Durante la semana anterior y en la mayoría de instituciones educacionales volvimos a clases, dando inicio a un segundo semestre, que esperamos sea igual o más movilizado que el primero. El primer semestre de este 2022, estuvo marcado por movilizaciones estudiantiles, desde secundarios que levantaron tomas y demandas históricas del movimiento estudiantil, universidades como la universidad de Chile en JGM quienes impulsamos un movimiento con estudiantes y funcionarios en donde se lograron varios avances.
Martes 16 de agosto de 2022
Estos avances han sido frenados en última instancia, por las autoridades que dilatan las instancias de conversación, frenan todos aquellos avances y mantienen una actitud pasiva y poco dialogante. Ya a comienzos de este segundo semestre se levantas las primeras movilizaciones, estas encabezadas por la universidad Austral. En donde docentes alzan la voz en contra, de la respuesta casi nula de las autoridades que les propone subir los sueldos pero congelar el reajuste hasta el año 2024, sin tomar en cuenta la crisis inflacionaria que está viviendo el país.
A pesar de que se han visto grandes movilizaciones dentro del año, la política central en estos momentos está dirigida al escenario del plebiscito del 4 de Septiembre, debido a que los partidos del gobierno que dirigen la CONFECH no han tomado las demandas de estudiantes sino que solo han trabajado para hacerle campaña al apruebo. Un ambiente totalmente polarizado, en donde solo se ven dos caminos posibles. La política en estos días se ha visto totalmente desgastada e inclusive desesperada por ambos bandos. Se han pactado todo tipo de acuerdos, volviendo la cocina parlamentaria para calmar a los sectores políticos de la derecha. Se establecen algunos cambios , pero sabemos que se encuentran en un veremos puesto que las corrientes de derecha y centro pretenden derribar llamando a votar rechazo o desde el congreso apenas se pueda.
En la propuesta de nueva Constitución, podemos encontrar los siguientes puntos referidos a la Educación:
Art 35,
3. “Sus fines son la construcción del bien común, la justicia social, el respeto por los derechos humanos y de la naturaleza, la conciencia ecológica, la convivencia democrática entre los pueblos, la prevención de la violencia y discriminación, así como la adquisición de conocimientos, el pensamiento crítico, la capacidad creadora y el desarrollo integral de las personas considerando sus dimensiones cognitiva, física, social y emocional.”
4. “La educación se rige por los principios de cooperación, no discriminación, inclusión, justicia, participación, solidaridad, interculturalidad, enfoque de género, pluralismo y los demás principios consagrados en esta Constitución. Tiene un carácter no sexista y se desarrolla de forma contextualizada, considerando la pertenencia territorial, cultural y lingüística."
7.”La educación es de acceso universal en todos sus niveles y obligatoria desde el nivel básico hasta la educación media inclusive.”
Art 36
2. “El Estado ejerce labores de coordinación, regulación, mejoramiento y supervigilancia del Sistema. La ley determinará los requisitos para el reconocimiento oficial de estos establecimientos e instituciones."
3. “Los establecimientos y las instituciones que lo conforman están sujetos al régimen común que fije la ley, son de carácter democrático, no podrán discriminar en su acceso, se rigen por los fines y principios de este derecho y tienen prohibida toda forma de lucro.”
7. “La educación pública constituye el eje estratégico del Sistema Nacional de Educación; su ampliación y fortalecimiento es un deber primordial del Estado, para lo cual articulará, gestionará y financiará un Sistema de Educación Pública de carácter laico y gratuito, compuesto por establecimientos e instituciones estatales de todo los niveles y modalidades educativas.”
8. “El Estado debe financiar este Sistema de forma permanente, directa, pertinente y suficiente a través de aportes basales, a fin de cumplir plena y equitativamente con los fines y principios de la educación.”
Art 37
6. “Los estudios de educación superior conducentes a títulos y grados académicos iniciales serán gratuitos en las instituciones públicas y en aquellas privadas que determine la ley.”
Estos son solo algunos de los artículos más importantes sobre el derecho a la educación, que promete avances en la calidad y el acceso, y además responsabiliza al Estado por el financiamiento, aunque no dice cómo se financiará ni se estos recursos seguirán pasando desde el Estado a instituciones privadas, como pasa aún con la beca de gratuidad. De hecho estos artículos van en la misma línea de la reforma de universidades estatales de Michelle Bachelet, que no atacaba al sistema de mercado, o sea a las empresas educativas (Universidades privadas, colegios subvencionados, institutos, etc), sino que destina recursos para financiar becas, manteniendo la lógica de autofinanciamiento en universidades públicas como la U de Chile.
La Nueva Constitución habla de financiamiento basal y de acceso universal, aspectos con los cuales no podemos estar en contra, pero deja sujeta a la ley la forma en que esto se desarrollará. Por más buenas intenciones que hayan tenido quienes escribieron los artículos, dependerá del congreso traducir esto a la realidad, y sabemos que no podemos confiar en el congreso menos cuando hay una bulliciosa bancada del Partido de Kast, y el conjunto de la derecha tiene la mitad del senado, con lo que pueden bloquear cualquier ley.
Creemos que más allá de los puntos que contenga esta nueva carta magna, dependerá de nuestra propia fuerza el poder garantizar que la educación sea un derecho, financiada totalmente por el estado, abierta y al servicio del pueblo trabajador. No caigamos en la ilusión de que porque está escrito se concederá y se terminará con la educación de mercado. Aquello requiere afectar los intereses de políticos y empresarios, que no soltarán su negocio “por las buenas”.
