El Gobierno estadounidense impide que las agencias públicas compren productos de la empresa china. Otro capitulo de la “guerra comercial” entre ambos países.
Jueves 7 de marzo de 2019 13:31
El fabricante chino de equipos de telecomunicaciones anunció este jueves que inició una demanda contra el Gobierno de Estados Unidos, la misma se da en medio de acusaciones por espionaje a la compañía que acusa a Washington de hackear sus servidores.
El presidente de Huawei, Guo Ping, informó en una rueda de prensa sobre las acciones judiciales tomadas por la compañía con el objetivo de impugnar la sección 889 del Acta de Autorización de Defensa Nacional (NDAA por sus siglas en inglés) que impide a las agencias gubernamentales comprar productos de la compañía china.
"Esta prohibición no solo es ilegal, sino que también restringe a Huawei de participar en una competencia justa y, en última instancia, perjudica a los consumidores estadounidenses", afirmó Guo y agregó que la sección 889 es "un abuso del proceso de la ley de Estados Unidos, excluye a Huawei del debido proceso judicial, viola la separación de poderes, rompe las tradiciones legales de Estados Unidos y va en contra de la naturaleza de la misma Constitución".
Huawei es el mayor fabricante de equipos de telecomunicaciones y el segundo de teléfonos inteligentes del mundo y ha sido objeto de una amplia investigación por parte de las autoridades estadounidenses, que en diciembre pasado pidieron a la Justicia de Canadá la detención de Meng Wanzhou, la directora financiera de la compañía, tras ser acusada de violar las sanciones comerciales impuestas por Washington contra Irán.
En medio de esta crisis, Estados Unidos está presionando a países aliados y a sus proveedores de internet o servicios inalámbricos para que eviten a Huawei, acusando a Pekín por supuesto espionaje o por la posibilidad de que desactive sus redes.
El gobierno de Trump a lanzado acusaciones contra la seguridad de la tecnología 5G que desarrolla la empresa china, acusaciones que siempre han sido rechazadas por la compañía, que asegura no tener "puertas traseras" para acceder a cualquier dispositivo y controlarlo sin conocimiento del usuario.
La decisión de demandar a Estados Unidos se produce después de que la compañía haya sido acusada en el país norteamericano de 13 cargos, entre ellos espionaje industrial y fraude bancario. Washington logró influir con sus acusaciones en algunos países como Australia o Nueva Zelanda, que han mostrado recelos sobre los productos e infraestructuras ofrecidos por la compañía china.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Lu Kang, consideró este jueves que es "totalmente legítimo y comprensible" que Huawei "intente defender sus propios intereses", al tiempo que aseguró no tener constancia de posibles acciones legales al respecto por parte del Gobierno chino.
La batalla legal entre el Gobierno estadounidense y Huawei se da en el marco de la guerra comercial desatada por Trump, que tiene como uno de sus objetivos estratégicos desactivar el proyecto chino llamado “Made in China 2025”. El objetivo de Xi Jinping es competir en ramas industriales de alta tecnología a mediados de la próxima década, modificando el patrón económico de plataforma de exportación de productos con bajo valor agregado para ser competidora en los grandes nichos de inversión de capital y exportación de productos con alto valor agregado, lo que despierta la reacción de Estado Unidos.