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Red Internacional
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Elecciones Universitat de Barcelona | Contracorrent – Pa i Roses: por un movimiento estudiantil antiimperialista con la clase trabajadora, contra el rearme y el genocidio en Palestina

Próximamente tendrán lugar las elecciones estudiantiles en la Universitat de Barcelona (UB). Desde Contracorrent y Pa i Roses, hacemos pública nuestra candidatura denunciando la complicidad de la universidad y los gobiernos con el genocidio contra el pueblo palestino, el rearme imperialista y la Europa fortaleza.

Jueves 2 de mayo

El próximo 9 de mayo se celebran elecciones universitarias en la Universitat de Barcelona. Desde Contracorrent y Pa i Roses, nos presentamos para levantar una voz que, desde el movimiento estudiantil, luche contra el rearme imperialista, el genocidio en Palestina y la militarización de las fronteras. Porque apostamos por construir un movimiento estudiantil antiimperialista, autoorganizado y desde bajo, junto a la clase trabajadora, como parte de la lucha por una salida anticapitalista y socialista.

Así, nuestra candidatura estará presente en las votaciones para el Consell d’Estudis d’Història, Consell d’Estudis de Filologia, Facultat de Geografa i Història, Facultat de Filologia i Comunicació i Claustre.



1. Alto el genocidio contra el pueblo palestino! Basta de complicidad: que la UB rompa relaciones académicas y económicas con el Estado de Israel y sus empresas!

Ante el genocidio llevado a cabo por parte del Estado de Israel, hace falta que los y las estudiantes nos posicionamos con la lucha del pueblo palestino. Las universidades catalanas y españolas se encuentran entre las instituciones que, mediante convenios e investigaciones vinculadas a Israel, blanquean su política sionista criminal.

Un ejemplo es la cátedra que la UB le otorga a la empresa Siemens. Se trata de la principal contratista de la Interconector Euro-Asia, un cable eléctrico submarino que prevé conectar los territorios palestinos ocupados con Europa para la exportación de energía por parte de Israel. La UB también mantiene fuertes relaciones con el Banco Santader, el cual invirtió 1.500 millones de euros en compañías que están haciendo negocio con la masacre en Gaza, según el informe de Inversiones Insostibles. En la misma línea, la Universitat Politècnica de Catalunya tiene vínculos con la empresa ICL, encargada de la gestión de las minas de Súria y Sallent de las cuales se obtiene el material empleado para hacer las bombas de fósforo blanco. Precisamente, las mismas minas donde hace un año murieron estudiantes que desarrollaban parte de su máster y doctorado.

La complicidad de las universidades es la continuación del blanqueamiento y apoyo dado al Estado de Israel desde los EEUU y la Unión Europea. Escuchamos al gobierno del PSOE y Sumar hablar de la solución de los dos Estados, la cual ha demostrado ser un absoluto fracaso que únicamente ha servido para legitimar el Estado sionista. Pero además, el discurso del gobierno “progresista” es totalmente hipócrita y cómplice del genocidio, pues continúa manteniendo relaciones con Israel y vendiéndole armas. Desde la universidad también queremos levantar la voz para exigir la ruptura de todo tipo de relaciones con Israel por parte del Estado español.



2. Contra el rearme imperialista: fuera de la universidad las empresas que hacen negocio con la guerra! Ruptura de convenios y fin de las investigaciones con aplicaciones militares!

Mientras avalan la masacre en Palestina, los gobiernos imperialistas hablan de rearmarse para defender las “libertades” y los “valores”. El anterior gobierno del PSOE y Unidas Podemos aumentó el presupuesto militar de manera histórica hasta superar los 27.000 millones de euros, un incremento que continúa con la coalición de Sumar.

Nuevamente, la Universitat de Barcelona presenta vínculos con los responsables de estas políticas. Por ejemplo, encontramos una cátedra impulsada por la Comisión Europea. Desde este órgano de la UE se ha promovido el Fondo Europeo de Defensa (FED) con un presupuesto de 1.166 millones de euros para las investigaciones militares. 42 de los 60 proyectos aprobados tienen participación española, incluyendo empresas y universidades. Telefónica es una de las entidades implicadas y, una vez más, observamos sus vínculos con la UB por vía de la cátedra que impulsa la empresa.

A la vez, la militarización de las fronteras es parte del reforzamiento del imperialismo europeo. La derecha catalanista y españolista crece con discursos racistas haciendo llamamientos contra las personas migrantes. Pero el gobierno “progresista” – con la presencia cómplice de Podemos – ha promovido el pacto contra la migración en la UE, asesinando en la frontera y vendiendo definitivamente el Sáhara Occidental. Así, los “progresistas” han acabado blanqueándole buena parte de la agenda a la derecha.

En el marco de las tensiones, nosotros lo tenemos claro: la invasión reaccionaria de Putin ha sido en defensa de la oligarquía rusa, igual que el rearme de las grandes potencias es para defender sus intereses imperialistas y los negocios de sus multinacionales. Porque el gobierno “progresista” es imperialista. Ni Putin ni OTAN.


3. Solidaridad con las estudiantes represaliadas: contra la represiva Ley de Convivencia Universitaria (LCU) y la persecución al movimiento estudiantil!

