Jueves 5 de febrero de 2015
Quedaron imputados el ex juez Arturo Liendo Roca y el ex fiscal Santiago David Olmedo de Arzuaga, por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar cuando cumplían funciones en la Justicia Federal de Santiago del Estero.
No obstante los dos ex magistrados siguieron en función, como la mayoría de los jueces y fiscales que colaboraron con la dictadura. Olmedo de Arzuaga presidió el tribunal fue que llevó adelante el segundo juicio en Catamarca por el crimen de la adolescente María Soledad Morales. El tribunal procedió a condenar al hijo de un diputado nacional, otro joven y varios policías por encubrimiento. Sin embargo este fallo, que en parte reparó el primero que dejo impunes a los hijos del poder, no fue por jueces probos, como se ve, sino porque grandes movilizaciones reclamaron justicia.
El ex juez de la dictadura, Liendo Roca, responsable del juzgado federal local a fines de los años 70, fue procesado por presunto autor de imposición de tortura, privación ilegítima de la libertad, violación de los deberes de funcionario público y asociación ilícita en perjuicio de ex presos políticos. Al ex fiscal Olmedo de Arzuaga se lo imputa por los mismos cargos, con excepción de la asociación ilícita y las detenciones ilegales.
El juez de la causa trabó embargo preventivo por 900.000 pesos al ex juez Liendo Roca y de 400.000 pesos al ex fiscal.
Hasta ahora los dos ex magistrados de la dictadura no están detenidos. Tienen prohibido salir del país y deben presentarse ante la Secretaría de Derechos Humanos del Juzgado Federal, a principio de cada mes. Se estima que a mediados de año el Tribunal Oral en lo Criminal Federal comenzarán las audiencias.