Dossier. La prensa revolucionaria de Marx y Gramsci

Marx y la Neue Rheinische Zeitung (1848-1849) de Engels

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Engels escribió este articulo a un año de la muerte de Marx, en marzo de 1884, en el órgano central de los socialistas alemanes, el Der Sozialdemokrat, es un homenaje, pero es también una discusión estratégica, o táctica siguiendo los términos de la época, donde explica la orientación política del Neue Rheinische Zeitung en medio de la revolución alemana de 1848.

El Neue Rheinische Zeitung, fue el periódico que literalmente asaltaron Marx, Engels y compañía, convirtiéndolo en el diario de combate que debía servir a la revolución alemana, y al resto de revoluciones en Europa: Órgano de la Democracia, como señalaba su bajada, aludiendo a las tareas democráticas que se debían acompañar contra las monarquías. Una empresa financiada por la misma burguesía de la Renania, que como también se darán cuenta fueron abandonando el proyecto desde los primeros números que iban saliendo, pero que aun así y con la perdida de sus mecenas se pudo mantener en combate hasta que la propia reacción tuvo que acabar con su redacción y su imprenta.

Engels da cuenta de la posición en que se encontraban para ubicarse en el campo de la extrema izquierda de la burguesía, y no aun de una política revolucionaria independiente, aún un apéndice de la burguesía dice Engels, para referirse al desarrollo hasta ese momento de la clase trabajadora alemana, “a la que no se le teme aun por lo que es, sino por lo que va a llegar a ser”, como lo muestra en ese momento el proletariado francés, entonces dice que históricamente no pueden estar sino en esa posición democrática burguesa radical.

A eso apela cuando cita los párrafos del Manifiesto Comunista al principio del texto. Pero por lo que no tiene que dar ninguna explicación o rendir cuentas es por la combatividad misma del periódico, que no perdonaba nada a los elementos conciliadores de la burguesía y de la pequeña burguesía alemana, que terminaban siempre arrastrándose a los pies de la nobleza, mostrándose incapaces de dar una pelea hasta el final por su República contra la monarquía.

Acusaran sin cansancio a todos quienes amenazan la revolución, no es casualidad que Engels recuerde en medio del texto a Marat, y su periódico L’Ami du peuple [1], agitador incansable y acusador inmisericorde durante la Gran Revolución Francesa. Engels, enlaza así a su camarada al mismo linaje de les grandes publicistas revolucionarios.

Ya rodeados por la reacción, su ultimo número estará impreso totalmente con tinta roja, y que señalará con estas palabras:

«Los redactores de la Neue Rheinische Zeitung se despiden de ustedes dándoles las gracias por la simpatía que les han demostrado. Su última palabra será siempre y en todas partes ésta: ¡Emancipación de la clase obrera!»

Gramsci y el L´Ordine Nuovo

1920: El Programa de L’Ordine Nuovo

1924: El Programa de L’Ordine Nuovo

Estos dos artículos publicados por Gramsci en L´Ordine Nuovo, son dos momentos muy diferentes de la política italiana, no solo porque están separados por 4 años, sino porque las condiciones son muy distintas en los momentos en que se dictaron. Tenemos por un lado un momento de ascenso de la lucha de clases, con tomas de fábrica, insurrecciones armadas de trabajadores, para después estar en un escenario donde el partido esta incluso ilegalizado, y gobierna el fascismo.

En el primer artículo, publicado en dos partes, el 14 y 28 de agosto de 1920, Gramsci da cuenta de los orígenes del periódico, de como jóvenes militantes de ese momento del Partido Socialista Italiano, quedaban a la cabeza de un diario que en un principio debía ser no mas que una folletín cultural para la clase trabajadora, y por la que tuvieron que hacer un verdadero golpe a su dirección para orientar el periódico al ritmo de lo que sucedía en la Europa revolucionaria luego del fin de la primera guerra mundial, y para esto uniéndose con la principal experiencia que estaban desarrollando les trabajadores italianos, los consejos de fábrica en el norte de Italia, organismo de autoorganización que se ubicaban como gérmenes de un nuevo poder, en sintonía con los soviet que acababan de fundar el primer estado obrero del planeta.

Lo que llevara incluso al periódico a ser el referente de estos Consejos, Gramsci relatará, como luego de reorientar al L´Ordine Nuovo, las fabricas hacían del diario su prensa oficial, que luego no por casualidad será el periódico en el cual se nuclearan las y los fundadores que darán vida al Partido Comunista italiano, con el L´Ordine Nuovo como su órgano oficial por supuesto.

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En la segunda parte ya estamos en otro momento, es 1924, y sobre Italia recae buena parte del peso de la reacción al ascenso revolucionario de los años 1917-1924, Mussolini ya esta a la cabeza del Estado italiano, desde donde gobierna con puño de hierro a la clase trabajadora, que en Europa y en Italia amenazaron todo el orden capitalista, y que en Rusia ahora tienen una fortaleza enorme desde donde reagruparse. El Partido Comunista Italiano por tanto se encuentra ilegalizado, esta en la clandestinidad y Gramsci lucha por rearmar al partido, retomando las lecciones del bienio rojo, donde el diario cumplió un rol central, y las lecciones de la revolución rusa, contenidas dentro de la táctica de Frente Único de la Internacional Comunista.

Gramsci busca también que el periódico sea el que agilice las relaciones ahora clandestinas del partido, ubicándolo al centro de las comunicaciones dentro de la militancia para formar más y nuevos cuadros que estén preparados para un nuevo momento de ascenso, para lo que plantea en el mismo artículo todo un plan financiero para su sostenimiento, un plan de formación que llegue a todos los cuadros y propagandistas de la organización, así como incluso, innovadores talleres de formación por correspondencia. Toda una serie de aspectos político organizativos para retomar la iniciativa incluso en un momento duro de represión.

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