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Red Internacional
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OPINIÓN. Diez años de lucha de la ex Jabón Federal

Se cumplen 10 años de “La Lucha de jabón federal”. Así se conoció a la dura pelea que en el 2006 dimos los trabajadores contra los despidos. Memorias y aprendizajes.

Viernes 19 de agosto de 2016

Para quienes fuimos parte de esta lucha, el recordatorio a los 10 años no intenta ser un mero repaso de los hechos, sino que lo tomamos porque para nosotros significó el primer ensayo de un camino que continúa hasta el día de hoy, y donde, al calor de estas luchas forjamos una organización de trabajadores combativos agrupados en La Bordó que no nos quedamos en los límites de nuestra fábrica, sino que extendimos nuestros lazos de unidad con los trabajadores de muchas jaboneras y entre ellos los más explotados, los que no tenían ni siquiera delegados ni derechos sindicales, y también estrechamos unidad con compañeros que a lo largo y ancho del país dan, al igual que nosotros, peleas contra las empresas, la burocracia sindical y los gobiernos empresarios de turno. Es esta nuestra más importante enseñanza a los 10 años, y es la que queremos fortalecer en todo el período que viene, que será de luchas duras y necesidad de organización. A su vez, es de destacar el rol fundamental que cumplieron los abogados del CEPRODH en esta lucha, siendo el principal organismo de DDHH que se jugó por los trabajadores.

Una lucha dura

Duró desde el mes de Julio hasta septiembre.

Un año antes, en el 2005, recuperamos la comisión interna luego de casi 10 años sin delegados y a partir de esto, logramos muchísimas conquistas que habían sido robadas por la burocracia sindical del gremio jabonero.

El despido de un compañero desató la bronca. Nos reunimos en asamblea y se votó por unanimidad el paro por tiempo indeterminado hasta su reinstalación.

Durante una semana la fábrica estuvo en estado de deliberación y movilización permanente. Cada oficina de directivos era rodeada por trabajadores para hacer escuchar su reclamo.

Se exigió al sindicato que vaya a la fábrica y encabece esta lucha. Pero la burocracia de Ramón Paz se puso en contra y nunca pisó la fábrica.

Denunciamos el despido ante el Ministerio de Trabajo, pero tardaron casi una semana en llamar a una audiencia entre la empresa y el sindicato, quienes desconocían el conflicto.

El objetivo estaba claro. La patronal tenía un stock para aguantar en otros galpones en temporada baja y con la complicidad de la conducción del SOJO se jugaban al desgaste de la lucha. Cuando el Ministerio llamó a conciliación obligatoria, la empresa, no sólo que no la acató, sino que respondió con 37 despidos más. Todos con causa. ¿Cual? Insubordinarse a la autoridad de los directivos de la patronal.

Como dijo Luis Giordano (despedido reincorporado, actualmente congresal de La Bordó):” Esa bronca de una patronal resentida por nuestra conquista, desembocó en los despidos de los cuales fuí parte. Pero esa provocación dió como resultado que trabajadores sin experiencia en luchar se pongan al frente por la reincorporación de todos los despedidos.”

Un duro golpe a los trabajadores que, por algunos días, los dejó shockeados. Pero el shock duró poco, y a los días, en una madrugada, los despedidos volvieron a la fábrica y comenzaron un bloqueo en los ingresos. En el cambio de turno de las 6 de la mañana se realiza una asamblea conjunta en los portones entre despedidos y no despedidos que vota “NO entrar nadie” en solidaridad con los despedidos.

Así se monta un piquete con acampe que duró 53 días. A lo largo de ese tiempo los trabajadores que estaban en la fábrica realizaron nuevos paros en solidaridad y la asamblea conjunta en los portones fue el principal organismo de decisión. Mientras los despedidos y los que no estaban en turno realizaban todo tipo de acciones, como cortes en la ruta 4, Avenida General Paz, 9 de Julio, movilizaciones al Ministerio de Trabajo y en La Plata, entre otras. La comisión de legislación laboral del Congreso Nacional se ofreció como mediación para resolver el conflicto. La empresa, en tanto, rechazaba todas las mediaciones.

Nuestra lucha nos hizo conocidos en toda la zona y despertó una enorme simpatía. Las reuniones de comisión de solidaridad y las asambleas de los despedidos las realizábamos en el Suteba Matanza que, a pesar de estar conducido por una dirección kirchnerista como La Celeste, tuvo que ceder las instalaciones por presión de que cientos de docentes matanceros se solidarizaban con los jaboneros. En este período pasaron por la carpa de los despedidos: Docentes, ferroviarios del Sarmiento, obreros del Astillero Río Santiago, de Zanón bajo gestión obrera, del Subte, Mafissa, Lucas Indiel, Madres de Plaza de Mayo, diputados, estudiantes. Hasta Osvaldo Bayer nos dedicó una nota de contratapa en Página 12, y en este mismo diario se publicó una solicitada en solidaridad con los trabajadores de TVB ex jabón federal firmado por decenas de diputados y organismos de DDHH.

Se construye un fondo de lucha que sostiene a los trabajadores despedidos y sus familias pero también trata de compensar los grandísimos descuentos sufridos por los que dentro paran en solidaridad.

Se pone en pie la comisión de mujeres compuesta por las señoras, madres y novias de los despedidos que cumplió un papel fundamental para la unidad en esta lucha.

