"Es una práctica habitual" y "ya fue devuelto", justificaron desde municipio, luego de que el intendente Salvador Serenal, de Juntos por el Cambio, tomara uno de los nueve respiradores que tiene el hospital municipal, tras ser internado en una clínica privada de Junín.
Jueves 17 de junio de 2021 21:00
Este jueves, el radical Salvador Serenal, intendente de la municipalidad bonaerense de Lincoln, fue trasladado desde el hospital municipal hacia una clínica privada en otra localidad, luego de cursar once días de enfermedad por coronavirus. Insólitamente, se llevó uno de los nueve respiradores que tiene el sistema de salud público local.
Tras conocerse el hecho escandaloso, desde la municipalidad justificaron que "es una práctica habitual" y que el respirador "ya fue devuelto" porque "nunca se necesitó".
El secretario de Salud de Lincoln explicó que el traslado del intendente, hacia la clínica "Pequeña Familia" de Junín se hizo por voluntad de su familia, “para atención de eventuales complicaciones, siendo que por sus antecedentes es paciente de riesgo". Extrañamente, Salvador Serenal no había sido vacunado contra el covid-19, por no contar con comorbilidades.
El coronavirus no distingue entre ricos y pobres, pero los privilegios de clase y de casta política sí. La unificación de todo sistema de salud, público y privado, bajo la órbita del Estado y gestionado por sus trabajadores y profesionales, es una necesidad urgente para hacer frente al colapso sanitario en la segunda ola. Esta propuesta, impulsada desde el principio de la pandemia por el Frente de Izquierda - Unidad, como parte de un plan integral de emergencia, se negó a ser tratada en el Congreso tanto por el Frente de Todos, como por la oposición de derecha. Lo que no impide que de hecho, se tomen recursos del sistema público para atender pacientes en el sistema privado. Evidentemente, la "práctica habitual" del ejercicio de los privilegios, acelera los trámites.
