Lunes 28 de octubre de 2019 10:30
Los socialistas revolucionarios podemos entender la alegría de sectores de los trabajadores y el pueblo pobre por la derrota electoral del gobierno de Macri.
Sin embargo, jamás podríamos "compartirla", tal como lo plantea el Nuevo MAS. Por el contrario, nuestro deber es denunciar -como lo hizo Nicolás del Caño y el Frente de Izquierda Unidad durante la campaña- lo que es el Frente de Todos.
El espacio político que llevó a Alberto Fernández como candidato a presidente está compuesto -en forma abrumadora- por los gobernadores, por Sergio Massa y muchos otros derechistas que co-gobernaron con Macri. Es decir, por verdaderos cómplices del ajuste.
Lamentablemente, por la traición de sus direcciones sindicales, a millones de trabajadores no les quedó otra opción que optar entre Macri y Fernández, y hacerlo únicamente por la vía del voto.
Resulta indigno que una corriente que se reclama socialista “comparta la alegría” de que las masas hayan tenido que optar por uno de los partidos de sus verdugos.
