A continuación presentamos una serie de entrevistas a quienes fueron protagonistas del Segundo Rosariazo, en las jornadas del 19 y 17 de septiembre de 1969.
Lunes 16 de septiembre de 2019 08:41
Se cumplen 50 años del Segundo Rosariazo y aquí presentamos una serie de testimonios a quienes fueron parte de sus protagonistas. Las entrevistas fueron realizadas junto a Mirta Sellares.
Pofesor Rubén Naranjo
¿Como vivió las movilizaciones del 69?
Cuando uno analiza esos años no puede dejar de reconocer hechos que pasaron fuera del país y que tuvieron que ver con los comportamientos, con las decisiones. El Mayo Francés del 68, marcó el comportamiento distinto para los jóvenes de todo el mundo. En aquella época, estábamos muy deseosos de tener los graffitis de las paredes de Paris. La situación social del mundo era diferente y en Rosario repercutía en forma muy directa. Los jóvenes de aquel momento estábamos muy comunicados. El Mayo Francés derramo toneladas de tinta, pero no derramo sangre. No murió nadie en el Mayo Francés, por lo menos como efecto de los conflictos. En cambio en Argentina, tal vez porque somos latinoamericanos y trabajamos de una manera distinta, acá murió mucha gente, tanto en los hechos de Rosario, Córdoba, Corrientes. El 69, para la Argentina fue un año signado por la sangre, por la muerte
¿Lo recuerda como un hecho espontáneo?
¿Cómo se vivieron los acontecimientos del II Rosariazo, de septiembre?
Dr. Horacio Zamboni
¿Cuál era el panorama de la ciudad al iniciarse el paro de 38 horas en septiembre?
La gente en las barricadas gozaba de la libertad y la defendía frente a los embates de la represión. Las barricadas eran derribadas pero se volvían a levantar, y eso prácticamente duro más de 30 horas. Había mucha bronca por la prepotencia militar, la proscripción del peronismo, la intervención de los sindicatos, las conquistas perdidas.
¿Que balance haces del Segundo Rosariazo?
La otra cuestión a rescatar es la unidad anti dictatorial. Todos esos obreros peronistas, socialistas, comunistas, que habían salido a exigir sus derechos mantenían sin duda sus diferencias pero estaban juntos en la calle contra la dictadura.
Yo recuerdo por ejemplo que la barricada del Cruce Alberdi, en Génova y Avenida Alberdi, estaba dirigida por el jefe de los bombos de Menem, el Tula a quien todos conocían porque entonces comandaba los bombos de a hinchada de Rosario central.
Por entonces aparece en el movimiento obrero una pluralidad de posiciones políticas y desde septiembre del 69 en la Argentina ya nada será igual. Onganía tenía los días contados hubo discusiones en el poder militar sobre como desactivar una lucha que, si no se hacían concesiones marchaba inexorablemente a una explosión violenta que encabezaría, ahora sí, la clase obrera. Porque la diferencia entre el primero y segundo Rosariazo fue el papel protagónico que en septiembre tuvo la clase obrera organizada sindicalmente. Salían las columnas desde los sindicatos con acciones muy claras. Arrastrando a otros sectores sociales. Ahí está la diferencia con el primero, donde el papel protagónico lo tuvo el movimiento estudiantil, aunque apoyado por sectores obreros. Por otra parte, en septiembre se le dejo el centro al poder oficial, la gente se refugiaba en los barrios y se combatía junto al vecino, al amigo y que esta la segunda característica: fue netamente popular.
Te puede interesar: Segundo Rosariazo: El análisis del Dr. Horacio Zamboni
Negro Aguirre: secretario general de ATE Rosario, dirigente durante el II Rosariazo
¿Cuándo se decidió la huelga del 16 y 17 de septiembre?
¿Comó actuaron las columnas obreras?
La primera acción, de nuestra columna fue dar vuelta un colectivo de la línea 58, con gente adentro y todo y ahí el chofer se dio cuenta que había huelga. Seguimos avanzando por 27 de febrero y al llegar a Maipú, nos esperaban los famosos Pumas (grupo represivo del norte de Santa Fe). Y hubo enfrentamiento, tiraban gases, y algo habíamos aprendido y divido las fuerzas, un grupo dio la vuelta por Buenos Aires y encerramos a los Pumas, y se desinflaron los Pumas y seguimos avanzando.
Recuerdo un compañero que le decíamos La Gallineta, un muchacho que era de la sección carpintería, iba a todas las asambleas y nunca hablaba, y ese compañero cuando se armó la podrida, en Bs As y 27 de febrero, saco un montón de baldosas y dijo “Che halla viene un tipo con un colectivo, déjenmelo a mi, este es mio”. Le reventó todos los vidrios y dijo “Bueno me saque toda la bronca que tengo adentro de hace años que me exploten”. Estaba claro lo que dijo, “estos son los que me someten, estos son los que me explotan, ahora soy un soldado de la emancipación”.
¿Qué conclusión sacas de esas jornadas?
Enrique Gigena: exdelegado ferroviario e integrante de la comisión coordinadora de la Unión Ferroviaria durante los Rosariazos
¿Que papel jugaron las Comisiones Coordinadoras en la histórica huelga ferroviaria de septiembre del 69?
¿Como fueron, en esa época, las asambleas de los Talleres de Pérez?
Te puede interesar: El Segundo Rosariazo, el hecho maldito de la historia rosarina
Héctor Quagliaro, dirigente de ATE Rosario
¿Qué pasó en septiembre de 1969?, porque a veces no se sabe bien que hubo dos Rosariazos
Te puede interesar: “Los años 60 y 70 constituyeron un punto de inflexión en nuestra historia reciente”