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Red Internacional
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Medio Ambiente. Defendamos los humedales de Tigre

El domingo 22 de setiembre docentes de la Agrupación Marrón de SUTEBA Tigre, nos acercamos, como otras veces, a la protesta sobre la ruta 27 para acompañar a las familias de Villa La Ñata, Benavidez y Dique Luján que siguen con gran convencimiento defendiendo su hogar, sus raíces y su elección de vida.

Martes 24 de septiembre de 2019 22:46

Hace más de 20 años que eligieron vivir en este lugar, con su historia, su impronta. Tigre es el delta, es el humedal, es pueblo originario, por más que quieran borrarlos y seguir matando otra vez a sus muertos. Defender los derechos de todo ser vivo es parte de esta elección de vida, y los lleva a luchar contra los negocios inmobiliarios millonarios, la complicidad de políticos que hacen la vista gorda, aprueban leyes e ignoran otras empujando a estas familias de sus territorios. Pero ellos resisten por más que les pese.

La Asamblea de vecinos autoconvocados sigue reclamando la aprobación y ejecución de la ordenanza municipal que prohíbe la construcción del countrie y destrucción del humedal. Después de varias audiencias y movilizaciones, el intendente Julio Zamora, de forma demagogica, dijo acordar con el cuidado del humedal, pero nunca lo llevo adelante.

Tigre comienza a hundirse, lugares que antes no se inundaban quedan bajo el agua apenas llueve un poco, afectando el acceso a las escuelas, ocasionando pérdidas materiales a sus habitantes y favoreciendo la proliferación de enfermedades. No es solamente Villa La Ñata, Dique Luján o Benavidez, también se ven perjudicados con las aguas servidas que trae la inundación, Rincón, Tigre, Pacheco, Los Troncos, El Talar.

Es un problema de todo Tigre, las obras están mal hechas y los permisos son para las grandes inmobiliarias cuyos emprendimientos favorecen a una minoría de la población. Los servicios de agua potable atraviesan los barrios, pero no se quedan allí, van a los countries. Más del 50% de los terrenos de Tigre son barrios privados, construcciones realizadas en lo alto a costa del relleno de humedales y cerradas con paredones, altas murallas, fragmentando la población y el paisaje es negando para la inmensa mayoría de los que habitamos estas tierras.

La Bellaca es un lugar histórico de Tigre, como nos muestran los mapas del 1800, residencia de los pueblos nativos de la zona, guaraníes, querandíes y otros. Pero a las grandes inmobiliarias y al municipio les resulta indiferente, construyeron countries sobre los cementerios de estos pueblos, sobre los huesos de nuestros ancestros.

Ya destruyeron más de 10 mil hectáreas de humedales no les importa destruir el hábitat de la flora y fauna autóctona, patrimonio natural y cultural de una sociedad que entiende que todos los seres vivos somos valiosos. Es un error grave pensar que un countrie es progreso, que el rellenar humedales y parquizar con especies exóticas es evolucionar

Las familias siguen visibilizando esta problemática, se organizan, se suman más vecinos damnificados, grupos de vecinos ambientalistas y no pierden las esperanzas ni la alegría. Aunque tienen diálogo con los responsables de turno que presentan proyectos superadores, aún no se aprueban, saben que la fuerza se construye en las calles, con sonrisas, con la guitarreada y la caja coplera, con la buena onda, una flor, un “que tenga un buen día”, como los vimos este domingo mientras entregamos volantes.

Esta lucha puntual es parte de otras luchas del país y del mundo. A los grandes empresarios no les importa destruir el planeta, lo han demostrado en otra parte de nuestro continente incendiando de forma despiadada el amazonas y aquí en nuestras tierras destruyendo los humedales. De la misma forma en que millones se han movilizado en todo el planeta para defender el medioambiente, nosotros y nosotras vamos a defender nuestros humedales.