La votación se produjo el miércoles 15 de abril, donde finalmente se rechazó la moción en la Cámara de Diputados, declarándose inadmisible el proyecto de ley.
Viernes 17 de abril de 2020
El proyecto de ley consistía en que los afiliados a las AFP pudieran retirar hasta un sueldo mínimo mensual para poder paliar la crisis provocada por el Coronavirus.
Ante esto, la diputada por la región de Antofagasta, Paulina Núñez (RN), votó en contra de esta iniciativa, cosa que no sorprende, pues la diputada pertenece a un sector abanderado de las AFP, que mantienen a los jubilados en la miseria, y que hace poco este negocio de la jubilación perdió 40 mil millones de dólares de los fondos de los trabajadores.
Sin embargo- y claramente no son las razones del voto en contra de Núñez-, el proyecto también tiene reparos, pues son los afiliados, en base a sus propios ahorros, los que deberán sacar este ingreso mínimo mensual ¡de sus propios bolsillos! Mientras el negocio y las ganancias de las AFP se mantienen y los grandes empresarios continúan sin tener que costear absolutamente nada de la actual crisis.
Este proyecto sigue una lógica muy similar a la ley de "protección del empleo", donde se establece que las y los trabajadores tienen que utilizar sus fondos de cesantía- si es que tienen- para poder obtener algún ingreso, lo que además irá disminuyendo mes a mes, mientras los grandes empresarios dejan de pagar las remuneraciones y además reciben fondos de miles de millones de pesos por parte del Estado.
La votación en contra expresa igual la oposición de la derecha a una cuestión mínima de que la gente pueda optar a sacar sus propios ahorros- más aún considerando que los empresarios de las AFP los utilizan para especular e invertir en la bolsa-, en el marco de un plan impulsado por el Gobierno que sólo ha beneficiado a los empresarios en desmedro del pueblo trabajador que ha sufrido suspensiones y despidos.
Los pensionados son uno de los grupos de riesgo más débiles, no solo por encontrarse en una edad en que abordar la enfermedad del Covid-19 es compleja, sino porque también viven con pensiones miserables, que no alcanzan para fin de mes. Muchos de ellos siguen trabajando de alguna u otra forma después de jubilar porque las pensiones no alcanzan.
A la par, son quienes más sufren la crisis del sistema público. Esto, junto a las pensiones, hace que llegar a la vejez sea un sufrimiento. A este problema, el Gobierno ha otorgado un mísero bono de 50 mil pesos, para 2,7 millones de personas.
Es por esto que desde el Partido de Trabajadores Revolucionarios proponemos un aumento inmediato de las pensiones a $500.000 a todas y todos los jubilados, financiados por las AFP para salvaguardar las vidas de nuestros adultos mayores.