La validación del primer paso para convocar el referendo revocatorio fue celebrada por la oposición derechista. El gobierno negocia con un sector de la oposición mientras busca frenar el referendo.
La Izquierda Diario Venezuela @LaIzqDiario_VE
Martes 2 de agosto de 2016
La decisión del Consejo Nacional Electoral (CNE) este lunes por la noche sobre el cumplimiento de la primera fase para convocar el referendo revocatorio del presidente Maduro, no es sorpresiva. Para este lunes ya se espera la misma, y era casi de conocimiento público que se validaría el primer paso en el camino para el revocatorio.
El pedido del CNE de solicitar una investigación a las irregularidades cometidas en el cumplimiento de esa etapa, en función de las demandas hechas por el PSUV, no son más que formalidades. El martes 26 de julio, el alcalde de Caracas Jorge Rodríguez y dirigente PSUV, había solicitado al CNE la anulación de la inscripción de la coalición de la MUD. Desde el PSUV se argumenta supuestos fraudes cometidos por la MUD durante la obtención del 1% de las firmas que se requieren para implementar el referéndum revocatorio.
De acuerdo a la presidenta del Poder Electoral, Tibisay Lucena, en una breve comparecencia ante los medios: "Los 24 estados cumplieron con el requisito del uno por ciento de validación de manifestaciones de voluntad y la certificación será emitida por secretaría".
De esta forma, la rectora del CNE indicó que la oposición de la MUD superaron las casi 200.000 firmas requeridas por el Poder Electoral, equivalentes al 1 por ciento del registro de votantes, necesarias para demostrar que la alianza de partidos que conforma la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), pueda ir al siguiente paso.
La rectora indicó que, aunque este nivel fue superado, la institución solicitó una investigación del Ministerio Público sobre las supuestas irregularidades cometidas por la MUD en la recolección de estas firmas. "Vistas las irregularidades relativas a la posible usurpación de identidad cometida por algunos ciudadanos, el Poder Electoral está solicitando al Ministerio Público la investigación del caso", anunció.
En total 407.622 personas, fueron registradas en el proceso de validación de las firmas para respaldar la primera etapa del revocatorio. Pero recuérdese que la MUD había hecho toda una fanfarria de la entrega de más de 2 millones de firmas, todo como parte de su política mediática, aunque muchas de las firmas no pasaron el supuesto proceso de validación del CNE.
La derecha, aglutinada en la MUD, tendrá ahora dos días hábiles para solicitar formalmente al CNE que fije una fecha para la recolección del 20 por ciento de las personas inscritas en el censo electoral, necesarias para que el referendo finalmente sea convocado. Al proceder la validación de este primer paso, la oposición deberá reunir 3,9 millones de firmas en no más de tres días. Para que el mandato de Maduro se considere revocado deben votar a favor de su salida igual o mayor número de electores de los que lo escogieron en el 2013: 7,5 millones.
Esta situación se dio en medio de fuerte presiones políticas, incluso de carácter injerencista por parte del imperialismo estadounidense que hasta hace unos días “urgía inmediatamente” al gobierno de Maduro la convocatoria del revocatorio. Incluso, el derechismo continental no dejó de mover sus fichas, con Paraguay a la cabeza, que viene en una oposición férrea para que Venezuela no asuma la presidencia pro tempore del Mercosur como parte de su política de apuntalar a la derecha local y presionar a Maduro tal como explicamos en este diario.
La premura para la derecha por hacer el plebiscito este año radica en que, según la Constitución, si se realiza en el 2017 y Maduro es revocado, no se celebrarían nuevas elecciones y sería el vicepresidente el encargado de culminar el mandato hasta 2019. La derecha festeja, y ya ha convocado a marchas para los próximos días para que se active el segundo paso.
Pero una serie de pactos y negociaciones se viene realizando entre el gobierno y la oposición, vía los mediadores internacionales encabezados por el español Zapatero, así que el anuncio del CNE de este lunes se inscribe en este marco de conversaciones que se vienen montando como escribimos en un reciente artículo.
El pueblo debe saber que así como el gobierno de Maduro viene aplicando medidas de ajuste y políticas económicas que van contra los trabajadores y el pueblo pobre, la derecha no representa nada progresivo sino todo un plan reaccionario, que incluso ya hizo alarde que de llegar al gobierno, aplicará toda una agenda de políticas antipopulares.