El Gobierno de Kicillof asegura que el viernes volverá a reunirse con las conducciones gremiales y ahí sí, aunque sin cláusula gatillo, se empezaría a discutir salarios.
Lunes 10 de febrero de 2020 22:56
Foto: Télam
“La cláusula gatillo era… es, un recurso que se utilizó para no perder poder adquisitivo del salario ante un gobierno que quería bajarnos los salarios”, dijo en las puertas de la Gobernación bonaerense de la ciudad de La Plata Roberto Baradel, titular del sindicato docente Suteba. Se refería, claro está, a la gestión de María Eugenia Vidal.
Consultado sobre cuál es el destino de la cláusula gatillo en estas paritarias para el Frente de Unidad Docente Bonaerense (que integra con otros sindicatos), Baradel agregó que “la cláusula gatillo también va a estar en la mesa como otros mecanismos que nos permitan ganarle a la inflación. Nosotros lo que pretendemos es ganarle a la inflación, no solamente empatar, y no perder poder adquisitivo sino mejorar los salarios”.
El dirigente sindical habló con periodistas antes y después de la primera reunión paritaria entre los gremios y los funcionarios bonaerenses, este lunes en el Salón de Usos Múltiples de la Casa de Gobierno de La Plata. Tras el primer encuentro dijo que desde el FUDB plantearon “todos los reclamos” del gremio, que además de lo salarial tienen que ver “con la infraestructura, las condiciones de trabajo y la situación de los comedores escolares”.
Por último Baradel y otros dirigentes informaron que, a propuesta del Gobierno, “se acordó que el miércoles comience la mesa técnico-salarial” para el sector. A su vez el jueves se reunirán las comisiones Salarial y de Condiciones de Trabajo y el viernes comenzará el trabajo de la Comisión de Salud Laboral.
Del lado patronal, estuvieron en la reunión el jefe de Gabinete Carlos Bianco y los ministros de Economía Pablo López, de Trabajo Mara Ruiz Malec y de Educación Agustina Vila. Los funcionarios habían anticipado que en este primer encuentro no iban a hacer ninguna oferta salarial. Así que todo giró en torno a algunas condiciones laborales.
Algo parecido sucedió en otra reunión previa, entre los mismos funcionarios y las representaciones gremiales de las trabajadoras y los trabajadores estatales, donde no se mencionó el tema salarial. Respecto a lo laboral, la gestión de Kicillof prometió el pase a planta permanente de alrededor de 4.500 trabajadoras y trabajadores contratados que Vidal había freezado y la “continuidad” (en criollo, una nueva renovación en los mismos términos de precarización) de miles de contratos que vencen en marzo.
En el caso de los estatales, según se anunció, los mismos funcionarios que luego se reunirían con los sindicatos docentes convocaron a una segunda reunión para el viernes, donde se concretaría la llamada “Mesa Técnica Salarial” para ese otro sector.
Desde la Agrupación Marrón de Suteba, que integra la lista opositora a la conducción de Baradel, se hicieron presentes en las puertas de la Gobernación. María Díaz Reck, referente del Suteba La Plata de la agrupación, dijo a La Izquierda Diario que “si el Gobierno quiere saber cuáles son nuestras demandas, lo primero que tiene que escuchar es que necesitamos un aumento salarial que lleve nuestros ingresos al nivel de la canasta familiar. Nuestros salarios, al igual que el de todos lo estatales bonaerenses, quedaron totalmente devaluados frente a escalada inflacionaria de los últimos años. También exigimos escuelas en condiciones adecuadas. Hoy hay miles de establecimientos educativos con riesgo edilicio”.
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En ese sentido, Díaz Reck recordó que las conducciones sindicales no fueron ajenas al proceso de pérdida del poder adquisitivo de miles de docentes. “Por eso les exigimos a esas conducciones que llamen a la realización de asambleas en todas las escuelas y seccionales, para que sea toda la base docente la que defina el pliego de reclamos que ellos tengan que llevar a las reuniones paritarias. La Marrón plantea que se destine plata para educación y salud y no para pagar la fraudulenta deuda externa y queremos discutir de cara a todas las compañeras y los compañeros”.
Vale recordar que la semana pasada Kicillof, luego de verse derrotado por los fondos buitre que lo obligaron a pagarles lo que quisieron sin renegociación ni postergación alguna, anunció que no pagaría un aumento ya pautado correspondiente a diciembre pasado. Frente a eso, las conducciones de Baradel y compañía salieron a "hacerle el aguante" al gobernador, generando un fuerte debate en la base docente. ¿Cuál va a ser el planteo concreto de esas conducciones sindicales ante los intentos oficiales de maquillar un ajuste funcional al pago de la deuda? Las bases, al parecer, no lo saben.
