Con el 96% escrutado el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) anunció que es "irreversible" el triunfo de Benítez. Entre símbolos de derechización del régimen y denuncias de irregularidades de la oposición, el candidato colorado y defensor de la dictadura de Stroessner es declarado ganador.
Domingo 22 de abril de 2018 20:00
La autoridad electoral aseguraron ante los medios de comunicación que los resultados preliminares daban un 46,49% de los votos para el candidato oficialista, Mario Benítez, frente al 42,72% del liberal Efraín Alegre, un 3% de diferencia sobre el candidato de la opositora Alianza Ganar (Partido Liberal y Frente Guasú).
Aunque la ventaja no sería tan abultada como vaticinaban las encuestas, al triunfo del conservador Benitez se suman los resultados parciales que dan también la victoria al Partido Colorado en la mayoría de los 17 departamentos del país, cuyas gobernaciones también están en disputa en los comicios.
Los resultados de las elecciones parlamentarias, donde el ex presidente Fernando Lugo busca la reelección como Senador, se conocerán recién en unos días.
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Durante la mañana y tras emitir su voto, Mario Benítez fue a visitar la tumba de su padre, un claro gesto político. Hijo del secretario privado del dictador Alfredo Stroessner, Benitez ha reivindicado públicamente la sangrienta dictadura que asoló el país entre 1954 y 1989.
Nadie duda que continuará las políticas de ajuste que viene implementando el presidente Cartes que en los últimos años ha seguido las políticas emanadas de Washington al pie de la letra, triplicando la deuda externa con el único objetivo de fomentar la especulación financiera y recortado drásticamente los servicios públicos como la salud y educación entre otras medidas.
Benitez había criticado duramente a Cartes durante las elecciones internas del Partido Colorado en diciembre, lo que le permitió derrotar al candidato de Cartes. De todas formas, enseguida cerraron filas para dar continuidad a las medidas antipopulares del actual gobierno.
Por su parte, la Alianza Ganar, liderada por el Partido Liberal se limitó a criticar al gobierno sin presentar ninguna alternativa al ajuste. Nada que pueda sorprender de un partido de empresarios, impulsor del golpe institucional contra Lugo en 2012 y parte del régimen político paraguayo.
El Frente Guasú, que reeditó la coalición con los liberales, pero ahora resignado al segundo lugar (en 2008, había encabezado esta alianza). Ahora busca ampliar su bancada parlamentaria. En particular, conseguir la reelección de Fernando Lugo como senador que se mantiene como el político más popular del país.
Ya desde temprano, el Frente Guasú hizo graves denuncias de irregularidades. Ricardo Canese, diputado del Parlasur por el FG, sostuvo que en el 40 % de las mesas se ha excluido ilegalmente la presencia de fiscales de su partido.
Esta denuncia cobra especial sentido en un país donde el Partido Colorado, que siguió gobernando tras la dictadura de Stroessner bajo un régimen de "democracia tutelada" -controlando todas las instituciones con mano de hierro-, siempre se caracterizó por utilizar el fraude electoral de forma sistemática.
