Docentes y estudiantes debaten cómo enfrentar el autoritarismo en la educación

Daniela Avilés, quien además es militante de la agrupación docente ‘Nuestra Clase’ y del Partido de Trabajadores Revolucionarios, inició el Foro relatando una experiencia de lucha por su reincorporación que duró casi 7 meses, planteando: “a fines del 2017 habían 80 despidos en docentes y en ese momento levantamos una importante campaña contra los despidos junto a apoderados, trabajadores y estudiantes. En enero se colocó la denuncia por despidos injustificados y lo más importante fue que esa lucha no se llevó de forma silenciosa porque era expresión de un clima de cierre de fábricas y una serie de despidos en otros lugares de trabajo.

“Si esa reincorporación se ganó en tribunales fue por la unidad de representantes de sindicatos, mis apoderadas del colegio, mis alumnos y toda esa fuerza que organizamos en las calles. Esto sin duda no fue una lucha individual sino más bien marcó un precedente que demostró que organizarse, sirve”, señaló.

Por otro lado, Ariella Platero, estudiante movilizada y presidenta del Centro de Estudiantes del liceo Arica College, se refirió a la situación que atraviesan las y los secundarios en el marco de las distintas medidas represivas adoptadas por los directivos. Entre estas se encuentran: amenazas con suspensión de matrículas, suspensión de aniversarios y amedrentamientos directos a estudiantes y profesores que se movilizan.

“A los secundarios actualmente nos reprimen, nos tratan de delincuentes y nos criminalizan. Con la aplicación de la ley Aula Segura ven como delincuente a los adolescentes y niños que defienden sus derechos que han sido vulnerados por años. A los estudiantes siempre nos han dicho que deberíamos tenerle miedo a los directivos, pero en realidad los directivos son quienes deberían tenernos miedo a nosotros”, manifestó.

Sobre la situación en la Universidad de Tarapacá, Matt Vivanco, estudiante de la carrera de Historia y Geografía en la Facultad de Educación y Humanidades enfatizó en que hay que organizarse contra las medidas represivas del Rector Emilio Rodriguez, mismo Rector que estuvo en el 2011 dirigiendo la sede universitaria donde hizo una enorme persecusión a estudiantes movilizados y quitó las rejas. En su palabra rechazó las medidas anti democráticas que viene tomando la Universidad tales como la aprobación de un proyecto que implica la demolición de las actuales salas CEC de la FEH. Medida que fue decidida sin participación de estudiantes, es decir, una práctica totalmente autoritaria.

Matt se refirió también a las políticas del Gobierno de Piñera que sólo buscan atacar a la juventud. Lo mismo que hacen las autoridades en la UTA, instalando cámaras para vigilar a estudiantes y no para protegerlos como ellos dicen y que funcionan como método de amedrentamiento hacia quienes se organizan. Así mismo, el ingreso de la PDI al recinto como una forma de “dar un duro golpe” al tráfico, pero que esconde detrás una tremenda criminalización a los consumidores de cannabis. Manifiesta además que no es un caso aislado, sino que la entrada de la policía a universidades es una situación que se da en muchas universidades del país.

En esta linea planteó un cuestionamiento a la Federación de estudiantes de la UTA y a las dirigencias del Colegio de Profesores: “¿Cuál es el rol que cumplirán las juventudes comunistas que están en la Federación, el Colegio de Profesores en donde está el Frente Amplio y los Centros de Estudiantes en Liceos para enfrentar efectivamente la línea represiva del gobierno y los directivos? La oposición parlamentaria (Frente Amplio y Ex Nueva Mayoría), estando en las dirigencias de los organismos de estudiantes y trabajadores, han mantenido la “unidad” en el discurso, pero es clave que se transforme en la unidad en las calles y en la organización”.

Al concluir la profesora Daniela Avilés hace un llamado a rechazar la respuesta entregada por el Gobierno a los docentes y a unirse a las educadoras de párvulos este martes en un gran paro nacional educativo. Esto en el marco de un proyecto de ley que impulsa Cubillos y Piñera que pretende equiparar la subvención que entra a jardines públicos y privados. Situación que solo busca fortalecer aún más a los privados y empobrecer la educación pública.

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