Ahora el Ministro Varela nos manda a hacer bingos para resolver las deficiencias de las instituciones educativas, porque si no, se cae en "los riesgos del asistencialismo". Porque si no, "la gente no se hace cargo de sus problemas, sino que quiere que el resto lo haga".
Nancy López Profesora. Agrupación Nuestra Clase
Lunes 23 de julio de 2018
A lo que el Ministro hace caso omiso, es a que los problemas que hoy se viven en los colegios no solamente son las goteras de los techos (que en todo caso son bastante extendidas en las escuelas y liceos públicos), sino que de fondo, lo que hay es lo que desde el movimiento estudiantil ya hemos denunciado hace años: lo que hay es una educación para ricos y otra educación para pobres.
Esa "educación para pobres" es de la que el Estado no se hace cargo, porque sigue privilegiando el traspaso de recursos vía subvención a los privados, a empresarios de la educación básica y media, a la vez que año a año se siguen cerrando escuelas públicas que no cuentan con los recursos necesarios para su funcionamiento.
Lo expresado por el Ministro no es un error, ni una malinterpretación. Lo que hay es una visión de educación donde el Estado no debe cumplir un rol como garante de derechos, y donde son los privados quienes tienen preponderancia, porque incluso la educación es un mercado que además el Estado debe "potenciar". Aquello es lo que hace años nos propusimos combatir, y es esa visión la que debemos vencer, porque la educación debe ser un derecho para todos/as por igual, y porque no es posible que los empresarios sigan haciendo negocio con cada uno de nuestros derechos.
Pueden cambiar al Ministro, pero el problema de fondo se mantiene, porque ni la Nueva Mayoría en sus años de gobierno quiso terminar con el mercado en la educación y, menos aún, lo hará hoy la derecha. Al menos no por buena voluntad.
Te puede interesar:Nuestra educación no se financia con bingos Ministro Varela
Nancy López
Profesora. Agrupación Nuestra Clase
