Este lunes fue oficializado en el Boletín Oficial el primer veto de Javier Milei y es contra los jubilados y jubiladas. El Congreso puede insistir con la ley de la nueva movilidad jubilatoria si consigue los dos tercios. La primera parada será en Diputados: ¿están los votos? ¿Quiénes pueden definir? La jubilación mínima este mes es de $304.000.
Jesica Calcagno @Jesi_mc
Lunes 2 de septiembre 19:51
Pare rechazar el veto presidencial a la ley de movilidad jubilatoria, el Congreso necesita dos tercios de ambas Cámaras l Foto: HCDN
Javier Milei hizo uso por primera vez del veto presidencial: lo hizo para evitar que las y los jubilados que cobran la mínima reciban un aumento de aproximadamente $17.000 y se modifique la movilidad que fue fijada por Decreto hace pocos meses. Una nueva demostración de que el presidente libertario quiere gobernar como un rey: a fuerza de decretos y vetos, pasando por encima del Congreso. La particularidad es que la saña de Milei es contra los que más vienen sufriendo el ajuste. En los tres primeros meses de 2024, las jubilaciones explicaron entre 32,9% y 37,0% del ajuste total según los cálculos de CEPA. La licuación del poder de compra de los haberes jubilatorios es evidente para cualquiera, salvo para Milei que sostuvo este domingo que “las jubilaciones volaron en dólares”. El diputado del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño, difundió los datos oficiales de la Oficina de Presupuesto del Congreso: "el poder de compra promedio de las jubilaciones en los primeros 7 meses de 2024 cayó, respecto al año pasado, un 29% total y 18,5% para la mínima con bono".
La Oficina de Presupuesto del Congreso informó que el poder de compra promedio de las jubilaciones en los primeros 7 meses de 2024 cayó, respecto al año pasado, un 29% total y 18,5% para la mínima con bono.
Más que volar, como dijo Milei, las jubilaciones cayeron en picada. pic.twitter.com/3z2fv7O6Rb— Nicolas del Caño (@NicolasdelCano) September 2, 2024
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Otra particularidad es que la ley de movilidad jubilatoria fue votada en el Congreso por dos tercios de los presentes en ambas Cámaras. En Diputados el resultado fue 160 afirmativos, 72 negativos y 8 abstenciones, y en el Senado superó por más de 10 votos los dos tercios: tuvo 61 afirmativos y 8 negativos. Milei no solo la vetó igual, sino que el pasado miércoles reprimió la movilización de jubilados y jubiladas frente al Congreso.
La posibilidad de dar vuelta el veto presidencial depende formalmente de si el Congreso consigue dos tercios de los presentes de ambas Cámaras para insistir con la ley votada. La primera en pronunciarse tiene que ser la Cámara de Diputados, por ser la de origen que le dio la media sanción. La organizaciones de jubilados se vienen movilizando todos los miércoles para reclamar contra el ajuste y el hambre que redobló este gobierno. Esta semana volverán a hacerlo y esperan que crezca la convocatoria.
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El gobierno ya activó las negociaciones con sus más fieles aliados para bloquear la posibilidad de insistir en la Cámara de Diputados. El propio Milei tuvo que “bajar al llano” de la rosca que tanto dice aborrecer, para darle a Mauricio Macri la señal que pedía entre entraña y milanesas. Por eso se reunió el pasado viernes en Casa Rosada con diputados de La Libertad Avanza, del PRO y del bloque MID de Oscar Zago (el ex jefe del bloque oficialista de la Cámara Baja).
Para ir contra el veto presidencial, si hay asistencia perfecta, se necesitan 172 voluntades para insistir con la nueva movilidad en Diputados. Visto desde el otro lado: para defender el veto, el oficialismo necesita 86 votos.
Los que se juntaron en Casa Rosada con Milei, reúnen en Diputados 77 votos: La Libertad Avanza aporta 37, el PRO otros 37, y el MID de Zago 3. Viendo la votación de la media sanción, tendrían asegurados otros 4 votos: el de Lourdes Arrieta (que ahora tiene su monobloque tras el escándalo de la visita a genocidas), el de Lopez Murphy (que integra el bloque de Pichetto) y 2 del bloque de Carolina Píparo. Si el piso es de 81 votos, necesitan 5 votos más para lograr que el veto presidencial contra los jubilados se sostenga. ¿De dónde pueden salir?
