Lo hizo en una entrevista con La Nación. Aunque dice que no tenía “intención de ocultar nada”, nunca declaró la cuenta.
Lunes 19 de febrero de 2018 11:53
Finalmente Valentín Díaz Gilligan habló. Lo hizo con La Nación. En una breve entrevista confirmó todo lo que ya se sabía y señaló que no piensa renunciar.
El funcionario nacional, segundo en la Secretaria de Presidencia, afirmó que el dinero “no era mío ni gané un centavo con esa plata. Ese monto es el que estuvo depositado en la caja en algún momento”.
De esta forma confirmó que actuó como un testaferro del empresario Francisco Casal. Precisamente, sobre su relación con él, indicó “mi rol era de búsqueda de esponsoreo deportivo. En las ventas [de jugadores] estaban Casal y el Tano [Nelson] Gutiérrez”.
El funcionario le había dicho al diario El País del Estado español que Casal era su amigo y que “confiaba en él”.
Díaz Gilligan aclaró que no piensa en renunciar. Ante la consulta periodística por los pedidos de renuncia elevados incluso desde sectores del mismo oficialismo, afirmó “no creo que haya datos que ameriten esa salida. De todos modos, yo ya me preparé mentalmente para ir a la Justicia a declarar”.
El funcionario de Cambiemos se presentará este lunes en la Oficina Anticorrupción que preside Laura Alonso. Ante la misma buscará documentar su salida de la cuenta en cuestión antes de ser funcionario público.
Sin embargo, eso no elimina el problema de que haya actuado como testaferro.
Ante la pregunta de La Nación acerca de por qué no lo había declarado antes de ingresar a la función pública, Díaz Gilligan señaló que “cuando veía que podía ingresar a la función pública, le dije a Paco [Casal]: "Yo salgo". La cesión tardó en materializarse unos meses, y en el medio comencé a ser funcionario. No hubo intención de ocultar nada”.
Sin embargo, aunque no haya habido “intención” hubo ocultamiento.
La entrevista a Díaz Gilligan no hace más que volver a confirmar que, con Cambiemos, a la transparencia “te la debo”.