En estos momentos estamos viendo como el movimiento estudiantil empieza a levantarse en los EE.UU para denunciar el genocidio contra el pueblo palestino. Centenares de estudiantes acampan en los campus para exigir el fin de la complicidad de las instituciones académicas y señalar el papel criminal del gobierno de Joe Biden. La respuesta de la casta que dirige la universidad es la represión, dejando decenas de detenidas por la policía.

Pero las ocupaciones se extienden: estudiantes de SciencePo en París, la Sorbona, Berlín o incluso acampando en la Universitat de València... Nos solidarizamos con todas las compañeras represaliadas y exigimos su liberación, así como el fin de todas las causas. Porque la represión nos afecta a todas, como nuestro compañero Anasse Kazib, obrero ferroviario y militante de Révolution Permanente, el cual es perseguido por el gobierno de Macron por haberse solidarizado con la lucha del pueblo palestino.

El Estado español todavía no se encuentra tan a la ofensiva como Alemania, Francia o los EEUU, pero en los últimos meses ha demostrado que cuando hace falta ejerce la represión contra aquellos y aquellas que nos solidarizamos con Palestina. Lo hemos visto con las detenciones de activistas por Palestina llevadas a cabo por los Mossos d’Esquadra de la Generalitat o, incluso, en el caso de nuestra organización, con compañeras que en Madrid han sido multadas, junto con otros estudiantes y organizaciones universitarias, por haber participado el año pasado de la protesta contra la embajadora de Israel en la Complutense.

Hace tiempo que denunciamos la normalización de la presencia de la policía en los campus y el aumento represivo hacia el movimiento estudiantil. La Ley de Conviviencia Universitaria (LCUE) promovida por Unidas Podemos ha servido para hacer relegitimar la persecución contra la organización estudiantil. Por eso, seguimos exigiendo su derogación.


4. Por una universidad gratuita y libre de empresas: ni un euro para presupuestos militares! Impuestos extraordinarios a la banca para financiar la educación!

La elitización de la universidad es un proceso creciente desde hace demasiados años. Matrículas de más de mil euros, imposibilidad para compatibilizar estudios y trabajo, trabajos precarios... Hacen cada vez más difícil que los hijos e hijas de la clase trabajadora podamos acceder a la universidad o acabar la carrera.

Nos dicen que no hay dinero, pero la realidad es que los presupuestos militares son 20 veces más de lo que costaría hacer la universidad gratuita. A la vez, la banca española obtuvo más de 26 mil millones de beneficio en 2023 entre el Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Banc Sabadell y Bankinter (una cifra récord). Son las mismas entidades que especulan con la vivienda e invierten en combustibles fósiles destruyendo el planeta – 75 mil millones entre Banco Santander, BBVA y La Caixa (2016-2021).

Se tiene que decir claramente: el aumento de los presupuestos militares es la continuación de la política imperialista por otra vía. Porque – insistimos – el gobierno “progresista” también es imperialista.


5. Por una universidad gestionada democráticamente por estudiantes, docentes y trabajadores

Somos conscientes que la universidad es una institución gobernada por una casta de rectorados y decanatos aliados con las grandes empresas y las políticas de los gobiernos de la Generalitat y el Estado español.

Las votaciones ponderadas en los órganos de decisión hace que la influencia real del alumnado sea casi inexistente. Además, el Consell Social – el órgano que representa los intereses de las empresas en la universidad – es quien acaba decidiendo sobre presupuestos, investigaciones y otros temas centrales. Entre las personas que forman parte, se encuentra Nuria Aymerich Rocavert, autora de un libro sobre los Mossos d’Esquadra y ex-directora de l’Institut de Seguretat Pública de Catalunya - Escola de Policia i Escola de Bombers i Protecció Civil. Sabemos que supone la policía para los y las que luchamos: represión, infiltraciones y detenciones.

A la vez, se crean “comisiones de igualdad” impulsadas por la propia casta universitaria como el lavado de cara para ocultar las violencias del capitalismo patriarcal en la universidad; se diseñan protocolos en los cuales la mayoría de la comunidad universitaria – especialmente las estudiantes – no hemos tenido participación y se nos niega cualquier tipo de control real.

Conocedores de todas estas limitaciones, desde Contracorrent y Pa i Roses nos presentamos a las elecciones para levantar una voz desde el movimiento estudiantil que cuestione la universidad de clase y apunte en la lucha contra esta sociedad de clases. Ante las violencias del capitalismo patriarcal, creemos necesario impulsar comisiones de mujeres independientes de la casta universitaria, formadas por una mayoría estudiantil junto con docentes y no docentes contra todas las formas de violencia machista en las facultades: desde la revisión de los planes docentes y la respuesta ante los casos de acoso hasta la precarización de las trabajadoras de la universidad en forma de subcontratación.

Por eso, defendemos la internalización de todos los servicios de la universidad. Nuestra perspectiva es la de una universidad gestionada democráticamente por estudiantes, docentes y trabajadoras para poner el conocimiento al servicio de las verdaderas necesidades sociales, libre de la injerencia del mercado.

Luchar efectivamente por todas las demandas planteadas pasa por impulsar el movimiento estudiantil autoorganizado, basado en grandes asambleas en cada facultad, junto a la lucha de la clase trabajadora.

El 9 de mayo vota Contracorrent – Pa i Roses a las elecciones a Claustre y Junta de Facultat y, sobre todo, súmate a construir una juventud anticapitalista, socialista y revolucionaria.