Un experimento con 43 especies de mosca revela perdida de fertilidad como consecuencia del cambio climático debido al aumento de la temperatura.
Jueves 10 de junio de 2021
En nuestro planeta habitan millones de especies, muchas se adaptaron a los distintos cambios que ha enfrentado la tierra y a sus distintos ecosistemas, pero ahora se enfrentan a un cambio climático más acelerado como consecuencia de la forma de producción capitalista que avanza contra la vida solo para engordar las ganancias de los empresarios y no todas las especies lograran sobrevivir al calentamiento global.
Algo que ha preocupado a algunos científicos es la disminución de la fertilidad en los humanos y en el resto de las especies animales y que en un principio se relacionaba solo con los desechos químicos o químicos que se usan en actividades cotidianas, pero se dieron cuenta de que hay una relación con el cambio climático.
Te puede interesar: ¿Qué amenaza a los océanos?
Se sabe que hay temperaturas letales que provoca la muerte de las especies, pero la investigación se centró en el aumento mínimo de la temperatura con relación a la fertilidad de los animales.
Un equipo de investigador encabezado por Steven Parrat, un ecologista evolutivo de la Universidad de Liverpool, se ha puesto al frente de las investigaciones del Límite de fertilidad térmica (TFL, por sus siglas en ingles). El TFL indica el nivel de estrés por calor que puede causar infertilidad en las especies.
Te puede interesar: Cambio climático y capitalismo ante un nuevo Día del Medioambiente
Esta investigación puede ayudar a revelar qué especies están o podrían estar en peligro de extinción no solo porque se arrase contra sus hábitats sino por el aumento de las temperaturas que provoca su infertilidad. Algunos trabajos anteriores a los de Parrat ya demostraban cómo los gametos (célula reproductora masculina o femenina), en especial los espermatozoides, eran sensibles a las olas de calor.
La investigación se centró en machos de 43 diferentes de especies de moscas de la fruta que fueron expuestos por cuatro horas a temperaturas benignas a letales. A los machos que sobrevivieron se les permitió aparearse con dos grupos diferentes de hembras durante una semana, para evaluar las consecuencias del estrés por calor a los que fueron expuestos en su fertilidad.
Te puede interesar:El capitalismo destruye el planeta, destruyamos el capitalismo
Los resultados arrojados indicaron que 11 de las especies experimentaron pérdida de la fertilidad del 80% inmediatamente después de la exposición a pequeñas variaciones de calor que no llegaban al calor letal. También se reflejó que al pasar la semana las moscas no se recuperaron al contrario aumento su infertilidad.
Parrat mencionó en su estudio que los ectotermos (especies que dependen de su entorno para regular su temperatura corporal) y especies con temporadas cortas serán las mas vulnerables debido a la perdida de fertilidad, lo mismo los animales que habitan en áreas geográficas pequeñas como lagos, cimas o valles aislados, probablemente tienen menos oportunidad de alejarse de las áreas de calor y corren riesgo de esterilidad inducida por calor.
¡El capitalismo destruye al planeta, destruyamos al capitalismo!
Lo único que demuestra que este estudio es que el cambio climático y la crisis de los ciclos biológicos del carbono, el agua, el fósforo y el nitrógeno; la acidificación de los océanos; la pérdida creciente y acelerada de la biodiversidad; los cambios en los patrones en el uso de la tierra y la contaminación química de la industria, son algunas de las terribles manifestaciones de una situación completamente inédita para la humanidad.
Ante esta catástrofe ambiental las palabras de Rosa Luxemburgo siguen resonando y con mayor vigencia, “socialismo o barbarie”, por lo tanto la única salida que tenemos es organizarnos y luchar por una sociedad completamente distinta, una sociedad sin clases, donde la riqueza de unos cuantos no sea más importante que la vida, donde la tecnología se ocupe para el beneficio de las grandes mayorías y para recuperar el planeta y no para su destrucción.
Pero esta lucha solo se puede dar con la clase trabajadora al frente que son quienes mueven al mundo, levantando las demandas de la juventud, los pueblos originarios y todos los sectores de explotados y oprimidos.