Los partidos del gobierno quieren hacernos creer que aprobando basta, ya que desean gobernar en paz, sin movimientos en las calles. De hecho han demostrado que la única solución que están dispuestos a aplicar con quienes luchan es la represión, con las fuerzas especiales contra estudiantes o con militares contra mapuche. Nosotres desde VENCER creemos que la autoorganización es el camino para discutir democráticamente un pliego unificado de demandas entre diferentes sectores, estudiantes, funcionarias/os, profesoras/es de liceos y universidades, para reconstruir un movimiento estudiantil independiente al gobierno. Distinto a lo que quieren las y los dirigentes del CONFECH, que se han subordinado desde el comienzo de año al ritmo de Boric.
Por otro lado, creemos que la política abstencionista de colectivos como el ECP o las Brigadas territoriales (ambos presentes en el campus JGM de la Uchile) es incorrecta porque no busca dialogar con quienes son críticos al proceso constitucional, pero igualmente tienen ilusiones en que “algo puede cambiar”. Solo decir que el proceso es una farsa electoral, o llamar a no votar en el plebiscito cuestionando “la via institucional” se queda corto. Si bien podemos compartir algunas críticas al proceso, el centro para una organización que busca construirse con sectores revolucionarios es explicar lo que significa el proceso para quienes lo dirigen, y como afecta a la lucha de clases, para poder proponer una salida coherente que de perspectivas a la juventud y a la clase trabajadora.
Por eso nosotres desde VENCER y el PTR desde la misma rebelión hemos criticado y luchado en contra del desvío institucional a la lucha de clases, consagrado en el Pacto por la Paz y la Nueva Constitución. Nosotres íbamos por la huelga general para sacar al gobierno de Piñera y levantar una Asamblea Constituyente Libre y Soberana. Ante la cocina parlamentaria, nos posicionamos como una oposición por izquierda, llamando a votar apruebo en el plebiscito de entrada pero anulando la segunda papeleta, contra las dos formas de Convenciones propuestas, ya que seguimos defendiendo la ACLS.
Participamos con candidaturas con independencia de clase, haciendo público nuestro balance y críticas del proceso y defendiendo un programa anticapitalista y revolucionario. Exigiendo que les mayores de 14 años pudiesen votar y ser electos porque fueron quienes comenzaron la rebelión, además de exigir la libertar a todas y todos los presos políticos. Y hoy no depositamos ninguna confianza en la propuesta de Nueva Constitución debido a que se hizo con el fin de restaurar el régimen heredado de la dictadura, preservando los pilares económicos del neoliberalismo y concediendo algunos derechos como forma de ampliar el Estado y así cooptar a distintos movimientos como el de mujeres, indígenas y estudiantes. Y les decimos a quienes son de izquierda y tienen ilusiones y/o son críticos de la nueva constitución, que tenemos que organizarnos en común para conquistar esos derechos e ir por más. No podemos olvidar las demandas estructurales por las que nos movilizamos en la rebelión.
Desafíos para este segundo semestre
Este segundo semestre nos proponemos el desafío de aportar a la reconstrucción de un movimiento estudiantil revolucionario independiente al gobierno de Boric, que se una a funcionarias/os y al conjunto de la clase trabajadora, por un pliego unificado de demandas y un plan de acción de movilizaciones ascendentes, hasta llegar a un paro nacional efectivo. Solo así podremos afectar las ganancias e intereses capitalistas que buscan sostener le educación neoliberal que hoy tenemos.
Desde la Agrupación anticapitalista VENCER hacemos un llamado a desarrollar y recomponer el movimiento estudiantil en unificación de estudiantes universitarios y secundarios que puedan pelear en conjunto por un pliego unificado de demandas tales como: Educación, gratuita de calidad, democrática y no sexista; Educación sexual integral; Aborto legal, libre, seguro y gratuito; Fin a aula segura; Libertad a lxs presxs políticos; Desmilitarización del Wallmapu; Disolución de la policía.
No basta con que la CONFECH publique un afiche de “llamado nacional” como lo hizo con la paralización del 25 de marzo por el aumento de la BAES y que solo quede en un “hito”, sabiendo que como estudiantes y nuestra tradición de lucha podemos ir por mucho más confiando en nuestras propias fuerzas y métodos, planteando incluso luchar en unidad con docentes y trabajadores de la educación, para conquistar todas nuestras demandas.
El diagnóstico para cambiar realmente la crisis de la educación difícilmente saldrá del gobierno y de quienes han gobernado desde hace más de 30 años, como lo son los partidos de la ex concertación, quienes solo profundizaron un sistema neoliberal que precariza la educación pública. Necesitamos una educación pública gratuita universal 100% financiada por el Estado, de calidad, laica y no sexista, para cuya implementación se requieren recursos. Es por esto que se hace urgente la renacionalización de los recursos naturales bajo la administración y control de sus trabajadores y las comunidades, que permitiría desembolsar millones de pesos en un sistema público de educación realmente gratuito y de calidad en vez de que esos recursos se vayan a los bolsillos de empresarios imperialistas.
Esto solo será posible si fortalecemos al movimiento estudiantil desde los liceos, universidades y facultades, con asambleas de base y en unidad a funcionarios de la educación y trabajadores, luchando en las calles para que se cumplan las demandas del movimiento estudiantil, pero también las que durante años nos han negado al conjunto del pueblo trabajador.
Yuri Peña
Licenciado en Historia. Estudiante de pedagogía en la U de Chile. Militante de VENCER y del Partido de Trabajadores Revolucionarios