La renuncia correspondería a los diputados Tucapel Jiménez y Cristian Campos. Dicha determinación se suma a la de Pepe Auth hace unos meses atrás, producto de diferencias internas dentro del partido.
E.E. Vergara Valparaíso, Chile
Martes 4 de octubre de 2016
Lo que se comentaba el día de ayer por los distintos pasillos del congreso, era la inminente renuncia de los diputados Tucapel Jiménez y Cristián Campos al Partido por la Democracia (PPD).
“El escenario que me acomoda es la independencia y quiero recuperar eso. Estoy viendo el mejor momento para hacerlo, porque no quiero dañar el partido“, señaló el parlamentario al medio “El Mercurio”.
Los motivos de salida de la colectividad
Los motivos que han llevado a tomar esta decisión han sido al diputado Jiménez, es su rechazo a Ricardo Lagos, quien viene a ser una de las cartas presidenciales de la Nueva Mayoría. Cabe recordar que bajo el mandato de Lagos, se le otorgó el indulto a Manuel Contreras, ex director del Departamento de Inteligencia Nacional (DINA), y quien fue condenado como autor del homicidio de su padre, el sindicalista Tucapel Jiménez.
En el caso del diputado Campos, su renuncia se debe principalmente al rechazo de las políticas desarrolladas por el gobierno, en relación al matrimonio igualitario, y la ley de aborto bajo 3 causales.
Separaciones en tiempos de elecciones
La renuncia de Jiménez y Campos, se sumaría a la del ahora diputado independiente, Pepe Auth, quien aludió a diferencias internas dentro del partido, acusando al senador Guido Girardi como el “socio controlador” de la colectividad, y se trata de una profundización de una aguda crisis de los partidos tradicionales de la burguesía: Chile Vamos y ahora Nueva Mayoría. Una crisis que tiene a los partidos tradicionales en las peores tasas de aprobación por parte de la población.
Así también una serie de renuncias se han presentado tanto de sectores de la derecha como de la Nueva Mayoría, donde estos últimos meses fuertes crisis han remecido a los partidos tradicionales del régimen. Y no es menor frente a la crisis de legitimidad que viven el día de hoy las instituciones, donde con la emergencia de nuevas alternativas, el tablero electoral parece lejos de estar resuelto.