En la sesión del jueves se aprobó la transferencia de 30.000 m2 por 20 años.
Patricio del Corro @Patriciodc
Viernes 27 de noviembre de 2015
Fotografía : DYN
Con la ayuda y los votos de ECO, del Frente para la Victoria y de La Alameda, el PRO votó la cesión de terrenos a la Iglesia Católica que consideraba “innecesarios” para la gestión de la Ciudad. En el marco de la falta de vacantes, escuelas con dificultades edilicias graves y un déficit habitacional de 500.000 porteños, el peso del Arzobispado se hizo sentir en la Legislatura. El diputado Ramal del Frente de Izquierda se opuso junto a otros legisladores de la oposición.
Los favores a la Iglesia Católica siguen su curso en la Ciudad. Mientras el Estado Nacional sigue sosteniendo al culto católico, la Legislatura busca también ganar el favor papal y acaba de aprobar en una ley de segunda lectura el permiso de uso gratuito de terrenos de la Ciudad al Arzobispado para “una finalidad religiosa y/o educativa”. Los diputados del PRO contaron nuevamente con la ayuda de ECO, la casi totalidad del Frente para la Victoria y Gustavo Vera de La Alameda para este escandaloso regalo a la Iglesia.
Los terrenos están en distintos barrios de la Ciudad, algunos en las zonas más cotizadas, por ejemplo sobre la Av. Santa Fe, Coronel Díaz o Figueroa Alcorta. Otros están situados en las comunas del sur que tienen los índices más altos de déficit habitacional. Pero para estos legisladores que han resuelto declararlos “innecesarios para la gestión” parece ser que la Ciudad puede regalar terrenos por cientos de miles de dólares y que las 250.000 personas que hoy viven en villas aún pueden esperar.
La única modificación que se logró fue la de la escuela primaria Nº3 Primera Junta y el jardín Nº2 Margarita Ravioli, en Caballito, que iba a pasar de ser parte del polideportivo que usan los chicos a pertenecer a la parroquia de Caacupé. Ante la movilización de la comunidad educativa en el barrio y en la Legislatura el oficialismo tuvo que sacar el terreno del proyecto alegando un “error en los planos”.
En una Ciudad que tiene un enorme déficit habitacional, falta de vacantes y problemas edilicios en las escuelas, y un nivel bajísimo de m2 verdes para sus 3 millones de habitantes este obsequio a la Iglesia Católica solo puede entenderse como un tributo del PRO al Vaticano a días de asumir el gobierno nacional. Todo el bloque del FpV, salvo María Rachid, y el ECO acompañaron la ofrenda y lejos quedaron los discursos progresistas de oposición al macrismo, al parecer solo validos en épocas electorales.
Así, en pleno siglo XXI todavía estamos peleando por separar a la Iglesia del Estado. Una iglesia que utiliza permanentemente su poder para prohibir el aborto legal seguro y gratuito y rechazar los métodos anticonceptivos y la educación sexual en las escuelas. Mucho peor es esta entrega cuando el Gobierno de la Ciudad se ha caracterizado por subejecutar el presupuesto destinado a Vivienda y no aceptar los fallos judiciales para urbanizar las villas de la Ciudad.
Como frutilla del postre de la sesión, se aprobó también en primera lectura, el permiso de uso por 30 años de otro predio de la Ciudad a la Universidad Torcuato Di Tella, a pesar de la oposición de los vecinos del barrio.
La semana que viene el oficialismo buscará aprobar un nuevo presupuesto que mantiene en porcentajes marginales las partidas para salud, vivienda y educación, y que ya prevé una inflación del 26% más un dólar a $12 que, suponiendo que logren sostener a ese precio, implicaría otro golpe del 20% a los salarios de los trabajadores.
Patricio del Corro
Sociólogo, dirigente nacional del PTS y legislador MC de CABA por el FIT-U