¿Los sospechosos de siempre?
El gobierno de Milei ya viene contando con el apoyo de otros aliados en la Cámara de Diputados. Por un lado, hay 8 diputados y diputadas de otros bloques que en la sesión que dio media sanción a la nueva movilidad jubilatoria se ausentaron o se abstuvieron (además de los ausentes del PRO que ahora acompañarían al oficialismo). Son quienes cotizan más alto su voto luego del veto. Además, las miradas están puestas en el bloque de la UCR que ya ha demostrado su colaboración con la Ley Bases y un sector también ayudó al gobierno en la sesión por el DNU de los fondos reservados para los espías. A pesar de que el radicalismo fue impulsor de esta ley, no es descartable que haya sorpresas por la presión de gobernadores.
¿Quiénes son las y los diputados que podrían sostener el veto de Milei contra los jubilados?
Por un lado están los 3 tucumanos ex Unión por la Patria que responden al gobernador Jaldo. Desde que asumió Milei se han convertido en aliados muy fieles del oficialismo. Estuvieron ausentes en la sesión que le dio media sanción a la nueva movilidad jubilatoria. Son Elia Fernández, Gladys Medina y Agustín Fernández.
Hubo otros 2 diputados ausentes del bloque Encuentro Federal que lidera Miguel Ángel Pichetto. Son Jorge Ávila de Chubut (aliado del gobernador Ignacio Torres del PRO), y Franciso Morchio de Entre Ríos (aliado del gobernador Rogelio Frigerio del PRO).
Hay 3 diputadas que son aliadas del oficialismo, pero optaron por la abstención cuando se votó. Son la tucumana Paula Omodeo de CREO, el sello del ex diputado “campera amarilla” Olmedo; y las sanjuaninas María de los Angeles Moreno y Nancy Picón del bloque “Producción y Trabajo” (aliadas del gobernador Orrego).
Las sospechas sobre el bloque de la UCR en Diputados están a la orden del dia. Tal es así que este lunes, el presidente del partido y senador Martín Lousteau, no pudo asegurar que la totalidad de sus legisladores vayan por el rechazo al veto. En el programa de Diego Iglesias de Radio con Vos dijo “espero que haya una mirada común (...) quiero creer que vamos a defender en las dos cámaras las ideas que impulsamos y explicamos”. No fue casual la mención que hizo al diputado mendocino Lisandro Nieri que responde al gobernador Cornejo: “Nieri, que fue el ministro de finanzas de Mendoza, explicó el proyecto en diputados”. Es que Cornejo es señalado como el gobernador radical que más presiona a su tropa en el Congreso para acompañar al gobierno de Milei. Incluso, hubo 8 diputados radicales que defendieron el DNU de fondos reservados para la SIDE: además de Nieri, la mendocina Pamela Verasay, José Tournier (Corrientes), Roxana Reyes (Santa Cruz), Luis Picat (Córdoba), Pablo Cervi (Neuquén), Mariano Campero (Tucumán) y Martin Arjol (Misiones). Hay quienes ponen en esta lista la mirada por la nueva disputa que se abre frente al veto contra las jubilaciones.
Por ahora, no están garantizados los votos ni para ir contra el veto ni para defenderlo. Mientras tanto, el veto presidencial tendrá giro a las comisiones de Presupuesto y Hacienda (que preside el oficialista Espert) y Previsión (que preside la radical Brouwer de Koning). Allí empezará el debate, pero el resultado en el recinto todavía es incierto. Las organizaciones de jubilados que se vienen movilizando convocan a que sea la calle la que incline la balanza y ya cuentan con el apoyo de la izquierda que está presente en cada convocatoria que hacen. Los jubilados le reclamaron a la dirigencia de la CGT que convoquen a un paro. Hasta el momento, el peronismo respondió con un comunicado en X de la central sindical y con una juntada de firmas por la página change.org.
Solo con la huelga y la masiva movilización popular podemos defender a las jubiladas y jubilados y a las universidades públicas, abriendo el camino para derrotar todo el plan motosierra de Milei y sus aliados. https://t.co/OLXpwKlHZZ
— Nicolas del Caño (@NicolasdelCano) September 2, 2024
Jesica Calcagno
Nació en Buenos Aires en 1984. Licenciada y profesora en Sociología (UBA). Acreditada en el Congreso.