Conoce la lista de gobernadores del PRI que han acumulado en sus desfalcos más de 20 veces el presupuesto nacional para desastres.

La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Miércoles 27 de septiembre de 2017

La situación de emergencia en que miles de familias mexicanas se encuentran tras los sismos del 7 y el 19 de septiembre es alarmante. El gobierno de la Ciudad de México ofreció la indignante cantidad de tres mil pesos como parte de su proyecto de reconstrucción, mientras que para el resto de los estados afectados no hay aún ninguna opción o programa de apoyo.
Firmé Decreto para iniciar el Plan para la Transformación y Recuperación de la #CDMX, la fuerza de la ciudadanía nos mantiene de pie #mm pic.twitter.com/oUyiWhRaqS
— Miguel Ángel Mancera (@ManceraMiguelMX) 26 de septiembre de 2017
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La Auditoría Superior de la Federación (organismo del régimen que se encarga de concentrar resultados de fiscalización) ofrece cifras escandalosas sobre los desfalcos de gobernadores en distintas entidades y abanderados de distintos partidos patronales. La suma de estos robos, 181 mil 376 millones, representa 20 veces el total del presupuesto que el gobierno mexicano destina al Fondo de Desastres Naturales (Fonden), de apenas 9 mil millones de pesos, según hizo constar la agencia RT en días recientes.
- Chihuahua. César Duarte, PRI, 80 mil millones de pesos.
- Veracruz. Javier Duarte, PRI, 35 mil millones de pesos.
- Coahuila. Rubén Moreira; PRI, 32 mil millones de pesos.
- Jalisco. Aristóteles Sandoval, PRI, 17 mil 500 millones de pesos.
- Estado de México. Eruviel Ávila, PRI, tres mil 600 millones de pesos.
- Nuevo León. Rodrigo Medina, PRI, tres mil 567 millones de pesos.
- Tabasco. Andrés Granier, PRI, dos mil 604 millones de pesos.
- Michoacán. Fausto Vallejo, dos mil 323 millones de pesos.
- Colima. Mario Anguiano, dos mil 119 millones de pesos.
- Quintana Roo. Roberto Borge, dos mil millones de pesos.
Sin hogar, sin forma de recuperar sus trabajos o estudios con normalidad, muchos sin documentos o con la dolorosa pérdida de uno o varios miembros de su familia a cuestas, está claro que el proceso de recuperación será largo. La solidaridad demostrada por miles en las calles busca ser aplacada con la presión de empresas y la SEP para obligar a retomar actividades, mientras miles de familias enfrentan un futuro incierto.
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El enorme descontento por el accionar del gobierno ante la tragedia provocó iniciativas como la que exigía a los partidos entregar su presupuesto y que inclusive contó con el pronunciamiento de varios políticos en ese sentido, sin embargo es una propuesta que, sin organización y lucha en las calles, no será cumplida y de cara a la magnitud de la desgracia, resulta insuficiente.
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Según Enrique Peña Nieto, la reconstrucción del país tendrá un costo de 38 mil 500 millones de pesos, mientras el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (Lacen) de la UNAM asegura que harán falta al menos 29 mil millones de pesos para los trabajos de reconstrucción de Oaxaca y la Ciudad de México, restan los trabajos en Veracruz, Guerrero, Morelos y el Estado de México (también afectados por el sismo) y no únicamente eso.
La denuncia de que muchas muertes pudieron haberse evitado con mantenimiento de calles, puentes, escuelas y edificios es un elemento que además de agudizar la crisis de legitimidad de los distintos gobiernos, pone la atención sobre los graves problemas estructurales que padecen no sólo estas entidades, sino la totalidad del país.
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Los desfalcos evidenciados por la ASF son sólo la punta del iceberg. El resto de los partidos también se han beneficiado de sus puestos y a los enormes salarios de funcionarios hay que sumar los contratos "amañados", los vínculos con el narcotráfico y otros grandes negocios, como la entrega de recursos naturales. La vida de opulencia de unos cuantos significa para las grandes mayorías penurias, precarización y muerte.