DENUNCIAS CRUZADAS. El show de Natacha: de la mesa de Mirtha a las cloacas de los espías

Desde que el sábado pasado una invitada al programa de Mirtha Legrand acusó a periodistas, actores y referentes políticos en casos de pedofilia, que involucra a clubes de fútbol, explotó una guerra de denuncias cruzadas.

Aunque la protagonista estrella de esta trama es la AFI, la agencia de los servicios de inteligencia del Estado.

Natacha Jaitt, la Mata Hari

Cualquier incautó que estaba viendo el programa de la diva, habrá pensado que nadie podía tomar en serio las denuncias de la mediática Natacha Jaitt, que siempre está envuelta en algún escándalo de la farándula. Pero esta vez Jaitt se permitió contar en La Noche de Mirtha, que sus denuncia contra quienes acusa de ser clientes de la “red de pedofilia más grande del país”, se basan en una “investigación”, porque ella trabaja haciendo inteligencia para "una empresa", a la que no identificó.

Sobre la mesa de Mirtha arrojó los nombres e iniciales de supuestos "clientes" de la red que se investiga en relación con el fútbol. Ella fue la protagonista de la “mesaza”, y casi la única que habló durante toda la noche, mientras que la conductora la escuchaba sin interrumpir. Algo extraño en la Chiqui, acostumbrada a la interrupción permanente. Mientras que el productor del programa, Nacho Viale, nieto de la diva, en las horas previas a comenzar “La Noche de Mirtha” envió una serie de Tuits advirtiendo que la “mesaza” explotaría. Luego del escándalo salió a disculparse por el programa y dijo "Mirtha está mal, pero la responsabilidad sobre lo que pasó es mía".

Primero se sospechó que el programa estaba diseñado para obtener algunos puntos más de rating, pero después aparecieron indicios de que se trataba de una operación y que detrás estaban los servicios de inteligencia, en particular el exagente Jaime Stiuso.

Al programa del sábado por la noche, Natacha Jaitt asistió acompañada de varias personas. Una de ellas fue presentada como su asesora de moda, Ana María Polero, de quien poco después se supo que se trata de una exagente de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), cercana al exdirector de Inteligencia sobre Delincuencia Económica y Financiera de la AFI, Eduardo Miragaya. Fue despedido del organismo tras una denuncia contra él escrita por el periodista Carlos Pagni. Poco después Polero fue despedida.

El canal de noticias TN, fue uno de los medios que reveló la identidad de la hoy “asesora de moda”. La periodista Mercedes Ninci tuiteo una captura de pantalla del canal cuando esto informaban.

Esta fue la mujer que me atacó fuera de cámara en el Programa de Mirtha pic.twitter.com/8gR00znzMJ

— Mercedes Ninci (@mercedesninci1) 4 de abril de 2018

La interna en la AFI

La presencia de Polero abre a otras hipótesis. En la red de espías ella es aliada de la misma Silvia Majdalani quien a su vez tiene una relación con Francisco Larcher, el jefe de la SIDE durante el kirchnerismo. Y a su vez Larcher es un aliado de Jaime Stiuso. Y es así como Majdalani, la única que hoy esta dentro de la oficina de inteligencia, responde a las ordenes de Daniel Angelici y Antonio Stiuso.

Pero la interna de los espías no se cierra aquí. La “Señora 8” de la AFI está enfrentada con Gustavo Arribas, titular del organismo de inteligencia. Arribas no estaría transitando su mejor momento, volvió a ser acusado por recibir una transferencia millonaria de Odebrecht.

La trama de los espías y espiados

El periodista Carlos Pagni, uno de los señalados por la mediática, hizo su descargo en su programa Odisea Argentina. Allí acusó a Mirtha Legrand y dijo que “ofreció su programa para una operación, donde se dijeron una cantidad de disparates. Natacha confesó que fue contratada por una empresa, sin decir cuál, que le pagó para hacer tareas de espionaje clandestino". El periodista agregó "como no sabemos casi nada, y es muy difícil que el Estado se haga cargo de estas revelaciones, le he pedido a mis abogados que formulen una denuncia en la Justicia para que se investigue qué tipo de operación de inteligencia se ha realizado, según lo que esta persona confesó".