Tras dos meses de bloqueo, con los stocks casi agotados pero las fuerzas de los trabajadores también, la patronal contraataca con un Lock Out patronal y suspende sin goce de sueldo a todos los que no estaban despedidos por tiempo indeterminado.

Los trabajadores deciden entrar igual a la fábrica y hacen guardias en cada turno.

Así, luego de 24 audiencias en el Ministerio y Tribunales se aceptó, en asamblea conjunta entre trabajadores despedidos y no despedidos, la reinstalación de 16 despedidos y la defensa de la comisión interna, que se mantiene como conquista al día de hoy. Una asamblea que se recuerda como muy dura y difícil por las circunstancias del conflicto, pero consciente de lo que se decidía,

El resultado es de alguna manera contradictorio. Desde el punto de vista de la demanda central de lucha, fue una derrota, aunque parcial, ya que se logró la reinstalación de 16 de los 38 trabajadores despedidos. Pero contradictoriamente, tomando en cuenta la fuerza y organización de los trabajadores en la fábrica, hubo un fortalecimiento, que se expresó en otras importantes peleas como fueron la defensa y efectivización de los contratados, ponerle un freno a los despidos, y un salario 20% superior a lo negociado por la burocracia, y es al calor de estas luchas que un sector de compañeros comenzaron a forjar la agrupación Bordó, que dirigirá la Comisión Interna durante todos estos años manteniéndonos independientes de la burocracia sindical, la empresa y los partidos patronales.

Este proceso de organización se extenderá luego a otras fábricas del gremio como Procter&Gamble y Guma de Córdoba. Cabe destacar este aspecto del balance, porque tira por la borda la lectura derrotista que hizo parte de la izquierda en su momento, en particular el PO, quienes escépticos en la organización y combatividad de los trabajadores, daba por derrotada la fábrica, y planteó que la Comisión Interna sería barrida más temprano que tarde. El desarrollo de los acontecimientos demostró cuán equivocados estaban, y que los trabajadores podemos fortalecernos y sacar conclusiones progresivas de las luchas.

Este fortalecimiento se desarrolló enfrentando, obviamente, los aprietes y contraataques de la patronal e intentos de cooptación de la burocracia, antes de la Azul y Blanca, ahora de la Verde.

Como recuerda Pepe, actual delegado de la Comisión Interna y miembro de La Bordó, que en ese entonces fue uno de los trabajadores que vivió esta lucha desde adentro: “Una lucha que nos ha enseñado mucho y a pesar de que no se pudo reincorporar a todos los compañeros dejó un escenario completamente diferente en la ex jabón federal, en el que se respetarán los derechos de los trabajadores.”

Pero esta lucha también dejó conclusiones entre los que no fueron reincorporados como dice “El polaco” Potarski: “Fui parte de los despedidos. Fue una muy buena experiencia, única, donde conocí un grupo muy bueno y unido. Lástima la gente que hoy se vendió y se fue con la conducción del sindicato. El acompañamiento de las mujeres y la comisión que se creó. Es al día de hoy que recuerdo esa lucha que para mí fue una victoria. Porque no siempre vuelven a incorporar compañeros con la lucha. Esta me sirvió para los lugares donde estuve después.”

Los trabajadores y su comisión interna también se transformaron en una importante referencia en la zona en la lucha contra la precarización laboral. Ya que en el 2011 y en el 2013 logramos la efectivización de cerca de 100 trabajadores contratados por agencia.

Siempre basándonos en el método de asamblea democrática, las cuales fueron el lugar donde se fue moldeando esta conciencia de unidad que las patronales y los dirigentes traidores siempre quisieron dividir. Estableciendo lazos con los barrios vecinos como los habitantes de la Villa Palito, muchos de quienes hoy trabajan en la fábrica.

Además, la tradición que se fue forjando se caracterizó por la solidaridad. No sólo con otros trabajadores como los de Mafissa en La Plata o Pirelli, Kraft, Donnelley o Lear, sino con los barrios humildes de La Matanza que se inundan cuando llueve.

Hoy constituimos La lista Bordó junto a trabajadores de Protcer & Gamble y la comisión interna de Guma en Córdoba. Y a través de una dura pelea por recuperar el gremio para los trabajadores, nos transformamos en la principal oposición, contando con congresales por la primera minoría.

Los trabajadores de la ex Jabón federal somos parte de una camada extendida de obreros-as que fuimos parte de lo que se conoce como el sindicalismo de base, caracterizado por ser sus formas de organización antiburocrática y con métodos asamblearios, transmitidos por los aires del 2001.Un sector considerable de trabajadores, a su vez, avanzamos en una organización a través de La Bordó con la izquierda, desarrollando un agrupamiento clasista, es decir, también anti patronal e independiente de los partidos patronales, como el FPV o Cambiemos. De esta manera muchos trabajadores en el 2015 fuimos parte de las listas del Frente de Izquierda, obteniendo una buena cantidad de votos en la fábrica, y desarrollando una campaña en los barrios y otros establecimientos.

A 10 años, sabemos que corren tiempos con duros golpes del gobierno de Macri y complicidad del FPV, y donde necesitaremos de la misma firmeza de entonces, pero sacando las enseñanzas propias de cada lucha. Una de ellas, y quizás hoy de las más importantes, la entendemos en la necesidad de organización. Los clasistas luchamos con más fuerza por eso.

Video "Insubordinados" a lucha de los trabajadores de TVB Ex Jabon Federal: