Cristian Javier Ricobene fue detenido e imputado por el delito de “homicidio culposo agravado”. Mientras refuerzan la idea de una supuesta “impericia”, las denuncias por las pésimas condiciones en las escuelas se multiplican por toda la provincia y la desinversión del Estado es cada día más evidente.
Lunes 13 de agosto de 2018 17:49
Cristian Javier Ricobene, el gasista matriculado que había trabajado en la escuela primaria n° 49, fue detenido este lunes por orden de la Fiscalía N° 8, acusado de “homicidio culposo agravado” tras la muerte de Sandra Calamano y Rubén Rodríguez. La hipótesis judicial apunta así a investigar si el gasista actuó con “negligencia e impericia”, cargando toda la responsabilidad de lo sucedido en su accionar, y lo acusa también del delito de “defraudación a la administración pública”.
La conmoción por la explosión de la escuela primaria n° 49 de Moreno y la muerte de Sandra Calamano y Rubén Rodríguez todavía perdura. El paro docente en toda la provincia y las marchas en repudio que se realizaron en cada distrito mostraron la enorme bronca que se desató entre la comunidad educativa, y desnudaron la desidia estatal, la falta de inversión y las pésimas condiciones con las que todos los días tienen que lidiar docentes, auxiliares y estudiantes.
La Izquierda Diario recopiló en apenas algunos días decenas de testimonios que denuncian la realidad de la educación pública y los graves problemas de infraestructura que registran gran cantidad de escuelas. En los últimos días, incluso, más de cuarenta establecimientos suspendieron las clases por no contar con las condiciones adecuadas, seis auxiliares sufrieron una intoxicación en una escuela de Tigre (producto de la imprudencia de que el Consejo Escolar autorizara una fumigación en día laborable) y en La Plata un docente debió ser internado tras recibir una descarga eléctrica en la mañana de este lunes.
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A pesar de esto, desde la gobernación insisten en mirar hacia otro lado, mientras Vidal reivindica no haberse acercado a la escuela aún e insiste en victimizarse hablando cínicamente de la “utilización política” que se hace sobre los hechos. Tras un primer momento de silencio en el cual desde el oficialismo dejaron correr la hipótesis de un supuesto “error” por parte de Sandra y Rubén, ahora desde la Justicia se apunta a investigar si existió “negligencia e impericia” por parte del gasista.
Vale recordar que la comunidad de la escuela asegura que la existencia de una fuga de gas no es reciente, si no que había sido denunciada por lo menos en 8 ocasiones anteriores.
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