En 1842, el gobierno de Renania penalizó el robo de madera. Un paso en la privatización de los recursos naturales.
Lunes 30 de abril de 2018
Karl Marx escribió en 1842, dos años antes de sus Tesis sobre Feuerbach, textos sobre las transformaciones constitucionales del gobierno absolutista de Renania.
Publicó en la Gaceta Renana una crítica, jurídica, fundamentada de aquellas transformaciones: un texto que aparentemente es jurídico pero que aborda dos grandes temas.
El primero sobre la privatización del mundo, tema actual en medio de una fuerte ofensiva neoliberal. El segundo, sobre lo común, en ese tiempo expresado en la propiedad de la tierra pero válido para la defensa de los bienes comunes de la naturaleza o la sociedad.
La privatización del mundo y el despojo capitalista
El gobierno de Renania aprobó en 1842 una ley que penaliza, en primer lugar, hurto de madera. Define que es un robo. Los campesinos desposeídos, en total pauperismo, se ven obligados a diversas actividades para sobrevivir: por ejemplo juntar las ramas caídas de los árboles para comprar lo básico.
Los diputados de Renania estipularon que era un robo: 1) cuando alguien talara madera de un árbol verde. 2) cuando otro robara o hurtara madera tallada para la construcción y 3) recogiera madera o ramas caídas por el árbol en un bosque.
Karl Marx entonces cuestiona la naturaleza de la propiedad pues afirma que era una medida para privatizar bienes comunes de la naturaleza (difícilmente apropiables) para despojar a los campesinos paupérrimos.
¿De quién es la madera caída naturalmente del árbol? ¿Puede ser propiedad privada la rama que cae del árbol? ¿Puede ser propiedad privada la naturaleza?
Lo común, defender lo de todos
Efectivamente Karl Marx sostiene que el tercer punto, legislado para penalizar y castigar a los campesinos desposeídos de tierra, no es un hurto, robo o delito: el derecho a penalizarlo es el delito verdadero.
El derecho que se atribuye el gobierno de Renania es el verdadero hurto, el verdadero robo: es último que una ley diga que es suyo un bien común, de la naturaleza o de la humanidad.
Ahí está la genuina desposesión: la injusticia de la ley de apropiación de un bien que no pertenece más que a la humanidad: primero la naturaleza pero también lo común. Entonces Karl Marx defiende en derecho de los pobres a desacatar leyes injustas en defensa del bien común: defiende la ilegalidad justa.
Marx llama a la naturaleza y a ciertas formas de producción de la tierra colectiva como formas de propiedad "híbridas y colectivas" fundamentalmente atacas por el derecho capitalista para despojarnos del mundo. Con las leyes nos quieren despojar del mundo, de las experiencias, de lo que no les pertenece.
No puede resultar más actual está afirmación. En la ofensiva neoliberal las legislaciones nos privatizan injustamente del mundo y sus bienes comunes: debemos pagar por la salud, por la educación, por la información, por la comunicación, por el agua, básicamente por todo.
¿Es verdaderamente justo pagar por la educación, sabiduría, cuando el conocimiento es un bien común difícilmente apropiable por alguien?
¿Es legítimo que paguemos por el agua potable de las grandes embotelladoras, un bien común escaso, para enriquecer a un grupo parasitario capitalista?
Este texto me hace recordar la legislación del gobierno boliviano de prohibir la recolección del agua de la lluvia y de la exigencia a los indígenas aymaras del pago puntual del derecho hídrico. ¿Pagar por recolectar el agua de la lluvia? ¿De quién es verdaderamente el agua de las nubes? Dicha ley generó el poderoso movimiento de la guerra del agua.
En Baja California el movimiento Mexicali Resiste defiende el agua, bien común finito de la naturaleza, contra el derecho de apropiación injusto de la Constellations Brands.
El joven Karl Marx y sus textos de juventud, poco leídos, hoy sonríen por su actualidad: definitivamente siguen frescos para entender el nivel de ataque que vivimos durante la ofensiva neoliberal.
Referencia
Marx, Karl, “Los debates sobre la Ley acerca del robo de leña”, en Marx, K., En defensa de la libertad. Los artículos de la Gaceta Renana. 1842-1843, Fernando Torres Editor, Valencia, 1983, traducción de Juan Luís Vermal.
Bensaid, Daniel, Los desposeídos, Prometeo, Argentina. 2013