El Gobierno decidió dejar sin cobertura del 100% en medicamentos a los jubilados que ganen más de $388.500. Los medicamentos más consumidos por las personas mayores subieron promedio 210% en el último año. Entre los empresarios más ricos del país están los dueños de los grandes laboratorios.
Martes 3 de diciembre de 2024 11:08
Según el informe presentado por el Centro de Estudios Políticos para Personas Mayores (CEPPEMA), el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) y la Asociación Latinoamericana de Gerontología Comunitaria (ALGEC) el promedio de los 10 medicamentos que más aumentaron en el último año alcanza una suba interanual promedio de 194%.
Entre los productos destacados están el DAFLON 500, un venotónico que favorece la tonicidad de las venas y actúa como vasculoprotector, mejorando la resistencia de los pequeños vasos sanguíneos, con un incremento del 228%. También la ASPIRINA PREVENT, un agente antiagregante plaquetario empleado para disminuir el riesgo de morbilidad y mortalidad en pacientes con antecedentes de infarto de miocardio, angina de pecho, angioplastia coronaria o ACV no hemorrágico, que registró un aumento del 217%.
Estos incrementos se deben a la decisión del gobierno de Javier Milei de eliminar las regulaciones al sector farmacéutico, algo que tuvo un impacto devastador en los costos de los medicamentos, afectando directamente el acceso a la salud de las jubiladas y los jubilados.
No debe olvidarse que el promedio de consumo de medicamentos de las personas mayores es de 5 fármacos mensuales. Es cada vez mayor el gasto que representa en relación a sus ingresos.
Además, a este panorama deben sumarse las medidas cada más restrictivas que impone el PAMI en el acceso a los descuentos de los medicamentos y la eliminación del vademécum de muchos fármacos que tenían rebajas.
Sin embargo, no todos pierden: las farmacéuticas aumentaron su facturación un 360% en un año. Laboratorios como Roemmers, Bagó, Gador y Casasco en nuestro país, tienen la propiedad privada de las patentes medicinales, imponen los precios de referencia medicinales, pagan salarios de miseria y negocian con todos los gobiernos medidas que los beneficien.
Sin ir más lejos, en la lista de las personas más ricas de la Argentina -elaborado por la revista Forbes- el puesto número dos está ocupado por Hugo Sigman que, junto con su mujer, Silvia Gold, lideran Insud Pharma, el conglomerado de más de 10 empresas con fuerte presencia en la industria farmacéutica, que tiene 7000 empleados en 18 plantas de producción distribuidos en 50 países.
Además, dentro de los 10 primeros puestos en el ranking, también se encuentran los hermanos Alberto y Pablo Roemmers, con una fortuna de US$2400 millones. Empresarios que hacen su fortuna a costa de la salud de millones de personas.
En tanto que el Gobierno hace alarde de su pelea contra la casta, libera el mercado para que los pocos de siempre sigan aumentando su fortuna. Sin embargo, los jubilados con sus magros ingresos tienen que hacer malabares para poder cuidar su salud, comer y vivir luego de haber trabajado toda su vida.
Cada miércoles, los y las jubiladas nos demuestran que no van a dejar su dignidad ni sus derechos de lado y ofrecen resistencia al plan motosierra de este gobierno hambreador. Hay que seguir peleando por haberes que cubran la canasta de la tercera edad y por medicamentos para todos y todas. Hay que anular todos los aumentos y nacionalizar a las grandes farmacéuticas que lucran con nuestra vida, que funcionen bajo control de profesionales y trabajadores de la salud, jubilados, y al servicio de las grandes mayorías.
