Una mayoría de parlamentarios votó este lunes destituir al presidente Vizcarra, envuelto en escándalos de corrupción. Se agrava la crisis política.
Martes 10 de noviembre de 2020 08:33
Con 105 votos a favor, 19 en contra y 4 abstenciones, el Congreso de la Republica de Perú resolvió destituir por "incapacidad moral" al presidente Martin Vizcarra quien se vio involucrado en denuncias de corrupción por haber recibido sobornos para la construcción del hospital de Moquegua y la obra Lomas de Ilo cuando se desempeñaba como gobernador regional entre los años 2011-2014.
Al parecer, lo que habría llevado a que la mayoría de parlamentarios opten a última hora del lunes por la vacancia presidencial (destitución), sería la publicación en los medios de comunicación de las conversaciones telefónicas entre Martin Vizcarra y el ministro de Agricultura José Hernández, donde se puede apreciar con mucha claridad la estrecha relación entre el presidente y Hernández.
Vizcarra asumió su vacancia en el cargo de Presidente de la Republica, pero no reconoció en ningún momento su responsabilidad en los casos de corrupción
José Hernández es uno de los aspirantes a colaborador eficaz (delación premiada) y habría sido él uno de los que denuncio a Vizcarra ante la fiscalía anti corrupción por haber recibido los 2.300.000 soles (más de 600 mil dólares) para favorecer a las empresas constructoras del consorcio OBRAINSA encargadas de la edificación del hospital de Moquegua y de la obra de irrigación Lomas de Ilo, cuando Martin Vizcarra era gobernador regional de Moquegua.
Vizcarra había negado públicamente tener una relación de amistad con Hernández y con otros personajes vinculados a la corrupción, como Antonio Camayo (sancionado por el sonado caso de los “cuellos blancos del puerto”). Sin embargo, en los mensajes telefónicos quedo demostrado que Martin Vizcarra, no solo era muy amigo de José Hernández, sino que también coordinaban temas políticos de mucha importancia como la incorporación del mismo Vizcarra como vicepresidente del expresidente destituido Pedro Pablo Kuczynski para las elecciones del 2016, así como la caída de Kuczynski en el año 2018 y sus alianzas con el fujimorismo a través del excongresista Héctor Becerril. Además, los mensajes telefónicos mostraron que Vizcarra si se reunió con Antonio Camayo, al cual consideraban en su círculo interno como parte de “los amigos”.
La relación entre Martin Vizcarra y José Hernández se habría iniciado a finales de la década del 80, cuando Vizcarra se desempeñaba como gerente del proyecto Pasto Grande en Moquegua y Hernández era proveedor de dicho proyecto a través de su empresa constructora.
Esta relación de amistad y de “negocios” se mantuvo muy dinámica cuando Vizcarra se desempeñó como gobernador regional de Moquegua durante el 2011-2014. Es en esos años cuando se da la licitación pública entre el consorcio OBRAINSA y el gobierno regional de Moquegua presidido por Martin Vizcarra que llevo a que dicho consorcio “gane” esta licitación para la construcción del hospital de la región sureña y la obra de irrigación Lomas de Ilo.
Es para pagar este favor, que OBRAINSA le habría entregado los 2 millones 300 mil soles (800 mil dólares) a Vizcarra en diferentes momentos. Aquí, Hernández habría sido el intermediario, por esa razón gozaría de información de primera mano. Ya con Kuczynski en el gobierno, Vizcarra y José Hernández se volvieron a encontrar en el ejecutivo, ya que Martin Vizcarra era el 2do vice presidente de PPK y a su vez Ministro de Transportes, mientras que José Hernández se desempeñó como Ministro de Agricultura.
Lo que se viene
Horas después de la votación en el Congreso, Martin Vizcarra dio una conferencia de prensa en Palacio de Gobierno. Aquí estuvo acompañado de algunos de sus ministros y terminó aceptando la decisión del Parlamento, por tanto, asumió su vacancia en el cargo de Presidente de la Republica. Sin embargo, no reconoció en ningún momento su responsabilidad en los casos de corrupción que lo comprometen abiertamente, más bien, durante gran parte de su alocución apelo a victimizarse como en otras oportunidades.
Según lo establece la Constitución Política del Estado en su artículo 115, cuando se dan este tipo de situaciones, le corresponde al presidente del Congreso de la Republica, asumir la función de presidente del país hasta que se den nuevas elecciones. En ese entender y de no mediar inconvenientes, asumiría la condición de presidente de la Republica Manuel Merino de Lama, quien tiene la potestad de constituir un nuevo gabinete, quedando el anterior disuelto.
Manuel Merino es militante de Acción Popular, que fue una de las fuerzas políticas más votadas en las últimas elecciones parlamentarias complementarias de enero de este año. Merino hace parte de los parlamentarios conservadores y neoliberales que hoy son mayoría en el Congreso peruano, por ello, en lo que va de su gestión como presidente de este poder del estado ha avalado todas las medidas económicas pro empresariales de Vizcarra que golpearon duramente a la clase trabajadora y al pueblo.
Cabe mencionar también que actualmente se encuentran en curso las elecciones presidenciales y congresales, las cuales deberán realizarse en abril del 2021. Estas elecciones fueron convocadas meses atrás por Martin Vizcarra y han sido reconocidas por Manuel Merino después que se aprobó la vacancia presidencial.
Sin embargo, hasta el cierre de esta nota hay mucha incertidumbre en la población ya que el Congreso, en cuyas manos recaerá ahora la responsabilidad de gobernar el país, es uno de los espacios políticos más desprestigiados a raíz que muchos de sus integrantes están vinculado a temas de corrupción y no representan una alternativa de cambio para el pueblo trabajador. En ese marco, la vacancia de Vizcarra no cierra la presente crisis política, sino más bien abrirá nuevos escenarios ya que lo que realmente empieza a crujir en el Perú es el conjunto de instituciones que hacen parte del régimen de 1993.