Ministerio de Trabajo intervino ante los despidos y suspensiones que realizó el pasado martes la empresa Monsa. Delegados de esta línea anunciaron que se encuentran en estado de asamblea permanente.
Jueves 23 de marzo de 2017
La empresa Monsa, dueña de esta línea de colectivos, despidió y suspendió a decenas de trabajadores el pasado martes 21 alegando "destrozos" por parte de los trabajadores ocurridos tras la muerte de David Ramallo quien fue aplastado por un coche mientras desempeñaba sus tareas. Anteriormente a la muerte de David, los trabajadores y su cuerpo de delegados habían denunciado las malas condiciones en las que se veían obligados a trabajar.
Los trabajadores anunciaron un plan de lucha y un paro por tiempo indeterminado y esto llevó a que en el día de ayer se realice en el Ministerio de Trabajo una reunión entre las partes donde se dictó la conciliación obligatoria con los despedidos volviendo a trabajar. Producto de esto, los trabajadores se encuentran en asamblea permanente para ir viendo como se desenvuelve la conciliación obligatoria y en caso de que la patronal mantenga su posición iniciarían un plan de lucha.
La protesta de los trabajadores sobre la que se monta la patronal tuvo lugar el pasado 9 de septiembre. Ese día, el joven mecánico David Ramallo murió por desidia patronal. La falta de mantenimiento de la punta de línea donde se encontraba trabajando Ramallo fue la causante de su fallecimiento. El hecho ocurrió cuando fue aplastado por un colectivo que no se hallaba correctamente trabado.
La enorme bronca de los trabajadores después de ver como su compañero era aplastado por la unidad, fue lo que desató la protesta. A raíz de la misma es que la patronal acusa a los trabajadores por “destrozos”.