Alejandro Fantino fue otros de los apuntados por Natacha. El conductor de Animales Sueltos se mostró muy enojado con el programa de Mirtha Legrand y en particular con Nacho Viale. Además dijo saber "quién está detrás de esta operación" y desmintió las acusaciones de la mediática.

Gustavo Vera, otros de los acusados, vinculó a Natacha Jaitt con el exespía Stiuso “los servicios me atacan porque les hice perder plata", dijo y agregó "Jaitt nos viene atacando porque logramos cerrar todos los cabarets y whiskerías, un golpe mortal para muchos. Esto generó un odio tremendo a los que ganaban mucha plata con este negocio, vinculado a los servicios". Vera vinculó a Natacha con Jaime Stiuso y dijo que el exSide, hoy mano de obra desocupada, está vinculado con los empresarios de la noche.

El dirigente de La Alameda, y amigo del Papa, también relacionó al exagente con Guillermo Coppola. "Es muy claro lo que pasa. La relación de Coppola con Stiuso es antigua. Hay videos que lo prueban. Van en contra mío porque denuncié a Stiuso y su vinculación con la trata. El mundo del proxenetismo, por un lado, y la banda de Stiuso por otro. Me calumnian porque estoy tocando intereses complicados", agregó.

Por su parte los jefes de la AFI Gustavo Arribas y Silvia Majdalani presentaron una denuncia penal en la Justicia Federal para que se investiguen las actividades de inteligencia ilegales denunciadas en el marco de las declaraciones de Natacha Jaitt.

Los jefes de los espías, a su vez, denunciaron penalmente a Gustavo Vera, porque éste había dicho que estaba siendo perseguido por servicios de inteligencia paralelos y que tienen "relaciones promiscuas con Arribas y Majdalani y también por fuera con sus propias empresas haciendo inteligencias paralelas para servicios extranjeros y para su propio provecho".

Inesperadamente, en defensa de los periodistas señalados por Jaitt, apareció el Procurador General de la Provincia de Buenos Aires. El jefe de los fiscales, Julio Conte Grand, realizó una conferencia de prensa, allí insistió que “ningún periodista ni artista está involucrado en la causa” que investiga la red de pedofilia en la que están involucrados clubes de fútbol. Fue tan persistente en desvincular a los periodistas sobre estas causas, que levantó sospechas que el único objetivo de la conferencia fue para salvar a los periodistas, afines al macrismo.

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Mientras que el periodista Nicolás Wiñaski, experto en operaciones a favor del Gobierno, dijo en su programa de TN que “según fuentes judiciales inobjetables, se estaba empezando a detectar la red de pedofilia más grande de la historia, donde hay periodistas, deportistas, artistas celebridades involucradas, señalados por los chicos”.

Declaraciones nada ingenuas de este “periodista”, y que abre otra hipótesis. Nacho Viale no se habría “cortado solo”, sino que todo el Grupo Clarín es parte de esta operación contra los periodistas de medios de la competencia.

Por su parte las asociaciones periodísticas, Fopea y Adepa, pidieron responsabilidad a la hora de informar. Adepa advirtió que las declaraciones que se escucharon "pueden encubrir meras campañas de deslegitimación de periodistas profesionales e incluso configurar represalias en razón de su trabajo".

En esta trama sórdida de los espías

A raíz de la denuncia que realizó el periodista Carlos Pagni, el fiscal Federico delgado, llamó a declarar a Natacha Jaitt. La mediática solo dijo "yo no hablo de Carlos Pagni, dije CP, hablo de Carlos Pérez". No respondió las preguntas del fiscal, se fue corriendo y sin firmar. Por su parte el fiscal Delgado la denunciaría por no haber cumplido con la carga de ser testigo.

En esta oscura trama de espías y espiados el establishment periodístico se mostró sorprendido e indignado por lo sucedido. Cuando durante años se valieron de las cloacas de los servicios para armar operaciones contra algún adversario de turno. Incluso la jueza Arroyo Salgado procesó a ocho acusados en una causa por espionaje. Entre ellos se encuentra Carlos Pagni, Bautista Yofre, Héctor Alderete, Roberto García. Se investigaba también los delitos de asociación ilícita, sustracción de documentos y encubrimiento agravado. Aunque después de la muerte del fiscal Nisma, la jueza decidió sobreseerlos.

Coquetear con los servicios, a veces les puede jugar una mala pasada.