El día de ayer, el oficialismo logró sacar dictamen favorable en el plenario de comisiones de Senadores para la modificación de la Ley de Hidrocarburos. Ampliación de concesiones a las empresas, la clave del nuevo proyecto.
Esteban Mercatante @EMercatante
Jueves 2 de octubre de 2014 09:44
El oficialismo en el Senado aprobó ayer en un plenario de comisiones el despacho que respalda el proyecto que modifica la Ley de Hidrocarburos para su adaptación a la producción de reservorios no convencionales de petróleo y gas natural, en áreas off shore y la recuperación terciaria de yacimientos convencionales. El bloque de senadores del Frente para la Victoria, que encabeza Miguel Picheto, sacó un dictamen en mayoría. El miércoles de la próxima semana el bloque mayoritario irá por la aprobación en el recinto.
La resolución se adoptó al término del plenario de las comisiones de Energía y Combustibles, de Presupuesto y de Asuntos Constitucionales que se reanudó el mediodía de ayer tras un cuarto intermedio dispuesto el martes. En su transcurso, el presidente y CEO de YPF, Miguel Galuccio, defendió el proyecto señalando que “no está pensado exclusivamente para YPF, está pensado para Argentina porque impacta en la inversión, pone en valor reservorios provinciales, generará renta y puestos de trabajo, y permitirá recuperar producción y reservas hacia el autoabastecimiento”. Por su parte, la Secretaria de Energía, Mariana Matranga, señaló ante el mismo auditorio que “los recursos de crudo y gas de yacimientos no convencionales son una piedra fundamental para acelerar el camino hacia el autoabastecimiento”, al tiempo que refirió que “creemos además que tenemos un gran potencial para el off shore pero debemos corroborarlo”.
El ex secretario Daniel Montamat consideró que el proyecto debería contemplar “una mayor competencia entre las empresas al momento de considerarse una prórroga de las concesiones de explotación de los yacimientos”. “Hagámoslo competitivo al tema porque si no esta cuestión queda limitada a la relación de quien está con la concesión con el gobierno de turno”, señaló.
Por su parte, el también ex secretario del gobierno de Raúl Alfonsín, Jorge Lapeña, sostuvo que “Argentina está en una crisis estructural en materia energética, con factor principal en los hidrocarburos”, y aunque se pronunció a favor de modificar la Ley 17.319, dijo que con ella “se puede mejorar la situación de YPF pero no resolver el problema energético del país”. Tras referir que “la caída de reservas comprobadas de gas natural son hoy la mitad que las existentes a principios de este siglo”, Lapeña sostuvo que “la que se propone es una ley conservadora del status quo existente y estamos transformando el concepto de concesiones temporales en concesiones permanentes”.
El proyecto contempla permisos para producir hidrocarburos no convencionales por 35 años, que pueden extenderse por períodos adicionales de 10 años, con incrementos de la regalías a las provincias hasta 18 por ciento. El texto legal plantea que el permisionario de un área no convencional podrá unificar la concesión con una convencional si demuestra que hay continuidad geológica y presenta un plan piloto de trabajos e inversiones para su consideración por parte de la autoridad de aplicación.
En el debate, el senador Marcelo Fuentes, presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales, defendió el proyecto señalando que “apostamos a consagrar a YPF como factor principal en la recuperación del recurso petrolero”, y destacó que la compañía de mayoría accionaria estatal tendrá un rol principal, asociados a empresas privadas internacionales, en desarrollo de inversiones para recuperar el autoabastecimiento.
Sobre este proyecto, el senador Fernando Solanas enfatizó que “ni Menem soñó una ley como esta, que es una vergüenza neoliberal”.
El proyecto que se busca aprobar en trámite veloz, extiende y generaliza las condiciones del convenio Chevron, firmado en julio de 2013 y replicado posteriormente con otras empresas, hacia toda la rama. Para facilitar a YPF S.A. las asociaciones con petroleras privadas para hacerse de capital, crea concesiones que en los hechos son a perpetuidad.
La ley plantea el criterio de que quien tiene la concesión de crudo convencional tiene derecho al crudo no convencional que está debajo de aquel. Sin mediar nuevas licitaciones, hay adjudicación directa de la explotación no convencional al que está ya en el área. Con la nueva ley, serán YPF y las petroleras que ya están instaladas quienes negociarán con los inversores que quieran participar de la promesa de Vaca Muerta, mediante acuerdos entre privados.
La izquierda y el proyecto de Ley de Hidrocarburo alternativo
El diputado del Frente de Izquierda Nicolás Del Caño presentó un proyecto de ley de hidrocarburos alternativo, acompañado por la senadora mendocina Noelia Barbeito, el ex diputado provincial de Neuquén, Raúl Godoy, entre otros.
El proyecto del Frente de Izquierda propone la nacionalización de toda la industria hidrocarburífera bajo el control de los trabajadores para que sean los trabajadores, junto a la comunidad y los pueblos originarios, perjudicados por las petroleras, los que decidan qué hacer con los recursos naturales. En vez de seguir permitiendo el saqueo de estas empresas multinacionales como Chevron que generan más desigualdad, contaminan el medio ambiente y expolian los recursos; se podría destinar el dinero para educación, salud, viviendas y demás necesidades populares.