Este miércoles por la madrugada fue asesinado en su domicilio el presidente Jovenel Moïse. La noticia recorrió todo el mundo, al igual que las especulaciones sobre qué pasó.
Diego Sacchi @sac_diego
Viernes 9 de julio de 2021 10:47
De esos temas hablamos en la columna sobre noticias internacionales del programa de radio El Círculo Rojo, que se emite todos los jueves de 22 a 24 hs por Radio Con Vos.
Las especulaciones sobre quiénes fueron los autores dan para una novela policial: desde alguna de las bandas ligadas al narco que controlan la capital, grupos paramilitares, mercenarios vendidos al mejor postor, hasta el confuso vídeo que muestra a los asesinos entrando al grito de “esto es operativo de la DEA”.
Lo cierto es que el domicilio del presidente ubicado en uno de los barrios más exclusivos de Puerto Príncipe, contaba con poca presencia de seguridad, un indicio de que hubo vía libre.
Tengamos en cuenta que Moïse tenía varios adversarios de peso entre los principales empresarios del país, senadores y sectores del poder judicial.
Empresario de la industria bananera, candidato por el partido PHTK, una formación política ultraderechista y ultraneoliberal, llegó al gobierno en 2015 en una elección donde votó el 18 por ciento de los habilitados.
Su presidencia estaba cuestionada, para muchos su mandato había terminado y se negaba a abandonar el poder. En enero había disuelto parcialmente el parlamento y buscaba imponer una reforma constitucional. Esto generó masivas protestas.
Se sostenía gracias al accionar de las fuerzas represivas del Estado, y la venia de Estados Unidos y la OEA que apoyaban sus planes de ajuste, como la “recomendación” del FMI de eliminar los subsidios a los combustibles, que catapultó en julio de 2018 a millones de personas a las calles del país.
La crisis política en Haití no comenzó con el asesinato de Moïse, aunque estamos ante una agudización. El Gobierno quedó en manos del Primer Ministro Claude Joseph que se autodesignó como presidente interino y decretó el “estado de sitio”.
Sumemos que el cargo presidencial lo tendría que ocupar el jefe de la Corte Suprema, pero el juez que estaba al frente, René Sylvestre, falleció de covid-19 el 23 de junio pasado.
“Todavía no está claro quién liderará Haití”, reconoció el embajador en Estados Unidos, Bocchit Edmond. Un escenario complejo que puede dar lugar a salidas autoritarias ante la falta de actores capaces de asumir una transición legítima.
Un dato me llamó la atención mientras buscaba información. Este asesinato presidencial no es el primero en Haíti. El primero sucedió en 1915 contra el presidente Jean Vilbrun Guillaume Sam, lo que llevó a la primera ocupación estadounidense que duró casi 20 años.
Creo que por ahí podemos encontrar una clave de la crisis haitiana. Estados Unidos es el principal responsable de una larga historia de intervenciones políticas y militares, la ocupación militar entre 2004 y 2017 (MINUSTAH) con la participación los ejércitos de países América Latina, que llevaron al país al espiral de miseria y pobreza.
La profunda crisis política, económica y social actual se explica en gran parte por estos actores y sus vínculos tanto con el presidente asesinado como con la oposición política que ansía hacerse del poder.
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Diego Sacchi
Nacido en Buenos Aires en 1977, militante del Partido de Trabajadores Socialistas desde 1994. Periodista, editor en la sección Internacional de La Izquierda Diario y columnista de temas internacionales en el programa de radio El Círculo Rojo.
