Deuda. Festejo buitre: el FMI celebró el acuerdo de Argentina con el Club de París

El FMI felicitó este jueves el acuerdo alcanzado entre la Argentina y el Club de París, mientras siguen las negociaciones para un nuevo programa con el organismo multilateral para refinanciar la deuda que le otorgaron al macrismo.

El vocero del Fondo, Gerry Rice, afirmó que “le damos la bienvenida a este progreso de la Argentina para resolver su deuda con los acreedores del Club de París", en el marco de su habitual conferencia de prensa en Washington. Guzmán anunció este martes que pagará U$S 430 millones.

Respecto de las negociaciones puntuales con el FMI, Rice señaló que “continuamos comprometidos con la Argentina para que supere sus desafíos; el diálogo es constructivo y productivo, pero no tenemos una fecha para arribar a un nuevo acuerdo”. El FMI festeja que el Gobierno pague la deuda ilegal con origen en la dictadura militar.

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Al respecto, Rice confirmó que las negociaciones siguen de manera presencial en la cumbre de ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20 en Venecia, prevista para el 9 y 10 de julio próximos.

El vocero del FMI afirmó que “la Argentina ha expresado su compromiso de hacer frente a sus obligaciones con el FMI y para este fin estamos trabajando con el Gobierno para lograr un nuevo programa”.

En cuanto a los plazos de las negociaciones, Rice sostuvo que no hay "ningún cronograma sobre las discusiones o cuándo podremos llegar a un acuerdo por un nuevo programa".

"Lo único que puedo decir es que estamos trabajando tan duro como podemos y muy comprometidos con las autoridades porque creo compartimos el mismo objetivo en el sentido de que Argentina retorne tan rápido como sea posible a un crecimiento sostenido”, agregó.

El Gobierno decide pagar la deuda sin realizar ninguna investigación. Para honrar la deuda avanzó con un fuerte ajuste con recortes en salarios públicos, jubilaciones y partidas claves como salud en términos reales. Hay que rechazar el acuerdo del Club de París y del FMI y movilizarse por el desconocimiento soberano de la deuda.

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