las condiciones laborales en Chile, buscando empatarlas con los ultraexplotados obreros chinos como solución a la competitividad del mercado chileno, a raíz del cierre de MAERSK.

Ricardo Rebolledo La Izquierda Diario
Jueves 21 de junio de 2018
Es que para Nicolás Monckeberg, Ministro del Trabajo y Previsión Social, los “beneficios desproporcionados” de las negociaciones colectivas habrían afectado la competitividad de la empresa Maersk, negociaciones que le quitaban competitividad al mercado chileno, contra las empresas chinas, como enfatizo en una entrevista en radio Infinita (revisala aqui), ayer miércoles.
Los factores de la competencia internacional china, y los “costos” de las condiciones laborales internas, y la falta de materias primas, habrían sido los elementos a considerar del reciente cierre de la Multinacional MAERSK, de capitales Daneses.
El gobierno: la vocería del empresariado
Por su puesto el ministro, se ponía en línea, con los dichos del ex gerente general de MAERSK, Francis Mc Cawley, que culpaba a una huelga de 15 días realizada el año pasado, entre los factores para la decisión del cierre de la planta. “La huelga y la violencia desatada en los accesos de la planta fue una pésima y lamentable situación, que junto a la baja productividad, en mi opinión, apuró la decisión del cierre de la planta”, sentencio en una entrevista en la revista del empresariado portuario Mundo Maritimo.
Una derecha arrogante, no estima saliva para atacar a los trabajadores y sus conquistas, aun mas cuando hoy están a cargo del gobierno. La voz del empresariado recibe el eco directo del gobierno, que sale a secundarle sus berrinches.
¿Qué “beneficios desproporcionados”?
Entonces para el empresariado y el gobierno, parecen no ser suficientes las pésimas condiciones laborales chilenas, incluso comparándolos con los mismos estándares que ellos mismos han salido a buscar como es el caso de la OCDE, organismo del cual buscan sacar sus propios estándares.
Revisemos algunos de esos “beneficios desproporcionados”.
En los países OCDE existe un alto porcentaje de negociaciones colectivas. Y que al parecer el instruido Ministro del Trabajo parece olvidar, ya que en chile apenas un 8 % de los trabajadores tiene negociaciones colectivas.
Por supuesto, en las empresas en que existiese sindicato, ya que en chile, el porcentaje de sindicatos como de sindicalización es bajísimo, donde en el 81,8 % de las empresas de 10 o más trabajadores, no existe y nunca ha existido un sindicato. O sea, en menos de 1/5 de las empresas existe un sindicato. O si no atenemos a los datos de la misma Dirección del Trabajo en su Encuesta Laboral (2014); del total de empresas solo el 16,9% había negociado colectivamente con sus empleados.
Porcentaje de empresas de 10 o más trabajadores donde nunca ha existido un sindicato, por rama. fuente: Fundación Sol
Y si hablamos de salarios, beneficios desproporcionados difíciles de encontrar, ya que según los datos de NESA del 2016, teniendo en cuenta las variables de los dos últimos años, un 50,9% de los trabajadores gana menos de 350 mil pesos, y de estos un 32,9% apenas bordea el sueldo mínimo.
fuente: Fundacion Sol
Y podríamos seguir, ya que si considerásemos el sistema previsional actual, como uno de nuestros derechos y beneficios, los únicos que han salido ganando, son las grandes AFP, que tienen ganancias multimillonarias a costa de millones de trabajadores, que mes a mes entregan una parte de su sueldo, para que el empresariado tenga capitales frescos todos los meses sobre los cuales especular en sus negocios, para después en las perdidas pasarlas a los hombros de los millones de trabajadores.
Una salida estratégica en defensa del sustento de 1209 familias
Los hoy mas de 1209 trabajadores y trabajadoras, que quedan sin su sustento, abandonan una empresa de carácter esencial para la economía del país. Ya que la producción de containers refrigerados es de importancia central para la industria agroalimetaria del país, ya que una gran parte es exportada a cientos de países del mundo, que requieren de este tipo de transporte especializado para llegar a millones de mesas alrededor del mundo de manera fresca.Es que el problema no es si la empresa no tiene ganancias o no, es que no gana lo que el mercado exige.
Son los propios trabajadores los que tienen que defender sus puestos de trabajo, y echar a andar esa empresa, una expropiación bajo su propio control, de una industria que tiene carácter estratégico para la economía del país, que no puede ser botada sin más, con todos esos puestos de trabajo y los productos que de allí se necesitan.
Al igual que SQM, que renacionalizado, y por ser un monopolio natural internacional el mismo litio, podría cubrir ampliamente los gastos en derechos sociales, de los cuales la derecha tanto reniega, como salud, educación, previsión, etc