Previo a las elecciones presidenciales del 2011, se decía que solo un “milagro” lograría que la izquierda supere el 1,5 % de los votos en las elecciones PASO. La historia es por todos conocida: la izquierda logro superar el piso proscriptivo en el 2011, y fue preparando su irrupción en las legislativas del 2013 con un millón trescientos mil votos, tres diputados nacionales, legisladores provinciales, y votaciones masivas en Mendoza, Salta y varios centros urbanos.
Miércoles 12 de noviembre de 2014
El desarrollo de la izquierda se viene dando al calor del ocaso del kirchnerismo. Levantando muchas de las banderas que el kirchnerismo viene pisoteando en los últimos tiempos. “Familias en la calle nunca mas”, “no a la represión estatal”, “contra las empresas buitres de Lear y Donnelley”, “basta de impunidad”, “juicio a los genocidas”, entre otras tantas banderas que la izquierda mantiene en alto, mientras los Berni, los Insfran, los Scioli se ocupan de corregir el relato kirchnerista.
Este dinamismo en la izquierda es lo que explica el debate dentro del FIT. La izquierda está en constante desarrollo, en permanente fusión con sectores del movimiento obrero, especialmente de la juventud obrera, que salen a pelear empujados por patronales buitres, por burocracias corruptas, y se funden con la izquierda. No hay “ruptura en el FIT” como titulan algunos interesados. Hay “debate en el FIT”, y eso no puede ser más que productivo.
La izquierda ya tiene sus dos candidatos presidenciales. Jorge Altamira, un veterano en esta compulsa, y Nicolás del Caño, un debutante con buenos antecedentes en Mendoza. El PO tomó el lanzamiento de la pre candidatura de Nicolás como un atentado a la unidad y al status quo del frente, como si la realidad no fuera algo dinámico en constante evolución: “es una usurpación” y otros tantos epítetos nada simpáticos fue la respuesta a la propuesta del PTS. Del Caño llamó al orden a sus socios del FIT, y a dar el debate en términos fraternales.
Altamira en el Acto del Luna Park, había reclamado un monolitismo dentro del Frente que llamaba la atención. Puso el ejemplo de “la toma de un puente”, para oponer la acción al debate. “Cuando hay acción, no puede haber debate” era la moraleja. Afortunadamente, dentro del PO está primando la cordura, y Altamira ha hecho nuevas declaraciones mucho más componedoras, como lo señalado en Página 12 diciendo que "seguramente se llegará a un acuerdo, tenemos mucho tiempo y disposición de debate para no convertir a las PASO en el marco de ese debate", y “nosotros quisiéramos que la fórmula presidencial fuera combinada”.
Con estas declaraciones se reconoce, sin decirle abiertamente, algo que es obvio: el derecho de cualquiera de los integrantes del FIT de proponer sus propios candidatos a cualquiera de las categorías. Será el consenso, la negociación, o en última instancia las internas de las PASO, las que pondrán al frente del FIT a quienes mejor exprese el programa de independencia política por el que se lucha.
Altamira agrega en Página 12 que “aunque somos el partido más importante del frente, no queremos internas”. Como titulamos en esta nota, el decir popular ya tradujo estos dichos: Dime de qué presumes y te diré de lo que careces.